/ martes 14 de julio de 2020

Hoy, hoy, hoy

Muchos fueron, durante su campaña y su mandato presidencial, los dichos, las frases, las expresiones, las declaraciones o las ocurrencias que surgieron de la boca de Vicente Fox. Unas levantaron sonrisas, otras críticas, oposiciones o controversias.

Desde el comes y te vas hasta los trabajos que ni los negros o las lavadoras de dos patas, pasando por el ¿y yo por qué?, o el me siento cargando la piedra del pípila, las exposiciones del exmandatario quedaron para quedarse en el anecdotario mexicano. Otros expresidentes también hicieron de las suyas sin que el actual escape a ello, como el “yo tengo otros datos”, o el “me canso ganso”.

De Fox rescatamos el hoy, hoy, hoy y el resolveré Chiapas en 15 minutos. Estas declaraciones pueden aplicarse, precisamente hoy, a quienes en la presente pandemia permanecen en casa y a veces pierden el tiempo quizá miserablemente, personas que pueden hacerlo, pues existen otras que por su situación económica o social requieren dejar su hábitat y lanzarse tras la chuleta a pesar de los pesares.

Ese hoy, hoy, hoy, indica que existen muchas cosas que en el tráfico de cada día se han quedado en el tintero, y que ahora que estamos en casa podemos realizarlas si le echamos ganas, y no mañana ni pasado, sino hoy.

Hay miles de cosas que hacer en casa y que se postergan por una u otra causa, y se expresa un no tengo tiempo, lo haré en vacaciones o pediré un descanso. Incluso existen pendientes por aclarar, por explicar, por disipar, por compartir con quienes vivimos en vista de mejorar nuestras relaciones; y también llamar por teléfono o celular, por correo o por cualquier otro medio a quienes hemos descuidado, ofendido u olvidado, para pedir disculpas o perdón, agradecer o mostrar apoyo y solidaridad. Hoy es tiempo, oportunidad que no hay que dejar pasar.

En cuanto al resolver tal o cual cuestión que se antoja fácil aunque no lo sea y se vuelve compleja, no pensemos en solucionarla de buenas a primeras sintiendo que bastan 15 minutos para lograrlo. Si nos quedamos en casa hay posibilidades de salir airosos dado el tiempo que existe para sopesar el resultado y alcanzar un desenlace positivo. Tomémoslo en cuenta.


Muchos fueron, durante su campaña y su mandato presidencial, los dichos, las frases, las expresiones, las declaraciones o las ocurrencias que surgieron de la boca de Vicente Fox. Unas levantaron sonrisas, otras críticas, oposiciones o controversias.

Desde el comes y te vas hasta los trabajos que ni los negros o las lavadoras de dos patas, pasando por el ¿y yo por qué?, o el me siento cargando la piedra del pípila, las exposiciones del exmandatario quedaron para quedarse en el anecdotario mexicano. Otros expresidentes también hicieron de las suyas sin que el actual escape a ello, como el “yo tengo otros datos”, o el “me canso ganso”.

De Fox rescatamos el hoy, hoy, hoy y el resolveré Chiapas en 15 minutos. Estas declaraciones pueden aplicarse, precisamente hoy, a quienes en la presente pandemia permanecen en casa y a veces pierden el tiempo quizá miserablemente, personas que pueden hacerlo, pues existen otras que por su situación económica o social requieren dejar su hábitat y lanzarse tras la chuleta a pesar de los pesares.

Ese hoy, hoy, hoy, indica que existen muchas cosas que en el tráfico de cada día se han quedado en el tintero, y que ahora que estamos en casa podemos realizarlas si le echamos ganas, y no mañana ni pasado, sino hoy.

Hay miles de cosas que hacer en casa y que se postergan por una u otra causa, y se expresa un no tengo tiempo, lo haré en vacaciones o pediré un descanso. Incluso existen pendientes por aclarar, por explicar, por disipar, por compartir con quienes vivimos en vista de mejorar nuestras relaciones; y también llamar por teléfono o celular, por correo o por cualquier otro medio a quienes hemos descuidado, ofendido u olvidado, para pedir disculpas o perdón, agradecer o mostrar apoyo y solidaridad. Hoy es tiempo, oportunidad que no hay que dejar pasar.

En cuanto al resolver tal o cual cuestión que se antoja fácil aunque no lo sea y se vuelve compleja, no pensemos en solucionarla de buenas a primeras sintiendo que bastan 15 minutos para lograrlo. Si nos quedamos en casa hay posibilidades de salir airosos dado el tiempo que existe para sopesar el resultado y alcanzar un desenlace positivo. Tomémoslo en cuenta.