/ sábado 27 de octubre de 2018

El recuento de una ilusión

Desde las primicias de la civilización el ser humano supo que tenía que haber un líder en el clan que los guiara hacia la supervivencia, era fácil escogerlo: el más fuerte y astuto, pero con el tiempo fuimos evolucionando en cuestión de quién y cómo se gobierna. Durante mucho tiempo mi formación política crítica estuvo inmersa de noticiarios gringos y tuve muchos años de ilusión republicana, es decir, de creer que el método de la república (donde un pueblo soberano elige a su gobierno) era el correcto. Además, Estados Unidos se autoproclamaba ejemplo de libertad y destrozaba países argumentando que no practicaban una forma de gobernar correcta: la democracia republicana. Eran tiempos del oscurantismo mediático.

Ahora sé que el método republicano funciona sola, única, clara, real, histórica y fielmente si los ciudadanos están preparados para ello.

A lo largo de la historia política de muchos países observo cómo seducidos por la idea de una república han decapitado (en Francia) o fusilado (en Rusia) a sus reyes, sólo para ser presas de estos nuevos gobiernos totalitarios como fue el de Napoleón, de veinte, y de Stalin, de treinta años.

En este siglo hemos visto que la ilusión de tener un gobierno republicano ha deshecho países como Siria o Egipto, sin embargo, la explicación es simple: sus ciudadanos no estaban preparados para vivir en modo república. La mayoría de los países árabes no lo están, y curiosamente, fíjese usted, amable lector, lectora, que algunos analistas dicen que es por culpa del burka (velo que tapa la cara a la mujer), porque si no hay democracia en sus familias no va a ser posible en sus gobiernos.

En Rusia, Vladimir Spiridonovich Putin lleva 18 años en el poder y ha sido reelegido hasta el 2024. ¿Qué tan malo es esto? Nada malo, es peor la revolución o el hambre. Además, es fácil teorizar que los caudillos rusos, como en un tiempo sucedió en México, se matarían unos a otros hasta que llegue el de mano dura.

Estimado lector y lectora, estoy segura de que el método republicano no es para todos los países, a menos que usted me convenza de lo contrario… escríbame en www.silviagonzalez.com.mx



Desde las primicias de la civilización el ser humano supo que tenía que haber un líder en el clan que los guiara hacia la supervivencia, era fácil escogerlo: el más fuerte y astuto, pero con el tiempo fuimos evolucionando en cuestión de quién y cómo se gobierna. Durante mucho tiempo mi formación política crítica estuvo inmersa de noticiarios gringos y tuve muchos años de ilusión republicana, es decir, de creer que el método de la república (donde un pueblo soberano elige a su gobierno) era el correcto. Además, Estados Unidos se autoproclamaba ejemplo de libertad y destrozaba países argumentando que no practicaban una forma de gobernar correcta: la democracia republicana. Eran tiempos del oscurantismo mediático.

Ahora sé que el método republicano funciona sola, única, clara, real, histórica y fielmente si los ciudadanos están preparados para ello.

A lo largo de la historia política de muchos países observo cómo seducidos por la idea de una república han decapitado (en Francia) o fusilado (en Rusia) a sus reyes, sólo para ser presas de estos nuevos gobiernos totalitarios como fue el de Napoleón, de veinte, y de Stalin, de treinta años.

En este siglo hemos visto que la ilusión de tener un gobierno republicano ha deshecho países como Siria o Egipto, sin embargo, la explicación es simple: sus ciudadanos no estaban preparados para vivir en modo república. La mayoría de los países árabes no lo están, y curiosamente, fíjese usted, amable lector, lectora, que algunos analistas dicen que es por culpa del burka (velo que tapa la cara a la mujer), porque si no hay democracia en sus familias no va a ser posible en sus gobiernos.

En Rusia, Vladimir Spiridonovich Putin lleva 18 años en el poder y ha sido reelegido hasta el 2024. ¿Qué tan malo es esto? Nada malo, es peor la revolución o el hambre. Además, es fácil teorizar que los caudillos rusos, como en un tiempo sucedió en México, se matarían unos a otros hasta que llegue el de mano dura.

Estimado lector y lectora, estoy segura de que el método republicano no es para todos los países, a menos que usted me convenza de lo contrario… escríbame en www.silviagonzalez.com.mx