En estos tiempos del “fake news” gracias a la política “del todo se vale”, en Chihuahua esta semana logramos un nuevo récord mundial con la conferencia en el Congreso del Estado de “Católicas por el Derecho de Decidir” y un ex diácono dominico renegado, vistiendo alzacuello y atuendo de sacerdote. Ambos promoviendo el derecho para abortar.
Durante casi 2,000 años la denominación católica la ha ostentado una iglesia y su etimología significa universal, una institución clara y contundentemente contraria al aborto voluntario, que un sinnúmero de grupos promueve en la actualidad, donde la pena eclesiástica es la excomunión, la expulsión de la Iglesia y la comunidad católica.
Por lo tanto, que exista una agrupación con el nombre de "católicas promoviendo el aborto voluntario", es toda una contradicción y un absurdo, independientemente de las discusiones y choques teológicos e ideológicos, porque debe existir un mínimo de claridad al comunicar para no engañar, al margen de si los grupos y sus integrantes respetan o no las instituciones que han surgido durante la historia de la humanidad.
En este caso el engaño adquiere una dimensión dolosa, utilizando este adjetivo en sentido jurídico, porque hay una intención deliberada y premeditada para engañar, cuando vemos a este grupo de mujeres presentarse en su conferencia en el Congreso del Estado acompañadas de un ex diácono dominico renegado que nunca fue ordenado, disfrazado de sacerdote.
¿Le parecería a usted íntegro, mi estimado lector?, que su servidor se presentara como creyente musulmán promoviendo la degustación de chamorros y tacos de carnitas de cerdo prohibidos por el Corán, el libro sagrado de los musulmanes, o que diciéndome seguidor del hinduismo que prohíbe sacrificar ganado, promoviera las carnes asadas y los ribeyes. ¿Quién diablos autoriza las conferencias en el Congreso del Estado?, porque...
Transcribo: “En sentencia definitiva el juicio de amparo indirecto 1803/2018-I-2, del 30 de marzo notificada el 7 de abril de 2019, promovido por ***** ***** ******* ***** , contra los actos que reclama de las autoridades responsables Pleno del Consejo de la Judicatura del Estado de Chihuahua, Pleno del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Chihuahua y su Presidente”, “se deje insubsistente la convocatoria CJE/002/2018, del Pleno del Consejo de la Judicatura del Estado de Chihuahua, publicada el veinticuatro de marzo de dos mil dieciocho, en el Periódico Oficial del Estado de Chihuahua, para la ocupación, a través de un proceso de selección para ingreso y adscripción de cincuenta y seis plazas disponibles de Juezas y Jueces de Primera Instancia con carácter definitivo”, “únicamente por cuanto hace a la plaza que ocupa la juzgadora quejosa”.
En la copia de la sentencia de amparo indirecto que me facilitaron, aparece tachado el nombre de la juez chihuahuense que se inconformó y logró la protección de la justicia federal, haciéndole un agujero más al escándalo del concurso para designar jueces y magistrados, que Lucha Castro organizó en la Judicatura estatal.
Qué lamentables y destructivos resultan los desaguisados y la mediocridad de los burócratas y grillos chihuahuenses de estos tiempos, en un momento en que Chihuahua, México y el planeta enfrentan toda una serie de monumentales desafíos tecnológicos, ideológicos, jurídicos, ecológicos y sociales; porque el oportunismo, la corrupción, la ignorancia y el cinismo se han vuelto la tónica cotidiana en los gobiernos.
