Por: Jorge Cruz Camberos
Uno de los principales factores para que haya flujo económico local y un desarrollo equilibrado, que genere mayor competitividad, es el dinamismo empresarial resultado del emprendimiento, rubro en el que tenemos grandes pendientes. Hoy les hablaré de ello.
Analicemos los indicadores de la Plataforma de Inteligencia Competitiva sobre el desempeño económico de la ciudad: si tomamos en cuenta el segundo trimestre del 2022, podemos decir que la ciudad va por muy buen camino, con un crecimiento estimado por encima del 4.5%, y una considerable generación de empleos. Sin embargo, tenemos que ser realistas, vemos focos en tonos ámbar y rojo por atender.
De entrada, no estamos impulsando la creación y generación de nuevas empresas locales, y aunado a ello, la mayoría de los empleos se están generando en la industria de la transformación, sector que sin duda seguirá creciendo en los próximos meses.
Entonces, ¿qué está sucediendo?, ¿a poco no tenemos empresarios visionarios o una población emprendedora?, ¿qué no somos muy echados pa’ adelante los de Chihuahua?
Entonces, analicemos el universo de empresas ubicadas en Chihuahua capital:
Registros oficiales indican que tenemos 36,109 unidades económicas, de las cuales el 99.5% son Mipymes, que tienen entre uno y 250 colaboradores, las cuales están divididas de la siguiente manera: el 56% son negocios con 1 a 5 personas (microempresas); el 37%, de 6 a 50 (pequeñas), y el 7%, de 50 a 250 (medianas); Destaca que la mayoría de la población está empleada en empresas de 1 a 50 colaboradores.
Por otra parte, del total de empresas del municipio un .03% está en el sector primario, el 9.6% en el secundario, y el 90.04% en el terciario, que es considerado como el sector que concentra la mitad del empleo formal de nuestra capital. Este último concentra el 50.2% en servicios y el 39.3% en comercio, principalmente.
Sin duda hace falta mucho más emprendimiento y más empresarios decididos a invertir, pero ¿cómo hacerle para tener más inversionistas o más gente que quiera experimentar desafíos empresariales, que tengan claras las oportunidades, basadas en nuestra vocación y el dinamismo de la economía mundial?
Para responder estos cuestionamientos basta comentar sobre dos grandes iniciativas: la primera es el MIT REAP, liderado por Desarrollo Económico de Chihuahua, de la mano de la Academia, y el gobierno estatal y el municipal. Se trata de un programa de aceleración de emprendimiento a través de la Universidad Tecnológica de Massachusetts (18 meses). Busca desarrollar proyectos productivos, generar empleos bien pagados y capacitación.
Por otro lado, está el Fondo Municipal Mipyme, que toma como base que en la actualidad, de cada 100 empresas únicamente 22 tuvieron acceso a algún financiamiento, y únicamente el 29% hizo uso del mismo por considerarlos muy caros. Este mecanismo, anunciado con bombo y platillo, pondrá a disposición de las empresas 100 millones de pesos, con intereses a tasas atractivas del 13% anual, y plazos de 5 años.
Esperemos que ambas fortalezcan nuestra economía y veamos más empresas chihuahuenses “rompiéndola” allá afuera, conquistando nuevos mercados, nacionales o internacionales.
