Estimado lector, agradezco el momento que se toma para poder leerme, sigue en mi mente esa pregunta que le planteo al principio, no sé la respuesta y de verdad que nunca quisiera estar en ese papel.
¿Cómo una mamá que había acudido a ver graduarse a su hijo de repente tiene que enfrentar la noticia de que han secuestrado a su hijo saliendo de la escuela, pagar un rescate y después encontrar el cuerpo de su hijo asesinado y enterarse de que lo habían matado la misma noche que lo secuestraron?
No me he metido a enterarme de más detalles, de verdad es incalificable para mí el acto, es indescriptible la definición de esos seres que se atreven a llevar a cabo esas atrocidades, no son seres humanos, son una especie que lleva en su codificación la maldad y la frialdad, cabría la descripción de demonios en cuerpos de humanos.
El caso cimbra más porque el joven es oriundo del estado y obviamente nos identificamos más con el dolor que corre en esa familia y en nuestra comunidad.
En redes se dejó ver el comentario de una estudiante del Conalep beneficiaria del programa de becas que decía: “Un pendejo fresa menos”. ¿De verdad? ¿Qué está pasando con estas generaciones? ¿Cómo es posible que alguien se alegre de que asesinen a alguien? Y que esa persona que se alegra es el futuro del país, es estudiante y recibe el beneficio de nuestros impuestos.
Ese panorama, esa realidad es sumamente devastadora, no solamente que el gobierno actual ha desmantelado todas las instituciones que existían que se dedicaban a la prevención y atención de casos de secuestro, también a los presupuestos de salud, educación y que en la CDMX los casos de secuestro han aumentado un 500%.
De verdad que #MeDuelesMéxico no sé por dónde vamos a corregir esta situación, pero no debemos permitir que esto siga pasando, no podemos darnos el lujo de que personas jóvenes que estudian y que representan la única esperanza del país para nuestro futuro estén siendo asesinadas a sangre fría. #DespiertaMéxico #AlgoHayQueHacer Que en paz descanse Norberto y para su familia la empatía del dolor que cargan a partir de hoy y para siempre. Gracias.
@MarAlmeyda comentariosaloescrito@gmail.com