En un agotador video, a pesar de que sólo dura menos de tres minutos, aparece un grupo de siete personas. Una de las chicas, con su celular en la mano, les dice: Voy a pedirle a ese muchacho que nos saque una foto. Él responde que sí. Ahora el nuevo fotógrafo les anima: Muy bien, todo el mundo diga “Chees”. Pero la chica le comenta: Yo soy vegetariana, ¿podrías decir otra cosa? Muy bien responde él; ahora todos digan tofu. Otro interviene en el diálogo diciendo con cierto tono molesto: El tofu no es tan bueno para los vegetarianos, y es malo para nuestros niveles de testosterona. Mejor si sonríen todos. Ahora otra joven dice: Este idiota me pide que sonría. El que va tomar la foto contesta: No soy idiota, les estoy tomando una foto, pero vuelve a ser interrumpido por uno mientras le reclama: ¿Por qué debemos sonreír todos igual? Para tomarles la foto responde, pero si prefieren puedo contar hasta tres. Ahora se mete uno más, reclamándole: ¿Te gustaría que la gente disléxica, dejase de existir? Mi primo tiene dislexia así que me ofendes. Por lo que otro le reclamó diciendo: Yo no sé ni quiénes son mis primos pues soy adoptado, así que me ofendes a mí también. El del celular les dice entonces podemos pensar en algo que nos guste a todos. Y ante una nueva queja, el de la foto exclama “Jesús”. Una de las mujeres con gesto enojado dice: No entiendo qué tiene que ver la religión con todo esto. Otro más afirma: Yo soy ateo, así que también me insultas a mí. Una de las jóvenes le protesta afirmando: Eso es un comentario sobre debates humanos. Estás tratando de controlar a la gente, sólo quieres a las personas, ¿alguien se ha parado a pensar en los animales? Quien va a tomar la foto dice: Pueden hacer el signo de paz con los dedos. De nuevo le protestan acusándolo de querer culturizarlos y eso es un asunto muy grave. Por fin, ya harto el del celular, hace un gesto como tomando una “selfie”, les avienta el teléfono y se va.
Estos son los tipos de argumentos por los que muchos hacen difícil la convivencia humana. Hay demasiada amargura caminando por las calles. Ojalá nosotros evitemos caer en esas actitudes negativas. ¿Sí?
