En seis meses de asumir el cargo de presidente de México (es un decir, pues recordemos que empezó a ejercerlo al día siguiente de la elección), el estado que guarda el país muestra un franco deterioro institucional y de las condiciones de vida de los mexicanos.
Es que si bien la narrativa de campaña, que a la postre lo llevó al triunfo, giró en torno al combate a la corrupción y a la inseguridad, hoy siguen siendo los flagelos que se ciernen sobre el gobierno y la población.
Es más, desde el gobierno y quien lo encabeza, se sigue invocando a dichas lacras sociales heredadas, pero ahora para aplicárselas y por ende a descalificar a quienes señalan los errores y las ineficiencias del actual gobierno.
Se pasa de lado que el principal responsable es AMLO, con su programa de recorte presupuestal; sus ocurrencias (Tren Maya, Aeropuerto en Santa Lucía, la refinería…). Por delegar su responsabilidad gubernamental a fin de armar su reelección en 2024. Se concluye: Lo suyo, lo suyo, es la campaña electoral:
Lo dice Leonardo Kourchenko en “El mitin como respuesta”, ante la ausencia de estrategia. Ante la carencia de respuestas claras y puntuales. Ante la inexistencia de una estrategia precisa, razonada. Y dos mítines para apoyar a Claudia Sheinbaum, ante la inocultable detonación exponencial de la inseguridad.
El objetivo: “Construir con retórica y narrativa triunfalista la percepción de que todo va bien y estamos haciendo muy bien las cosas”.
La realidad: La amenaza de Donald Trump de imponer un arancel de 5% hasta 25% a los productos de exportación de México hacia Estados Unidos provocó un aumento de la deuda externa en 6,520 millones de dólares, equivalente a más de 35 programas sociales y mantiene en vilo la deuda de Pemex, la petrolera más endeudada del mundo.
Al respecto el banco español BBVA sugirió cancelar el proyecto de la refinería Dos Bocas, Tabasco. Reactivar el modelo de negocios con empresas privadas y acelerar el desarrollo de los veinte nuevos campos petroleros.
En cuanto a la delincuencia: El secuestro y asesinato del joven Norberto Ronquillo galvanizó la zozobra en la Ciudad de México por los altos índices de criminalidad. La ciudadanía, con todo y los mítines, demandará tarde o temprano resultados concretos y medibles (Raymundo Riva Palacio).
(Continuará)
