/ sábado 1 de septiembre de 2018

Anecdotario de herederos 2ª parte

La satisfacción y alegría de crear un capital es diferente a la de uno heredado. Los heredros deben encontrar recompensas diferentes, por ejemplo aprovechar la riqueza inesperada para crear mayor riqueza a través de las utilidades del esfuerzo del trabajo personal.


Continúo con los comentarios relacionados con las experiencias de herederos, sus conflictos, sus retos, sus transformaciones: para bien o para mal.


Un cambio repentino de no riqueza a riqueza puede interrumpir algunas relaciones familiares. Hay que prepararse, ser sensibles, mantener la calma y ser muy pacientes.


Ahora que hay difusión para aprovechar el Mes del Testamento, más que ver un ahorro, que si lo es, hay que profundizar en las lecturas que nos pueden servir para reflexionar sobre nuestra planeación testamentaria. Analizarla y comentarla con los cónyuges.


No dejen una herencia condicionada inecesariamente. Con mucha frecuencia vemos a los angustiados padres con la tentación de establecer limitaciones formales e informales en las donaciones, herencias y legados. Las condicionantes formales (mientras sean legales) las establecen en fideicomisos. Con mayor recurrencia se hacen condicionantes informales comunicándoles a los herederos sus deseos: “… nunca vendan el rancho o la casa grande…”, “…este condominio en la playa es un regalo para que lo disfrutes mientras vivas y luego lo pases a tu hijo mayor…”.

Este tipo de restricciones de alguna manera proyectan la situación actual de los padres, sus pensamientos y sus emociones; pero ignorando los efectos a largo plazo del manejo necesario de los activos de la familia. Si van ha hacer una donación o legado dénlo incondicionalmente… sin voltear para atrás.

Por otro lado, los que reciben regalos, donaciones o herencias asegúrense de comentar con el que hace la donación las condicionantes formales o informales que vienen con el premio. La regla general de muchos consejeros es evitar la imposición de restricciones o limitaciones. Ser muy cuidadosos en aceptar los “candados” y a la vez no transmitirlos a la siguiente generación para evitar confusiones y frustraciones.

Los herederos o beneficiarios deben considerar si requieren consejo profesional para poder identificar las nuevas metas que les sean más convenientes, las que les brinden felicidad y las que les mantengan echados para adelante en la vida. Busquen que los profesionales a los que acudan a pedir consejo sean sensibles para detectar las actitudes negativas en los familiares y tengan la capacidad para apoyarles a que se canalicen en oportunidades. Seguiré comentando.




La satisfacción y alegría de crear un capital es diferente a la de uno heredado. Los heredros deben encontrar recompensas diferentes, por ejemplo aprovechar la riqueza inesperada para crear mayor riqueza a través de las utilidades del esfuerzo del trabajo personal.


Continúo con los comentarios relacionados con las experiencias de herederos, sus conflictos, sus retos, sus transformaciones: para bien o para mal.


Un cambio repentino de no riqueza a riqueza puede interrumpir algunas relaciones familiares. Hay que prepararse, ser sensibles, mantener la calma y ser muy pacientes.


Ahora que hay difusión para aprovechar el Mes del Testamento, más que ver un ahorro, que si lo es, hay que profundizar en las lecturas que nos pueden servir para reflexionar sobre nuestra planeación testamentaria. Analizarla y comentarla con los cónyuges.


No dejen una herencia condicionada inecesariamente. Con mucha frecuencia vemos a los angustiados padres con la tentación de establecer limitaciones formales e informales en las donaciones, herencias y legados. Las condicionantes formales (mientras sean legales) las establecen en fideicomisos. Con mayor recurrencia se hacen condicionantes informales comunicándoles a los herederos sus deseos: “… nunca vendan el rancho o la casa grande…”, “…este condominio en la playa es un regalo para que lo disfrutes mientras vivas y luego lo pases a tu hijo mayor…”.

Este tipo de restricciones de alguna manera proyectan la situación actual de los padres, sus pensamientos y sus emociones; pero ignorando los efectos a largo plazo del manejo necesario de los activos de la familia. Si van ha hacer una donación o legado dénlo incondicionalmente… sin voltear para atrás.

Por otro lado, los que reciben regalos, donaciones o herencias asegúrense de comentar con el que hace la donación las condicionantes formales o informales que vienen con el premio. La regla general de muchos consejeros es evitar la imposición de restricciones o limitaciones. Ser muy cuidadosos en aceptar los “candados” y a la vez no transmitirlos a la siguiente generación para evitar confusiones y frustraciones.

Los herederos o beneficiarios deben considerar si requieren consejo profesional para poder identificar las nuevas metas que les sean más convenientes, las que les brinden felicidad y las que les mantengan echados para adelante en la vida. Busquen que los profesionales a los que acudan a pedir consejo sean sensibles para detectar las actitudes negativas en los familiares y tengan la capacidad para apoyarles a que se canalicen en oportunidades. Seguiré comentando.