/ miércoles 1 de mayo de 2019

Honrando la belleza natural

Estuve en la playa, y en mi caminar por la orilla del mar hice mi tarea de limpiar mientras admiraba los escenarios naturales tan maravillosos propios del lugar.

Cada paisaje que tengo la fortuna de visitar me lleva a agradecer la experiencia de vivir en este mundo que ofrece tanta belleza y magia.

En Semana Santa los lugares turísticos se llenan más de lo normal, visitantes locales y foráneos disfrutan, unos en la responsabilidad de cuidar la naturaleza pero otros en una total despreocupación.

Observo familias, grupos de jóvenes, parejas y personas solitarias que llegan y se sientan como si nada, ahí rodeados de basura. Veo cómo los puestos de comida arman sus estantes en medio del caos, apilando de nuevo todos esos platos, vasos y popotes desechables para servir a esas masas que aventarán lo que les sobre al dejar el lugar, simple y sencillamente porque no existe ninguna consecuencia legal real para la ignorancia, el valemadrismo y la desidia.

Pienso en la manera de gobernar y puedo enlistar razones estúpidas del poder para no hacer nada ante este problema y he aquí la más pesada: mantener al pueblo “contento” no incomodarlo, porque en las próximas elecciones recordarán qué chido se la pasaron y querrán que ese mando tan buena onda los siga “guiando”.

El no incomodar al pueblo es una prioridad política que está mermando responsabilidades urgentes.

Me topé a unas jovencitas que estaban extendiendo su toalla en unas rocas, el lugar estaba lleno de botellas tanto de plástico como de vidrio y al verme recogiendo me dijeron: “¡Qué mal que las autoridades no limpien! ¿Verdad, señora?”. Y yo les contesté: “No debemos pensar que alguien debe recoger la basura que tiramos, más bien tenemos que hacernos cada cual responsable de ponerla en su lugar y si extendemos la conciencia tomar medidas para generar la menos posible”.

El paternalismo político hace muchísimo daño, el pueblo siempre extendiendo la mano a ver qué recibe, a cambio de mantener una fuerza que aprovecha al máximo la ignorancia y falta de conciencia. Esperar que el gobierno haga algo en el tema de cuidado ambiental es perder tiempo, hoy los ciudadanos nos tenemos que involucrar en ver por el medioambiente, nosotros somos los más, los que tenemos esa fuerza que unida da resultados inmediatos. Te has preguntado ¿Tú que puedes hacer?

Para enrolarnos en este asunto, el primer paso es empezar a hacer una relación de agradecimiento hacia la naturaleza, conocerla, amarla, venerarla, valorarla y ya con esa conciencia de unidad y pertenencia en ella y con ella ¡Actuar! ¡Que los liderazgos sociales se den a la tarea de informar, conocer la naturaleza es amarla!

Puedo decir con orgullo que los lugares que limpié estas vacaciones en Mazatlán no nada más dejaron espacios libres de basura, sino un ejemplo hacia aquellos que con curiosidad me observaron y felicitaron, desde una visión que quizá los inspire a cooperar de alguna manera en la restauración de este increíble y bondadoso planeta.

P.D. Este próximo domingo te invito a que te unas, nos vemos en la presa El Rejón en la estructura metálica de la familia a las 6:30 a.m. Ahí decidiremos qué lugar limpiar. Actuar es inspirar.


Estuve en la playa, y en mi caminar por la orilla del mar hice mi tarea de limpiar mientras admiraba los escenarios naturales tan maravillosos propios del lugar.

Cada paisaje que tengo la fortuna de visitar me lleva a agradecer la experiencia de vivir en este mundo que ofrece tanta belleza y magia.

En Semana Santa los lugares turísticos se llenan más de lo normal, visitantes locales y foráneos disfrutan, unos en la responsabilidad de cuidar la naturaleza pero otros en una total despreocupación.

Observo familias, grupos de jóvenes, parejas y personas solitarias que llegan y se sientan como si nada, ahí rodeados de basura. Veo cómo los puestos de comida arman sus estantes en medio del caos, apilando de nuevo todos esos platos, vasos y popotes desechables para servir a esas masas que aventarán lo que les sobre al dejar el lugar, simple y sencillamente porque no existe ninguna consecuencia legal real para la ignorancia, el valemadrismo y la desidia.

Pienso en la manera de gobernar y puedo enlistar razones estúpidas del poder para no hacer nada ante este problema y he aquí la más pesada: mantener al pueblo “contento” no incomodarlo, porque en las próximas elecciones recordarán qué chido se la pasaron y querrán que ese mando tan buena onda los siga “guiando”.

El no incomodar al pueblo es una prioridad política que está mermando responsabilidades urgentes.

Me topé a unas jovencitas que estaban extendiendo su toalla en unas rocas, el lugar estaba lleno de botellas tanto de plástico como de vidrio y al verme recogiendo me dijeron: “¡Qué mal que las autoridades no limpien! ¿Verdad, señora?”. Y yo les contesté: “No debemos pensar que alguien debe recoger la basura que tiramos, más bien tenemos que hacernos cada cual responsable de ponerla en su lugar y si extendemos la conciencia tomar medidas para generar la menos posible”.

El paternalismo político hace muchísimo daño, el pueblo siempre extendiendo la mano a ver qué recibe, a cambio de mantener una fuerza que aprovecha al máximo la ignorancia y falta de conciencia. Esperar que el gobierno haga algo en el tema de cuidado ambiental es perder tiempo, hoy los ciudadanos nos tenemos que involucrar en ver por el medioambiente, nosotros somos los más, los que tenemos esa fuerza que unida da resultados inmediatos. Te has preguntado ¿Tú que puedes hacer?

Para enrolarnos en este asunto, el primer paso es empezar a hacer una relación de agradecimiento hacia la naturaleza, conocerla, amarla, venerarla, valorarla y ya con esa conciencia de unidad y pertenencia en ella y con ella ¡Actuar! ¡Que los liderazgos sociales se den a la tarea de informar, conocer la naturaleza es amarla!

Puedo decir con orgullo que los lugares que limpié estas vacaciones en Mazatlán no nada más dejaron espacios libres de basura, sino un ejemplo hacia aquellos que con curiosidad me observaron y felicitaron, desde una visión que quizá los inspire a cooperar de alguna manera en la restauración de este increíble y bondadoso planeta.

P.D. Este próximo domingo te invito a que te unas, nos vemos en la presa El Rejón en la estructura metálica de la familia a las 6:30 a.m. Ahí decidiremos qué lugar limpiar. Actuar es inspirar.