/ martes 9 de marzo de 2021

8M-2021, los datos duros

Como una muestra inicial de lo impactante de los datos duros de la pandemia sanitaria, en el aspecto laboral, durante 2020, más de un millón de mujeres dejaron o perdieron su trabajo, lo que significó una disminución del 5.2% en la cifra de mujeres ocupadas.

Así mismo, las trabajadoras independientes que participan mayoritariamente en el sector terciario (81.2%) en actividades de comercio, restaurantes y servicios diversos, siendo estos de los más afectados por las medidas de distanciamiento social implementadas para contener la pandemia por Covid-19; además, de que la brecha de género en la carga total de trabajo (remunerado y no remunerado) es de 13.4 horas semanales en promedio y de que la mayor carga de trabajo para las mujeres se refleja en menor disposición de tiempo libre: en promedio 4.2 horas a la semana, un último dato adverso es de que el 17.9% de los hogares están compuestos por una mujer sin cónyuge y con hijas.

Pero, también hay datos relevantes y promisorios: la tasa de participación económica de las mujeres aumentó de 33.5 a 49.1 por ciento entre 2010 y 2020. Si bien el porcentaje de mujeres económicamente activas incrementa con el nivel de escolaridad, aun entre quienes tienen educación superior, 3 de cada 10 permanecen fuera del mercado laboral. Las mujeres emprendedoras son propietarias de un tercio (36.6%) de los establecimientos micro, pequeños y medianos de manufacturas, comercio y servicios privados no financieros (Mipymes), y ocupan 24.7% del personal en este tipo de empresas. Las mujeres propietarias contratan más mujeres para trabajar, aproximadamente dos mujeres remuneradas por cada hombre. Además, 86.1% del personal en empresas con una mujer como propietaria permanece empleado todo el año; del total de la población ocupada de 25 años y más que se desempeña en puestos directivos de los sectores público, privado y social, 39.0% son mujeres. La menor brecha de género ocurre en el grupo de edad de 25 a 44 años, en el que las mujeres que se desempeñan como funcionarias o directivas representan el 43.4 por ciento. (Inegi).

Respecto a la otra pandemia, la de la violencia que se vive en México y que sufren las mujeres, a la fecha, los registros de las mujeres desaparecidas y no localizadas, asciende a 20,939 mujeres y niñas; de ellas, las adolescentes entre 15 y 19 años, son las más afectadas con 5,522 y les siguen las que tienen entre 20 y 24 años de edad, con 2,591 mujeres jóvenes.

Sobre los lugares donde las mujeres desaparecidas fueron encontradas sin vida, figuran los siguientes estados de mayor a menores casos: Estado de México, Tamaulipas, Jalisco, Sinaloa, Chihuahua, Puebla y CDMX. Estas estadísticas refieren al periodo de 1964 al día de ayer y corresponden al Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas de la Comisión Nacional de Búsqueda, de la Secretaría de Gobernación.

Por otra parte, en el marco de la contingencia sanitaria, tan sólo en los primeros seis meses del pasado año del 2020, se registraron 1,844 homicidios de mujeres, de acuerdo con el registro preliminar de defunciones por homicidio del Inegi.

Así mismo, en las estadísticas del Secretariado Nacional de Seguridad Pública se muestra que en el período que comprende 2019 y 2020 se presentaron poco más de 150 mil denuncias por delitos de tipo sexual.

pravilacota11@gmail.com,

@PR_Avila

Economista (UNISON), Maestría en Administración Pública (UACh) y profesor de asignaturas en la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Chihuahua.

Como una muestra inicial de lo impactante de los datos duros de la pandemia sanitaria, en el aspecto laboral, durante 2020, más de un millón de mujeres dejaron o perdieron su trabajo, lo que significó una disminución del 5.2% en la cifra de mujeres ocupadas.

Así mismo, las trabajadoras independientes que participan mayoritariamente en el sector terciario (81.2%) en actividades de comercio, restaurantes y servicios diversos, siendo estos de los más afectados por las medidas de distanciamiento social implementadas para contener la pandemia por Covid-19; además, de que la brecha de género en la carga total de trabajo (remunerado y no remunerado) es de 13.4 horas semanales en promedio y de que la mayor carga de trabajo para las mujeres se refleja en menor disposición de tiempo libre: en promedio 4.2 horas a la semana, un último dato adverso es de que el 17.9% de los hogares están compuestos por una mujer sin cónyuge y con hijas.

Pero, también hay datos relevantes y promisorios: la tasa de participación económica de las mujeres aumentó de 33.5 a 49.1 por ciento entre 2010 y 2020. Si bien el porcentaje de mujeres económicamente activas incrementa con el nivel de escolaridad, aun entre quienes tienen educación superior, 3 de cada 10 permanecen fuera del mercado laboral. Las mujeres emprendedoras son propietarias de un tercio (36.6%) de los establecimientos micro, pequeños y medianos de manufacturas, comercio y servicios privados no financieros (Mipymes), y ocupan 24.7% del personal en este tipo de empresas. Las mujeres propietarias contratan más mujeres para trabajar, aproximadamente dos mujeres remuneradas por cada hombre. Además, 86.1% del personal en empresas con una mujer como propietaria permanece empleado todo el año; del total de la población ocupada de 25 años y más que se desempeña en puestos directivos de los sectores público, privado y social, 39.0% son mujeres. La menor brecha de género ocurre en el grupo de edad de 25 a 44 años, en el que las mujeres que se desempeñan como funcionarias o directivas representan el 43.4 por ciento. (Inegi).

Respecto a la otra pandemia, la de la violencia que se vive en México y que sufren las mujeres, a la fecha, los registros de las mujeres desaparecidas y no localizadas, asciende a 20,939 mujeres y niñas; de ellas, las adolescentes entre 15 y 19 años, son las más afectadas con 5,522 y les siguen las que tienen entre 20 y 24 años de edad, con 2,591 mujeres jóvenes.

Sobre los lugares donde las mujeres desaparecidas fueron encontradas sin vida, figuran los siguientes estados de mayor a menores casos: Estado de México, Tamaulipas, Jalisco, Sinaloa, Chihuahua, Puebla y CDMX. Estas estadísticas refieren al periodo de 1964 al día de ayer y corresponden al Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas de la Comisión Nacional de Búsqueda, de la Secretaría de Gobernación.

Por otra parte, en el marco de la contingencia sanitaria, tan sólo en los primeros seis meses del pasado año del 2020, se registraron 1,844 homicidios de mujeres, de acuerdo con el registro preliminar de defunciones por homicidio del Inegi.

Así mismo, en las estadísticas del Secretariado Nacional de Seguridad Pública se muestra que en el período que comprende 2019 y 2020 se presentaron poco más de 150 mil denuncias por delitos de tipo sexual.

pravilacota11@gmail.com,

@PR_Avila

Economista (UNISON), Maestría en Administración Pública (UACh) y profesor de asignaturas en la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Chihuahua.