/ viernes 29 de abril de 2022

El mundo está lleno de cruces 

José García Rivas

Me parece que a donde veas, hallarás una o muchas cruces. No importa que no seas cristiano o ateo. Es una cultura universal poder vivir entre tantas cruces. ¿Por qué el mundo se llenó de cruces?

Mis hijas o hijos me han llenado de cruces. Me regalaron cruces: en Navidad, en año nuevo, en mi aniversario, el día de mi santo, en un éxito. Unas cruces fueron compradas, otras fueron hechas por su creación. En la puerta de mi casa hay una cruz. En el espejo de retrovisión de sus carros pende una cruz. Tú estás lleno de cruces. Veo cruces en todos los templos. Son prendedor, son aretes, son medallas. En los deportes en un éxito se santiguan por haber anotado. Un boxeador, antes de la pelea, se santigua. Veo que cuando una persona pasa por una iglesia se santigua. En el cementerio abundan las cruces. En los cerros hay en su cumbre una cruz. Cada ciudad tiene una cruz especial. Los templos están construidos en forma de cruz. Me tocó viajar en un vuelo con uno que odiaba las cruces; no se explicaba por qué había tal superstición tan general. De pronto sobrevino una sacudida del avión. Mi amigo se santiguó inmediatamente. Un comerciante se santigua con el primer billete. La grafía creó muchos cruces. Hay un sinnúmero de cruces. La división general es cruz latina y oriental. Hay una cruz de los cruzados. Hay una cruz papal, arzobispal, rusa.

¿Por qué ha crecido tanto el número de las cruces? La cruz era una ignominia antes de Cristo. Era la muerte de los facinerosos. Cristo murió en una cruz. Y desde que él fue crucificado cambió la recepción de la cruz. Hoy la cruz es la base de la redención. Cristo murió en la cruz para dignificar el dolor. Es la transición de la vida terrena y la vida eterna. Al moribundo le ponen en sus manos frías un crucifijo. Es el paso de pasar a la vida bienaventuranza.


En gratitud el mundo ha esperado que haya una vida eterna. Cristo murió en una cruz latina; San Pedro fue crucificado en una cruz latina, pero puesta de cabeza. San Andrés murió en un cruz en forma de equis.

Hay en el mundo muchas cruces que se hicieron por la nación. Hay cruces propias de las naciones. Por eso hay una cruz con un adjetivo que la hizo propia de su nación. Hay una cruz mexicana, alemana, ucraniana, francesa. Conviene hacer un viaje turístico para conocer las cruces de cada nación. Hay cruces monumentales en Rumania, en Polonia, en Roma, en Galicia, en Monte Calvo en Italia, en Cataluña. En San Santiago.

Vale la pena viajar a España y conocer la cruz del mausoleo de Francisco Franco. Es la cruz más monumental del mundo. La cruz está en el Valle de los Caídos. Tiene 152.4 de altura. En su basamento están las estatuas de los 4 evangelios. Cada estatua es de 18 metros. Si no se puede ir al Valle de los Caídos, por lo menos hagan el esfuerzo por conocer la cruz gigante de Groom, en el estado de Texas, en Estados Unidos. Es bueno vivir las cruces del mundo.


José García Rivas

Me parece que a donde veas, hallarás una o muchas cruces. No importa que no seas cristiano o ateo. Es una cultura universal poder vivir entre tantas cruces. ¿Por qué el mundo se llenó de cruces?

Mis hijas o hijos me han llenado de cruces. Me regalaron cruces: en Navidad, en año nuevo, en mi aniversario, el día de mi santo, en un éxito. Unas cruces fueron compradas, otras fueron hechas por su creación. En la puerta de mi casa hay una cruz. En el espejo de retrovisión de sus carros pende una cruz. Tú estás lleno de cruces. Veo cruces en todos los templos. Son prendedor, son aretes, son medallas. En los deportes en un éxito se santiguan por haber anotado. Un boxeador, antes de la pelea, se santigua. Veo que cuando una persona pasa por una iglesia se santigua. En el cementerio abundan las cruces. En los cerros hay en su cumbre una cruz. Cada ciudad tiene una cruz especial. Los templos están construidos en forma de cruz. Me tocó viajar en un vuelo con uno que odiaba las cruces; no se explicaba por qué había tal superstición tan general. De pronto sobrevino una sacudida del avión. Mi amigo se santiguó inmediatamente. Un comerciante se santigua con el primer billete. La grafía creó muchos cruces. Hay un sinnúmero de cruces. La división general es cruz latina y oriental. Hay una cruz de los cruzados. Hay una cruz papal, arzobispal, rusa.

¿Por qué ha crecido tanto el número de las cruces? La cruz era una ignominia antes de Cristo. Era la muerte de los facinerosos. Cristo murió en una cruz. Y desde que él fue crucificado cambió la recepción de la cruz. Hoy la cruz es la base de la redención. Cristo murió en la cruz para dignificar el dolor. Es la transición de la vida terrena y la vida eterna. Al moribundo le ponen en sus manos frías un crucifijo. Es el paso de pasar a la vida bienaventuranza.


En gratitud el mundo ha esperado que haya una vida eterna. Cristo murió en una cruz latina; San Pedro fue crucificado en una cruz latina, pero puesta de cabeza. San Andrés murió en un cruz en forma de equis.

Hay en el mundo muchas cruces que se hicieron por la nación. Hay cruces propias de las naciones. Por eso hay una cruz con un adjetivo que la hizo propia de su nación. Hay una cruz mexicana, alemana, ucraniana, francesa. Conviene hacer un viaje turístico para conocer las cruces de cada nación. Hay cruces monumentales en Rumania, en Polonia, en Roma, en Galicia, en Monte Calvo en Italia, en Cataluña. En San Santiago.

Vale la pena viajar a España y conocer la cruz del mausoleo de Francisco Franco. Es la cruz más monumental del mundo. La cruz está en el Valle de los Caídos. Tiene 152.4 de altura. En su basamento están las estatuas de los 4 evangelios. Cada estatua es de 18 metros. Si no se puede ir al Valle de los Caídos, por lo menos hagan el esfuerzo por conocer la cruz gigante de Groom, en el estado de Texas, en Estados Unidos. Es bueno vivir las cruces del mundo.