La semana pasada abordé el tema (polémico) de la neutralidad de la red y el comienzo de una guerra para mantener la misma. Gracias a un correo electrónico de un lector, es que hoy trato el tema del "zero rating", contenido en el proyecto de “lineamientos para la gestión de tráfico y administración de red a que deberán sujetarse los concesionarios y autorizados que presten el servicio de acceso a internet” del Instituto Federal de Telecomunicaciones.
¿Qué es el “zero rating”?
Pues, es cuando una empresa que ofrece el servicio de internet no cobra por el acceso a una aplicación, lo cual ya es bastante común en planes de las empresas de telefonía celular que ofrecen acceso sin costo a las aplicaciones como Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat, Uber y hasta las aplicaciones bancarias.
Para el gigante de las redes sociales Facebook, estas aplicaciones de zero rating pueden "ayudar a poner a la gente en línea y a mantener a la gente que de otra manera no estaría conectada en línea de forma consistente, con una línea base de conectividad", esto en un comentario enviado a la consulta pública sobre lineamientos de gestión de tráfico en internet.
Además la empresa de Mark Zuckerberg opina que este tipo de aplicaciones pueden ayudar a que los consumidores mexicanos superen barreras en la adopción de internet en su estilo de vida, educación, finanzas y entretenimiento.
Esta circunstancia de pandemia en la que vivimos desde marzo pasado es un buen ejemplo de la utilidad de estas aplicaciones zero rating, ya que ha permitido mayor acceso a información de salud, alertas sanitarias y mantenerse en contacto con amigos y seres queridos.
Un acuerdo relevante, a inicios de este periodo de confinamiento, fue el acuerdo logrado por los operadores de telefonía móvil: acordaron ofrecer acceso sin costo a portales del gobierno federal que contienen información sobre el coronavirus.
Facebook coincide con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), regulador que propuso el anteproyecto, en que debe permitirse el zero rating.
El Covid-19 no se va a ir pronto. La normalidad de enero o febrero ya nunca volverá. Nuestro entorno será principalmente digital, mientras no existan maneras de defendernos del virus (además de las ya conocidas como lavarse las manos), por lo que el inesperado tráfico de datos que se incrementó desde marzo ya es una constante en todo el mundo.
Todos hemos encontrado en internet una herramienta para continuar con nuestras actividades cotidianas a distancia, por ello se vuelve prioritario resolver el problema del tráfico ininterrumpido en internet con la misma calidad de navegación, así como acelerar la conectividad en las zonas más remotas del país.
