/ miércoles 12 de mayo de 2021

Avances en la Península Balcánica

Con la participación de Carlos Angulo Parra

Hace 30 años, la región de los Balcanes, principalmente en el área de la ex Yugoslavia, sufrió pruebas difíciles debido a la violencia desatada por sus guerras civiles con grandes componentes étnicos y religiosos, que fueron sumamente sangrientas, provocando un gran sufrimiento.

Hoy la región de los Balcanes está caminando en buena dirección. Algunos de los países de la ex Yugoslavia, como Eslovenia y Croacia, han tenido un buen desempeño económico, al grado de que hoy forman parte de la Unión Europea. Eslovenia entró en el 2004, y Croacia en el 2013.

En el 2018, los cinco países balcánicos restantes de la ex Yugoslavia, más Albania, han empezado pláticas para crear un mercado único de 20 millones de personas, con el propósito de tener libre movimiento de mercancías, capitales y personas. Las primeras acciones de esta iniciativa comenzaron a cristalizarse.

En octubre 2019, tres países: Albania, Macedonia del Norte y Serbia, anunciaron seriamente la creación de una zona de libre para el movimiento de personas. Dicho proyecto haría que las personas no necesitarían pasaportes ni visas, sino sólo una tarjeta de identidad nacional para trasladarse dentro de su región. Al efecto, los países promoventes invitaron a los otros tres países de la región a unirse, Bosnia, Montenegro y Kosovo. Esta integración permitiría mayor fluidez de factores de producción, reducción de la burocracia y simplificación regulatoria. El proyecto es una chispa de esperanza cuando surgen sentimientos proteccionistas y populistas en el mundo.

Esta iniciativa va en buena dirección. El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo ha dicho que el proyecto permitiría reducir las barreras arancelarias y no-arancelarias y armonizará las leyes para atraer más inversión extranjera.

En el ránking de libertad económica del Instituto Fraser, que es considerado el mejor índice de mercados libres, la clasificación de este proyecto de unificación es la siguiente: Albania tiene un puntaje de 7.8/10 con un ránking de 26 sobre 162 países. Macedonia del Norte tiene el puntaje de 7.15/10 y se encuentra en el lugar 71. Serbia tiene un puntaje de 7.05/10 y se encuentra en el lugar 74. Bosnia tiene un puntaje de 6.9/10 y se encuentra en el lugar 82. Montenegro tiene un puntaje de 6.94/10 y se encuentra en el lugar 80. Kosovo no está clasificado, ya que se declaró independiente hace algunos años.

El punto más débil de los Balcanes en el reporte de libertad económica es el de su sistema legal. Los retos son la imparcialidad e independencia del sistema legal. Otro reto es mejorar la calidad regulatoria y los requerimientos administrativos. En materia de reducción arancelaria ha habido una mejora importante.

Se estima que una mayor apertura comercial, mejora regulatoria e integración económica en los Balcanes, ayudarían a aumentar el comercio, inversión y alentarían una mayor participación en las cadenas de valor mundiales. Esto traería a la región un aumento en el crecimiento económico, productividad, generándose economías de escala, y por ende mayor prosperidad.

Con la participación de Carlos Angulo Parra

Hace 30 años, la región de los Balcanes, principalmente en el área de la ex Yugoslavia, sufrió pruebas difíciles debido a la violencia desatada por sus guerras civiles con grandes componentes étnicos y religiosos, que fueron sumamente sangrientas, provocando un gran sufrimiento.

Hoy la región de los Balcanes está caminando en buena dirección. Algunos de los países de la ex Yugoslavia, como Eslovenia y Croacia, han tenido un buen desempeño económico, al grado de que hoy forman parte de la Unión Europea. Eslovenia entró en el 2004, y Croacia en el 2013.

En el 2018, los cinco países balcánicos restantes de la ex Yugoslavia, más Albania, han empezado pláticas para crear un mercado único de 20 millones de personas, con el propósito de tener libre movimiento de mercancías, capitales y personas. Las primeras acciones de esta iniciativa comenzaron a cristalizarse.

En octubre 2019, tres países: Albania, Macedonia del Norte y Serbia, anunciaron seriamente la creación de una zona de libre para el movimiento de personas. Dicho proyecto haría que las personas no necesitarían pasaportes ni visas, sino sólo una tarjeta de identidad nacional para trasladarse dentro de su región. Al efecto, los países promoventes invitaron a los otros tres países de la región a unirse, Bosnia, Montenegro y Kosovo. Esta integración permitiría mayor fluidez de factores de producción, reducción de la burocracia y simplificación regulatoria. El proyecto es una chispa de esperanza cuando surgen sentimientos proteccionistas y populistas en el mundo.

Esta iniciativa va en buena dirección. El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo ha dicho que el proyecto permitiría reducir las barreras arancelarias y no-arancelarias y armonizará las leyes para atraer más inversión extranjera.

En el ránking de libertad económica del Instituto Fraser, que es considerado el mejor índice de mercados libres, la clasificación de este proyecto de unificación es la siguiente: Albania tiene un puntaje de 7.8/10 con un ránking de 26 sobre 162 países. Macedonia del Norte tiene el puntaje de 7.15/10 y se encuentra en el lugar 71. Serbia tiene un puntaje de 7.05/10 y se encuentra en el lugar 74. Bosnia tiene un puntaje de 6.9/10 y se encuentra en el lugar 82. Montenegro tiene un puntaje de 6.94/10 y se encuentra en el lugar 80. Kosovo no está clasificado, ya que se declaró independiente hace algunos años.

El punto más débil de los Balcanes en el reporte de libertad económica es el de su sistema legal. Los retos son la imparcialidad e independencia del sistema legal. Otro reto es mejorar la calidad regulatoria y los requerimientos administrativos. En materia de reducción arancelaria ha habido una mejora importante.

Se estima que una mayor apertura comercial, mejora regulatoria e integración económica en los Balcanes, ayudarían a aumentar el comercio, inversión y alentarían una mayor participación en las cadenas de valor mundiales. Esto traería a la región un aumento en el crecimiento económico, productividad, generándose economías de escala, y por ende mayor prosperidad.