/ miércoles 29 de junio de 2022

El Espectador  | Los millonarios sí pueden irse 

NUEVA YORK. Fue una combinación de elementos, dice Fernando López Muñoz cuando le preguntamos qué es lo que le sorprende del flujo de millonarios de sus países de origen en América Latina hacia España.

Primero, explica el Head of Citi Private Bank para América Latina de Citi, que aprovecharon muy bien la crisis del euro en el 2012. Rememora que en ese año el máximo responsable del Banco Central Europeo, Mario Draghi, prácticamente apuntaló el euro, cuando el 26 de julio tomó la palabra en Londres y dijo que estaban dispuestos a hacer lo necesario para preservar la moneda europea y eso sería suficiente.


“El primero que pegó el pistoletazo de salida fue Carlos Slim, cuando compró cerca de 600 millones de dólares en oficinas de BBVA”, recuerda el responsable de cuidar las fortunas de los más acaudalados hombres, mujeres y familias que atiende el grupo financiero en el mundo.

Dice que ese primer movimiento fue clave.

“La combinación, probablemente de cierta inestabilidad política, o de lo que estaba por llegar, más un buen precio de entrada, más este statement de Draghi, creó un flujo descomunal, enorme, no solamente en Real Estate, sino en trading companies, hay mexicanos que tienen strategic stakeholdings en listed companies en España”.

Lo que nos llama la atención es el asunto político. ¿Se llevan las inversiones a otros países los millonarios que ven amenazados sus intereses en sus países a tierras en donde la estabilidad luce más brillosa? Abiertamente nadie lo menciona, es una especie de tabú en ciertas economías de América Latina, es como pecado aceptar que se llevan sus inversiones a otros países. Como si se pensara que es un tema de nacionalismo o un asunto de identidad del dinero. ¿Pero acaso los euros y los dólares tienen raíces que no se pueden traicionar? ¿Es pecado mantener la confidencialidad de las fortunas? ¿La salida de capitales es un mito que inventaron los neoliberales que quieren afectar a los gobiernos de izquierda?

“La marea rosa de América Latina anotó otro triunfo con la primera victoria electoral de un candidato de izquierdas en Colombia, Gustavo Petro, y se espera que Brasil siga el movimiento en sus próximos comicios programados para octubre”, decía una nota de Reuters liberada el 22 de junio. “Con el cambio de color, Colombia se une al bloque de izquierda que ya conformaban México, Argentina, Chile y Perú. En Brasil, el gigante económico regional, el ex presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva lidera las encuestas de opinión frente al titular de extrema derecha Jair Bolsonaro”.

“¿Si vamos a ver colombianos?”, pregunta el hombre que fue Global Market Manager para España, Portugal e Italia y las oficinas para América Latina en Europa entre 2009 y 2014. Y él mismo responde: “Ya los hemos visto, los estamos viendo… y chilenos. Probablemente lo más sorprendente son los chilenos. Los chilenos han ido normalmente más a Reino Unido y a Luxemburgo, que a España, pero definitivamente ahí como os decía antes, tenemos una posición privilegiada para capitalizar eso, precisamente porque nuestra banca de inversión en el país es número uno”.







NUEVA YORK. Fue una combinación de elementos, dice Fernando López Muñoz cuando le preguntamos qué es lo que le sorprende del flujo de millonarios de sus países de origen en América Latina hacia España.

Primero, explica el Head of Citi Private Bank para América Latina de Citi, que aprovecharon muy bien la crisis del euro en el 2012. Rememora que en ese año el máximo responsable del Banco Central Europeo, Mario Draghi, prácticamente apuntaló el euro, cuando el 26 de julio tomó la palabra en Londres y dijo que estaban dispuestos a hacer lo necesario para preservar la moneda europea y eso sería suficiente.


“El primero que pegó el pistoletazo de salida fue Carlos Slim, cuando compró cerca de 600 millones de dólares en oficinas de BBVA”, recuerda el responsable de cuidar las fortunas de los más acaudalados hombres, mujeres y familias que atiende el grupo financiero en el mundo.

Dice que ese primer movimiento fue clave.

“La combinación, probablemente de cierta inestabilidad política, o de lo que estaba por llegar, más un buen precio de entrada, más este statement de Draghi, creó un flujo descomunal, enorme, no solamente en Real Estate, sino en trading companies, hay mexicanos que tienen strategic stakeholdings en listed companies en España”.

Lo que nos llama la atención es el asunto político. ¿Se llevan las inversiones a otros países los millonarios que ven amenazados sus intereses en sus países a tierras en donde la estabilidad luce más brillosa? Abiertamente nadie lo menciona, es una especie de tabú en ciertas economías de América Latina, es como pecado aceptar que se llevan sus inversiones a otros países. Como si se pensara que es un tema de nacionalismo o un asunto de identidad del dinero. ¿Pero acaso los euros y los dólares tienen raíces que no se pueden traicionar? ¿Es pecado mantener la confidencialidad de las fortunas? ¿La salida de capitales es un mito que inventaron los neoliberales que quieren afectar a los gobiernos de izquierda?

“La marea rosa de América Latina anotó otro triunfo con la primera victoria electoral de un candidato de izquierdas en Colombia, Gustavo Petro, y se espera que Brasil siga el movimiento en sus próximos comicios programados para octubre”, decía una nota de Reuters liberada el 22 de junio. “Con el cambio de color, Colombia se une al bloque de izquierda que ya conformaban México, Argentina, Chile y Perú. En Brasil, el gigante económico regional, el ex presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva lidera las encuestas de opinión frente al titular de extrema derecha Jair Bolsonaro”.

“¿Si vamos a ver colombianos?”, pregunta el hombre que fue Global Market Manager para España, Portugal e Italia y las oficinas para América Latina en Europa entre 2009 y 2014. Y él mismo responde: “Ya los hemos visto, los estamos viendo… y chilenos. Probablemente lo más sorprendente son los chilenos. Los chilenos han ido normalmente más a Reino Unido y a Luxemburgo, que a España, pero definitivamente ahí como os decía antes, tenemos una posición privilegiada para capitalizar eso, precisamente porque nuestra banca de inversión en el país es número uno”.