/ viernes 23 de octubre de 2020

El Juárez que queremos

Hablar de nuestra ciudad es sinónimo de gente buena, trabajadora, luchadora e incansable, que a pesar de las circunstancias en las que nos ha tocado vivir, mantenemos una actitud positiva y añoramos una tierra de oportunidades, en la que se puedan solucionar añejos problemas para heredar a las nuevas generaciones el Juárez que queremos.


Sin duda, nuestro “juaritos” se enfrenta más que nunca a una situación de crisis, no solamente a causa de la pandemia mundial, sino también porque quienes aquí vivimos estamos sumergidos en problemas que parecen no tener solución.


Sin embargo, nos encontramos ante la oportunidad histórica de ser las y los ciudadanos quienes encabecemos un trabajo coordinado, articulado, desde el ámbito en el que nos encontremos, para hacer algo por Ciudad Juárez, a favor de nuestra comunidad y del metro cuadrado en el que habitamos.


Enumerar los problemas que enfrentamos seguramente nos ocuparía demasiadas páginas y un extenso debate que quizá no nos lleven a una solución, dada la gravedad de la situación, pero estoy convencida de que lo más importante en este momento es preguntarnos ¿qué puedo hacer por Juárez?


En las últimas semanas, a título personal y consciente de la importancia de la participación ciudadana, he hecho uso de mis redes sociales para escucharlos, a través de dinámicas en las que ustedes han podido manifestar qué es lo que más les preocupa. Sus comentarios y los mensajes que me han llegado de diversas maneras me alarman.

Todo eso lo he podido constatar en los recorridos que estoy realizando por diversas colonias de la ciudad, en las que he escuchado sus testimonios, sus preocupaciones y lo doloroso de la situación.

Para tener mayor claridad de esta problemática, basta revisar algunos de los datos públicos, como en el caso de la pavimentación, del cual se tiene un rezago histórico en su atención, según la propia Dirección General de Obras Públicas del Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP).

Dicha institución señala que en Ciudad Juárez hay más de 5 mil calles sin pavimentar, que representan alrededor de un 30% del total de las vías, afectando a miles de personas.


Asimismo, el tema de la basura se ha agravado de forma paulatina, pues la Promotora Ambiental de la Laguna (PASA), empresa encargada de la recolección, ha sido reprobada literalmente por la ciudadanía ante un servicio que deja mucho que desear, pues no han tenido la capacidad para poder tratar las 1,450 toneladas que se generan a diario en Juárez.

Según los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana 2019, se evaluó con 7.7 puntos de un total de 10 a esta empresa, lo cual se ve reflejado con la basura que se ve por nuestras calles.

Respecto al alumbrado público, la misma encuesta indica que ese servicio fue calificado con 6.17, lo cual también percibimos todos los días y tiene a la ciudadanía con la angustia constante y la percepción de inseguridad.

¿Qué nos queda hacer como juarenses? Soy de la idea de que como sociedad tenemos que poner de nuestra parte y hacer lo que nos corresponde para aminorar los problemas.

Una de las frases más legendarias de John F. Kennedy hace referencia a esto: “No preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”… es decir, cada ciudadano tenemos el compromiso de hacer algo por nuestro entorno, por nuestra casa, por nuestra cuadra o por nuestra colonia.

¿Has imaginado la gran diferencia que implicaría si tan sólo evitamos tirar basura en las calles? Creo que una pequeña acción puede lograr un gran cambio y piensa también lo que sucedería si además de hacerlo de manera individual se hiciera de manera organizada, seguramente el resultado sería mayúsculo.

Claro está que las instituciones gubernamentales son las responsables de dar atención a toda esta serie de problemas y que tenemos razón en estar enojados ante la falta de resultados.

Sin embargo, reflexionemos sobre la importancia de poner de nuestra parte, dar el ejemplo a nuestras familias y situar en los reflectores a Juárez, no como esa ciudad en donde hay altos índices de inseguridad, en el que hay basura tirada y sus calles están llenas de baches.

Me gustaría que pensemos en un Juárez como un gran eje fronterizo en donde su sociedad se organiza, se ayuda, tiende la mano a quien lo necesita, protege a los más vulnerables y que puede volver a brillar como en 1865 cuando nuestra ciudad sirvió como capital del país.

Vislumbremos un Juárez en constante crecimiento y con oportunidades, en el que se olviden los intereses particulares y pensemos en el bien común, ese es el Juárez que quiero y ese debe ser ¡el Juárez que queremos!



