Hace tres semanas participé en el programa sabatino de la Aechi que se transmite de 15 a 16 horas por Antena 102.5 FM. Ya en cabina supe que tendríamos “un invitado de lujo” así, mientras llegaba platicamos del gobernador electo de Baja California, a quien el Congreso local le amplió el mandato de dos a cinco años.
“Trepidante, dice Notimex, la historia de Jaime Bonilla: tan sólo en 8 años de carrera política escaló muchos peldaños... meteórica, como emprendedor, pues ha llegado a estar en la cumbre del empresariado en los sectores noticioso, deportivo y maquilador”.
Jaime Bonilla es ingeniero industrial egresado de la UNAM, donde no aparecen ni título ni cédula profesional. “Presume su maestría en Administración Pública de San Diego, California”. Se dice orgullosamente tijuanense, pero vive en San Diego. Trabajó en el Departamento de Aguas de Otay, de 2000 a 2015.
En política fue diputado plurinominal por el PT (2012-2015).
En 2018 fue candidato al Senado por Baja California por la coalición Juntos Haremos Historia y ganó. En diciembre el presidente Andrés Manuel López Obrador lo designó coordinador estatal del Gobierno Federal, de ahí a candidato a la gubernatura por Morena en Baja California, que ganó.
Como ciudadano estadunidense militó en el Partido Republicano. Financió la campaña del desaparecido candidato a la presidencia del país vecino, John McCain III.
Como amante del beisbol, es propietario de un palco en el estadio de los Padres de San Diego; en 2016, Jaime Bonilla invitó al ahora presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, al famoso Juego de las Estrellas.
Con la calidad de político, empresario y deportista que nos describe Notimex, se explica la extensa red de amistades que Jaime Bonilla ha cosechado, incluyendo la del mismo Presidente que se ha abstenido de opinar de la reforma a todas luces anticonstitucional que amplía el mandato de Bonilla.
“Si este golpe constitucional no se revierte, quedará como antecedente para que cualquier gobernador, cualquier alcalde, Congreso local o el mismo AMLO pueda hacer lo mismo. No nos sorprendería si Bonilla declara la independencia del estado de Baja California, apoyado por Trump”.
Resultó ser el licenciado Mario Trevizo nuestro invitado especial. Para sus correligionarios presentes en el programa fue un gusto que haya sido nombrado representante estatal de Alejandro Moreno Cárdenas, candidato a la dirigencia nacional del PRI.
Cierto, el partido se encuentra realizando un proceso de elección interno, de interés exclusivo para sus militantes; pero en condiciones en que el país resiente el desmantelamiento de las instituciones; el evitarlo es de interés que trasciende, el mero interés partidario.
Planteamientos que no vimos en la exposición del licenciado Trevizo, grave porque como dice Luis Rubio: “Si algo resulta evidente de observar la manera de funcionar tanto de la política como de los negocios en el mundo a lo largo del tiempo es que sobreviven quienes tienen claro el rumbo, entienden el contexto y no se pierden entre los árboles. Quienes comprenden el bosque tienen la oportunidad de vencer hasta al más poderoso o al más incompetente porque la alternativa, dejarse llevar por la corriente, lleva siempre a la quiebra o a la desaparición”.
