/ sábado 10 de julio de 2021

Antes que se nos olvide | Un piquetito, qué tanto es

Esta semana le tocó la primera dosis de vacuna contra el Covid a los chavorrucos capitalinos y de Ciudad Juárez, gran número de hombres y mujeres entre 40 y 49 años han ido a inyectarse, sin embargo hay personas de esas edades que han decidido no hacerlo, están renuentes, las excusas son diversas, varios dicen tener desconfianza porque vieron videos de personas vacunadas en redes sociales, a las cuales se les pegan objetos de metal en el brazo inyectado, considerando que la dosis puede tener grafeno, que es una lámina de átomos de carbono con alta conductividad térmica y eléctrica, pero esto ya fue desmentido por especialistas, quienes afirmaron que los objetos se quedan pegados, simple y sencillamente por la grasa y el sudor que hay en la piel e incluso esto le puede ocurrir a personas que no están vacunadas.

También hay quienes han decidido no ponérsela, porque han sabido de personas que previamente inoculadas se contagian y mueren, claro, ha sucedido, pero según los científicos, estando vacunado se reduce el riesgo de enfermedades graves durante la convalecencia, puede ayudar a evitar hospitalización, incluso la muerte. Así mismo, es importante mencionar que la inmunidad varía en cada persona. Algunos están convencidos que si se vacunan tendrán problemas de salud, sin embargo, en el mundo son muy pocos los casos de personas que han tenido reacciones desfavorables.

Otros más creen que les están poniendo un microchip y posteriormente se convertirán en marionetas de seres perversos, pero seguramente lo que más les preocupa es si tendrán buena recepción, porque no saben si el chip será Telcel o AT&T. Y hay unos todavía más extremos, los cuales quizás han visto demasiadas series de televisión, ellos piensan que todas las dosis están contaminadas, son malignas y en un momento determinado se convertirán en zombis todos los desdichados que fueron inyectados.

Claro, esta forma de pensar no es exclusiva de los cuarentones, hay personas de otras edades que desconfían de la vacuna, no les late y seguramente no se la pondrán. Pero están cometiendo un error, por supuesto cada quien es libre de hacer lo que quiera, siempre y cuando no afecte a los demás y en este caso su decisión sí puede perjudicar, ya que es un problema que atañe a todos, es una cuestión de salud pública. Además, quien deja pasar la vacuna está desdeñando su vida y la de los demás; así mismo están insultando la memoria de miles y miles de mexicanos que murieron por esta maldita enfermedad.

Debemos ser conscientes de que aun con vacuna la pandemia continúa, que aun con vacuna podemos enfermar, la única gran diferencia es que habrá menos posibilidad de morir. Claro, en algún momento se erradicará, pero para lograrlo debemos estar vacunados la mayoría de los mexicanos, ¡Anímese! total, un piquetito qué tanto es.

Esta semana le tocó la primera dosis de vacuna contra el Covid a los chavorrucos capitalinos y de Ciudad Juárez, gran número de hombres y mujeres entre 40 y 49 años han ido a inyectarse, sin embargo hay personas de esas edades que han decidido no hacerlo, están renuentes, las excusas son diversas, varios dicen tener desconfianza porque vieron videos de personas vacunadas en redes sociales, a las cuales se les pegan objetos de metal en el brazo inyectado, considerando que la dosis puede tener grafeno, que es una lámina de átomos de carbono con alta conductividad térmica y eléctrica, pero esto ya fue desmentido por especialistas, quienes afirmaron que los objetos se quedan pegados, simple y sencillamente por la grasa y el sudor que hay en la piel e incluso esto le puede ocurrir a personas que no están vacunadas.

También hay quienes han decidido no ponérsela, porque han sabido de personas que previamente inoculadas se contagian y mueren, claro, ha sucedido, pero según los científicos, estando vacunado se reduce el riesgo de enfermedades graves durante la convalecencia, puede ayudar a evitar hospitalización, incluso la muerte. Así mismo, es importante mencionar que la inmunidad varía en cada persona. Algunos están convencidos que si se vacunan tendrán problemas de salud, sin embargo, en el mundo son muy pocos los casos de personas que han tenido reacciones desfavorables.

Otros más creen que les están poniendo un microchip y posteriormente se convertirán en marionetas de seres perversos, pero seguramente lo que más les preocupa es si tendrán buena recepción, porque no saben si el chip será Telcel o AT&T. Y hay unos todavía más extremos, los cuales quizás han visto demasiadas series de televisión, ellos piensan que todas las dosis están contaminadas, son malignas y en un momento determinado se convertirán en zombis todos los desdichados que fueron inyectados.

Claro, esta forma de pensar no es exclusiva de los cuarentones, hay personas de otras edades que desconfían de la vacuna, no les late y seguramente no se la pondrán. Pero están cometiendo un error, por supuesto cada quien es libre de hacer lo que quiera, siempre y cuando no afecte a los demás y en este caso su decisión sí puede perjudicar, ya que es un problema que atañe a todos, es una cuestión de salud pública. Además, quien deja pasar la vacuna está desdeñando su vida y la de los demás; así mismo están insultando la memoria de miles y miles de mexicanos que murieron por esta maldita enfermedad.

Debemos ser conscientes de que aun con vacuna la pandemia continúa, que aun con vacuna podemos enfermar, la única gran diferencia es que habrá menos posibilidad de morir. Claro, en algún momento se erradicará, pero para lograrlo debemos estar vacunados la mayoría de los mexicanos, ¡Anímese! total, un piquetito qué tanto es.