Por: Víctor Gómez Céspedes
Aprovecho esta oportunidad para felicitar a todos los padres en su día, especialmente a mi papá, el Dr. Víctor M. Gómez Moreno, a quien admiro y agradezco su incondicional apoyo, aun cuando algunos proyectos sonaban inalcanzables, ¡muchas gracias, papá!
Hoy hablaré sobre la gran oportunidad que detectó Chihuahua Green City en los desechos electrónicos de la industria chihuahuense (E-waste); estos son considerados como el flujo de desechos de más rápido crecimiento en el mundo, con 44.7 millones de toneladas generadas en el 2016. Esto equivale a 4,500 torres Eiffel.
En 2018, se reportaron aproximadamente 50 millones de toneladas de estos residuos, de ahí el concepto de “tsunami de desechos electrónicos”, dado por la Organización de las Naciones Unidas, lo que generó una gran presión a la producción masiva de artículos, propiciando escasez de minerales para cumplir con la demanda.
Estos dispositivos, desde electrodomésticos hasta paneles solares o teléfonos inteligentes, aportan grandes beneficios a la humanidad y brindan nuevas oportunidades de desarrollo; sin duda, sería muy difícil imaginar un mundo donde no usemos herramientas valiosas para la mejora de la calidad de vida, la extensión de la educación, la prestación de servicios de salud de alta calidad, la facilitación de comercio, así como para comprender y abordar los desafíos generados por el cambio climático.
La digitalización y la conectividad a gran escala serán esenciales para lograr los 17 objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030, que nos ayudarán a aplicar un sistema basado en una Economía Circular.
En toda la cadena de valor, desde la extracción de minerales para productos electrónicos, la producción, transporte, venta al menudeo, consumo y desecho, conllevan grandes cantidades de recursos desperdiciados, generando una gran huella ecológica. Además, varios de esos artículos contienen materiales potencialmente dañinos al medio ambiente y la salud de las personas que trabajan en el campo de reciclaje.
Los desechos electrónicos deben verse como una gran oportunidad para la creación de nuevos empleos sostenibles; por ejemplo, hay 100 veces más oro en una tonelada de teléfonos celulares que en una tonelada de minerales del que se extrae ese metal.
En ese sentido, es fundamental tomar en cuenta que los “bienes” electrónicos en funcionamiento, y sus componentes, valen más que los minerales que contienen, por lo que la extensión de la vida útil de los productos, a través de la mano de obra calificada para ello, y la reutilización de los componentes, traen mayores beneficios económicos y medioambientales para todos.
Tomando en cuenta esta gran área de oportunidad que tenemos en nuestro estado, en Chihuahua Green City estamos construyendo un sistema, mediante el cual los recursos naturales no se extraigan, usen y desechen, sino que se cree una plataforma tipo Marketplace para comprar o vender productos de segunda mano, componentes y/o materias primas secundarias.
En próximas fechas, estaremos invitando a empresarios para que inviertan en la creación de compañías para nuevos productos de bajo costo, mediante la reutilización de componentes. Por ejemplo, en el lanzamiento de la iniciativa multisectorial, dentro del Foro “QRO circular, de lo lineal a lo circular”, al cual fui honrosamente invitado como ponente, me obsequiaron una bocina producida con el 97% de dispositivos recuperados de los desechos electrónicos.
Por todo ello, es importante tener un modelo de gestión integral de los desechos electrónicos, en el que la reparación y recuperación de componentes sean la base para generar otros productos de bajo costo, que incentiven la creación de empresas tecnológicas en Chihuahua.
