/ jueves 12 de septiembre de 2019

Breviario Guadalupano

Nada alienta más el interés por la historia que las curiosidades de la vida religiosa en México ajenas a la versión oficial, como es el Hecho Guadalupano. Iniciando con el estado de Chihuahua, no tenemos imagen de Guadalupe coronada, tal como la Virgen Santísima de la Soledad de Parral, que es la única imagen coronada pontificalmente el 22 de octubre de 1943 por el arzobispo don Antonio Guízar y Valencia. En 1668 se consagró, en lo que hoy es el edificio más antiguo de Ciudad Juárez, el templo de la Misión de Nuestra Señora de Guadalupe.

El primer libro que llegó a costas de México fue el “Libro de las horas de Nuestra Señora”, de manos de Jerónimo de Aguilar, en 1519. El “Inin Huey Tlamahuizoltzin” (1545), atribuido a Juan González, se cree que es el más antiguo testimonio guadalupano, incluso anterior al “Nican Mopohua” (1556). A su vez, al “Nican Mopohua” se le considera el primer documento teológico de América. En el libro “Imagen de la Virgen María Madre de Dios de Guadalupe” (1648), por vez primera se muestran las rosas al obispo Zumárraga y es la primera obra impresa en torno a la Virgen de Guadalupe.

En 1563, por primera vez, aparece el nombre de Guadalupe en las actas del Ayuntamiento de la Ciudad de México. La pieza más antigua de la iconografía guadalupana, cuyo año puede tenerse, es la plancha de cobre de Stradanus (1615). En 1653 es la fecha más antigua de la factura de una pintura de Guadalupe, el Primer Milagro de la Virgen de Guadalupe. Algunos la consideran la pintura histórica más importante del México virreinal. La virgen del pintor De Echave (1606) es la primera reproducción firmada de la Imagen de Guadalupe.

En el siglo XVII se agregan las apariciones en los ángulos de las copias de las imágenes guadalupanas. Se considera al mestizo Miguel Cabrera como el pintor novohispano que más reproducciones hizo de la Virgen de Guadalupe. En el libro “Novenas de la Virgen María” (1665) es donde por primera vez se muestra a la Virgen bendiciendo las rosas. El primer poema guadalupano registrado es “Canción a Nuestra Señora” (1580), del poeta español Hernán González de Eslava, publicado el año 1610.

agusperezr@hotmail.com


Nada alienta más el interés por la historia que las curiosidades de la vida religiosa en México ajenas a la versión oficial, como es el Hecho Guadalupano. Iniciando con el estado de Chihuahua, no tenemos imagen de Guadalupe coronada, tal como la Virgen Santísima de la Soledad de Parral, que es la única imagen coronada pontificalmente el 22 de octubre de 1943 por el arzobispo don Antonio Guízar y Valencia. En 1668 se consagró, en lo que hoy es el edificio más antiguo de Ciudad Juárez, el templo de la Misión de Nuestra Señora de Guadalupe.

El primer libro que llegó a costas de México fue el “Libro de las horas de Nuestra Señora”, de manos de Jerónimo de Aguilar, en 1519. El “Inin Huey Tlamahuizoltzin” (1545), atribuido a Juan González, se cree que es el más antiguo testimonio guadalupano, incluso anterior al “Nican Mopohua” (1556). A su vez, al “Nican Mopohua” se le considera el primer documento teológico de América. En el libro “Imagen de la Virgen María Madre de Dios de Guadalupe” (1648), por vez primera se muestran las rosas al obispo Zumárraga y es la primera obra impresa en torno a la Virgen de Guadalupe.

En 1563, por primera vez, aparece el nombre de Guadalupe en las actas del Ayuntamiento de la Ciudad de México. La pieza más antigua de la iconografía guadalupana, cuyo año puede tenerse, es la plancha de cobre de Stradanus (1615). En 1653 es la fecha más antigua de la factura de una pintura de Guadalupe, el Primer Milagro de la Virgen de Guadalupe. Algunos la consideran la pintura histórica más importante del México virreinal. La virgen del pintor De Echave (1606) es la primera reproducción firmada de la Imagen de Guadalupe.

En el siglo XVII se agregan las apariciones en los ángulos de las copias de las imágenes guadalupanas. Se considera al mestizo Miguel Cabrera como el pintor novohispano que más reproducciones hizo de la Virgen de Guadalupe. En el libro “Novenas de la Virgen María” (1665) es donde por primera vez se muestra a la Virgen bendiciendo las rosas. El primer poema guadalupano registrado es “Canción a Nuestra Señora” (1580), del poeta español Hernán González de Eslava, publicado el año 1610.

agusperezr@hotmail.com