Hablar de nuestra ciudad es sinónimo de gente buena, trabajadora, luchadora e incansable, que a pesar de las circunstancias en las que nos ha tocado vivir, mantenemos una actitud positiva y añoramos una tierra de oportunidades, en la que se puedan solucionar añejos problemas para heredar a las nuevas generaciones el Juárez que queremos.


Sin duda, nuestro “juaritos” se enfrenta más que nunca a una situación de crisis, no solamente a causa de la pandemia mundial, sino también porque quienes aquí vivimos estamos sumergidos en problemas que parecen no tener solución.


Sin embargo, nos encontramos ante la oportunidad histórica de ser las y los ciudadanos quienes encabecemos un trabajo coordinado, articulado, desde el ámbito en el que nos encontremos, para hacer algo por Ciudad Juárez, a favor de nuestra comunidad y del metro cuadrado en el que habitamos.


Enumerar los problemas que enfrentamos seguramente nos ocuparía demasiadas páginas y un extenso debate que quizá no nos lleven a una solución, dada la gravedad de la situación, pero estoy convencida de que lo más importante en este momento es preguntarnos ¿qué puedo hacer por Juárez?


En las últimas semanas, a título personal y consciente de la importancia de la participación ciudadana, he hecho uso de mis redes sociales para escucharlos, a través de dinámicas en las que ustedes han podido manifestar qué es lo que más les preocupa. Sus comentarios y los mensajes que me han llegado de diversas maneras me alarman.

Todo eso lo he podido constatar en los recorridos que estoy realizando por diversas colonias de la ciudad, en las que he escuchado sus testimonios, sus preocupaciones y lo doloroso de la situación.

Para tener mayor claridad de esta problemática, basta revisar algunos de los datos públicos, como en el caso de la pavimentación, del cual se tiene un rezago histórico en su atención, según la propia Dirección General de Obras Públicas del Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP).

Dicha institución señala que en Ciudad Juárez hay más de 5 mil calles sin pavimentar, que representan alrededor de un 30% del total de las vías, afectando a miles de personas.


Asimismo, el tema de la basura se ha agravado de forma paulatina, pues la Promotora Ambiental de la Laguna (PASA), empresa encargada de la recolección, ha sido reprobada literalmente por la ciudadanía ante un servicio que deja mucho que desear, pues no han tenido la capacidad para poder tratar las 1,450 toneladas que se generan a diario en Juárez.

Según los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana 2019, se evaluó con 7.7 puntos de un total de 10 a esta empresa, lo cual se ve reflejado con la basura que se ve por nuestras calles.

Respecto al alumbrado público, la misma encuesta indica que ese servicio fue calificado con 6.17, lo cual también percibimos todos los días y tiene a la ciudadanía con la angustia constante y la percepción de inseguridad.

¿Qué nos queda hacer como juarenses? Soy de la idea de que como sociedad tenemos que poner de nuestra parte y hacer lo que nos corresponde para aminorar los problemas.

Una de las frases más legendarias de John F. Kennedy hace referencia a esto: “No preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”… es decir, cada ciudadano tenemos el compromiso de hacer algo por nuestro entorno, por nuestra casa, por nuestra cuadra o por nuestra colonia.

¿Has imaginado la gran diferencia que implicaría si tan sólo evitamos tirar basura en las calles? Creo que una pequeña acción puede lograr un gran cambio y piensa también lo que sucedería si además de hacerlo de manera individual se hiciera de manera organizada, seguramente el resultado sería mayúsculo.

Claro está que las instituciones gubernamentales son las responsables de dar atención a toda esta serie de problemas y que tenemos razón en estar enojados ante la falta de resultados.

Sin embargo, reflexionemos sobre la importancia de poner de nuestra parte, dar el ejemplo a nuestras familias y situar en los reflectores a Juárez, no como esa ciudad en donde hay altos índices de inseguridad, en el que hay basura tirada y sus calles están llenas de baches.

Me gustaría que pensemos en un Juárez como un gran eje fronterizo en donde su sociedad se organiza, se ayuda, tiende la mano a quien lo necesita, protege a los más vulnerables y que puede volver a brillar como en 1865 cuando nuestra ciudad sirvió como capital del país.

Vislumbremos un Juárez en constante crecimiento y con oportunidades, en el que se olviden los intereses particulares y pensemos en el bien común, ese es el Juárez que quiero y ese debe ser ¡el Juárez que queremos!