Pedí al gobernador Javier Corral habilitara nuevos espacios hospitalarios y una estrategia de mayor alcance para la contención del virus
Días antes de que se difundiera el fallecimiento de varias personas en casa o en la calle porque los hospitales Covid-19 se encuentran saturados, exigí al gobierno de Javier Corral habilitara más espacios para la atención de pacientes y una estrategia de mayor alcance para la contención del virus.
No es la primera vez que he señalado que las fatales consecuencias de la pandemia en Chihuahua son responsabilidad del Gobierno del Estado porque atendió tarde lo que en otros países hicieron en la víspera.
Volvimos al semáforo naranja y quizá lleguemos al rojo, en el peor de los escenarios, porque la administración estatal no se preparó aún cuando estaba enterada de las medidas básicas de prevención que implementaron muchos países.
Aquí no hubo campaña de difusión, la reconversión hospitalaria llegó tarde e insuficiente, falta de medicamentos y de insumos básicos para la protección del personal de la salud, a quien reitero mi reconocimiento porque lucha por salvar vidas a costa de la propia.
Desde marzo solicité que el Estado comprara al menos un millón de pruebas para su aplicación en zonas de incidencia y una serie de propuestas de estímulos fiscales y apoyos para la población más vulnerable, que el gobierno dice que hace, pero nadie vemos.
Hoy los hospitales públicos y privados están al borde del colapso por un repunte de contagios del que el gobierno estatal estaba enterado.
¿Y cuál ha sido la respuesta?
Si usted la sabe compártala, por favor.
Lo que veo es que aumentan dramáticamente los contagios y la gente está muriendo.
También veo a un gobernador ya ocupado en una agenda electoral personal, alejado de los problemas de Chihuahua, como lo ha estado desde que inició su administración.
El Covid-19 agravó la crisis en el sector salud.
Y para muestra otro botón: Pensiones Civiles del Estado.
La institución que por muchos años fue ejemplo de calidad en el servicio, hoy está en quiebra.
Al corte de septiembre de 2019, las instituciones afiliadas le debían 3 mil 300 millones de pesos.
Pero eso tampoco le importa al gobernador del estado.
*Omar Bazán Flores. Licenciado en Derecho, vicepresidente del Congreso del Estado y presidente del Comité Directivo Estatal del PRI a partir de julio de 2017.
Empresario, dos veces diputado federal, dirigente juvenil, así como de la CNOP y Fundación Colosio en el estado de Chihuahua.
