/ viernes 1 de junio de 2018

Alejandro Gutiérrez: ¿Preso político?

Luego de que Yeidckol Polevnsky, actual dirigente nacional de Morena, asegurara que Alejandro Gutiérrez Gutiérrez es un preso político del gobierno de Chihuahua, fue necesario investigar la definición del término “preso político” para poder comprender mejor la magnitud de dicha aseveración.

Lo cierto es que la labor de investigación no fue nada sencilla porque, en realidad, no hay una definición única que, a nivel internacional, permita determinar claramente dicha condición; no obstante, al analizar las distintas explicaciones que se pueden encontrar al respecto, es evidente que Alejandro Gutiérrez (también conocido como la Coneja) no es un preso político.

En términos generales, un preso político es aquella persona a la que se le mantenga en la cárcel o detenida sin haber cometido un delito tipificado en la ley, sino porque sus ideas suponen un desafío o una amenaza para el sistema político establecido.

En ese contexto, y considerando que Gutiérrez fue detenido, vinculado a proceso y se le dictó prisión preventiva por el delito de peculado agravado (tipificado en la ley) por su presunta participación en la desviación de -al menos- 250 mdp del erario de Chihuahua para financiar campañas electorales del PRI en 2016, resulta “inexplicable” que la líder nacional de Morena vea a Gutiérrez como un preso político.

Como ya se sabe, después de la polémica que, con justa razón, causó (incluso entre los simpatizantes de Morena) lo dicho por Polevnsky, la líder de Morena trató de arreglar el problema argumentando falsamente (vía Twitter) que sus declaraciones fueron tergiversadas y distorsionadas.

Posteriormente, y debido a la presión de la opinión pública, no le quedó otro “remedio” que pedir disculpas. “Si mis palabras ofendieron o se entendieron mal, ofrezco una disculpa sincera”, tuiteó Polevnsky.

Con lo sucedido, podría suponerse que a Yeidckol Polevnsky ya le quedó muy claro que en Chihuahua sí hay políticos presos, pero no presos políticos y que, ahora, ella es presa de sus propias palabras.

Y por si aún queda alguna duda de lo que es un preso político (término que, de ninguna forma, aplica a Alejandro Gutiérrez), en esta ocasión concluyo con lo dicho alguna vez por el activista estadounidense Leonard Peltier: “Un prisionero político es alguien que está luchando por los derechos y la libertad de su pueblo y está encarcelado sólo por eso”.




laecita.wordpress.com

laecita@gmail.com


Luego de que Yeidckol Polevnsky, actual dirigente nacional de Morena, asegurara que Alejandro Gutiérrez Gutiérrez es un preso político del gobierno de Chihuahua, fue necesario investigar la definición del término “preso político” para poder comprender mejor la magnitud de dicha aseveración.

Lo cierto es que la labor de investigación no fue nada sencilla porque, en realidad, no hay una definición única que, a nivel internacional, permita determinar claramente dicha condición; no obstante, al analizar las distintas explicaciones que se pueden encontrar al respecto, es evidente que Alejandro Gutiérrez (también conocido como la Coneja) no es un preso político.

En términos generales, un preso político es aquella persona a la que se le mantenga en la cárcel o detenida sin haber cometido un delito tipificado en la ley, sino porque sus ideas suponen un desafío o una amenaza para el sistema político establecido.

En ese contexto, y considerando que Gutiérrez fue detenido, vinculado a proceso y se le dictó prisión preventiva por el delito de peculado agravado (tipificado en la ley) por su presunta participación en la desviación de -al menos- 250 mdp del erario de Chihuahua para financiar campañas electorales del PRI en 2016, resulta “inexplicable” que la líder nacional de Morena vea a Gutiérrez como un preso político.

Como ya se sabe, después de la polémica que, con justa razón, causó (incluso entre los simpatizantes de Morena) lo dicho por Polevnsky, la líder de Morena trató de arreglar el problema argumentando falsamente (vía Twitter) que sus declaraciones fueron tergiversadas y distorsionadas.

Posteriormente, y debido a la presión de la opinión pública, no le quedó otro “remedio” que pedir disculpas. “Si mis palabras ofendieron o se entendieron mal, ofrezco una disculpa sincera”, tuiteó Polevnsky.

Con lo sucedido, podría suponerse que a Yeidckol Polevnsky ya le quedó muy claro que en Chihuahua sí hay políticos presos, pero no presos políticos y que, ahora, ella es presa de sus propias palabras.

Y por si aún queda alguna duda de lo que es un preso político (término que, de ninguna forma, aplica a Alejandro Gutiérrez), en esta ocasión concluyo con lo dicho alguna vez por el activista estadounidense Leonard Peltier: “Un prisionero político es alguien que está luchando por los derechos y la libertad de su pueblo y está encarcelado sólo por eso”.




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