En la actualidad, las llamadas fake news (no entiendo por qué ahora la mayoría de los términos cibernéticos tienen que expresarse en inglés) en este caso serían noticias falsas, que nos invaden, las redes sociales están atiborradas de información falsa, que casi por instinto es compartida inmediatamente, sin meditar si es cierta o no, ocasionando confusión, incertidumbre, sicosis o hasta la muerte. Como lo ocurrido hace 122 años, cuando surgió una noticia falsa que desestabilizó un país y ocasionó miles de muertes.
A finales de 1899, cuatro reporteros de los principales periódicos de Denver se encontraron en la estación del tren después de haber recorrido la ciudad buscando noticias, ninguno había conseguido algo relevante, luego de una breve charla decidieron ir a una cantina cercana. Durante la reunión coincidieron que no podían regresar a la Redacción sin una nota para la edición dominical, entonces ya entrados en copas se les ocurrieron varias historias de asuntos locales, pero para no ser descubiertos rápidamente optaron por un tema internacional, la noticia sería que un grupo de ingenieros de Wall Street estaban de paso por la ciudad, y se dirigían a China para demoler la Gran Muralla, con el fin de construir una enorme carretera, el proyecto supuestamente ya había sido autorizado por el gobierno chino. Para darle mayor veracidad, los periodistas registraron en un hotel a ingenieros imaginarios, dando una propina al recepcionista para que guardara el secreto.
Después cada quien se fue a redactar su artículo. Al día siguiente, apareció en primera plana de sus respectivos periódicos, “La Muralla China será derribada, Pekín abre sus puertas al comercio internacional”. La noticia causó revuelo a nivel nacional y posteriormente internacional; increíblemente nadie puso en tela de juicio la información, incluso algunos diarios orientales confirmaron su autenticidad. Pero cuando llegó hasta los oídos de Los Boxers, una poderosa secta china ultranacionalista, lo consideraron una grave ofensa, por lo cual comenzaron a prepararse para la batalla, reclutaron nuevos miembros, infundiendo odio por los occidentales, meses después inició la sangrienta rebelión de Los Boxers. Primeramente saquearon Siberia, después se dirigieron a Pekín para atacar las embajadas, conforme avanzaban destruían e incendiaban toda propiedad extranjera.
Así mismo mataron decenas de misioneros y a miles de chinos convertidos al cristianismo. Desbarataron vías del ferrocarril, por lo cual muchas personas que vivían en poblaciones lejanas quedaron aisladas. Posteriormente atacaron el barrio extranjero de Pekín, asesinando al embajador de Alemania, esto motivó que un ejército conformado por 25 mil soldados de Japón, Rusia, Inglaterra, Francia y Estados Unidos llegara a la capital china para terminar con la insurrección. Luego de varios días de combates, Los Boxers fueron derrotados, posteriormente el imperio chino fue obligado a pagar una indemnización de 334 millones de dólares a Estados Unidos, Japón y varios países europeos.
Esta absurda guerra dejó miles de muertos y destrucción en todo el país, quizás pudo haberse evitado si alguien hubiese indagado la veracidad de la noticia, sin embargo nadie lo hizo y millones de personas se dejaron arrastrar por una mentira. Todo esto lo provocaron cuatro personas inconscientes y sin redes sociales, imagine lo peligroso que puede ser en nuestros tiempos, cuando hay miles de inconscientes publicando mentiras, por eso antes de reenviar un mensaje alarmante es nuestra obligación cerciorarnos de que no sea falso, recuerde: Una mentira repetida varias veces se puede convertir en verdad.
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