/ jueves 3 de diciembre de 2020

Informes


“Vivir de manera efectiva significa poseer la información adecuada”: Norbert Wiener

Aprecio el espacio que la Organización Editorial Mexicana me brinda a través de El Heraldo de Chihuahua para platicar y sincerarme con ustedes, queridos lectores, y en un ejercicio más de honestidad les digo que no me gusta acudir a los informes de actividades de gobernadores, presidentes municipales, diputados, senadores y de ningún personaje político; me aburren, a la media hora de estar escuchando me pierdo pensando en otra cosa y además me molesta mucho aplaudir cuando no deseo hacerlo, a veces en estos solemnes actos se aplaude sin saber por qué. Si a esto le agregamos que para el citado día del informe tiene uno que bañarse y ponerse sus mejores garras, prefiero mejor leerlo después con calma.

Entiendo y comprendo que en la eterna búsqueda de la democracia perfecta el gobernante tiene la obligación de informar al pueblo sobre sus acciones realizadas, así mismo el ciudadano tiene el derecho a recibir dicha información; esto obedece a fundamentos legales, pero existen quienes prefieren sentir los efectos de esas maravillosas acciones emprendidas por parte de la clase política en lugar de escucharlas y a veces lo informado contra la realidad no encuentra ningún elemento de coincidencia.

Derivado de la contingencia por la que estamos pasando debido a la pandemia, hoy los informes de nuestros distinguidos políticos son anunciados para que los veamos a través de las benditas redes sociales o plataformas virtuales, es decir, ya no se requiere de invitación personalizada con número de asiento asignado, ahora los invitados VIP se mezclan con los ciudadanos que no gozan de cierta exclusividad con sólo encender su computadora (quienes la tienen) e ingresar al Facebook o a la plataforma contratada para ello. De alguna manera, esta época del Covid nos está acercando.

El actual presidente de México informa todos los días a través de sus polémicas mañaneras la agenda nacional basada en lo que él desee dar a conocer; el ejercicio del mandatario dejó de ser interesante desde hace tiempo, la audiencia en picada, ya que se habla mucho pero no se resuelve nada de los problemas por los que atraviesa la nación en estos momentos. Las caprichosas mañaneras, cuya transmisión cuesta y bastante, se han convertido en una fastidiosa rutina, en un evento de jactancia donde supuestos periodistas, afines a la mal llamada cuarta transformación, hacen puntualmente el caldo gordo a quien nos dice que todo va bien y que en el tema de la pandemia ya vamos de salida.

Es muy cierto que la información es un derecho y quienes deambulamos de alguna manera en los medios de comunicación desempeñamos un papel crucial en el discernimiento de la realidad de nuestro diario vivir y para ello es indispensable contar con información veraz y comprobable para lograr que quienes nos regalan unos minutos al leernos tengan los elementos necesarios en la creación de un juicio que ayude con sustento a tener un mejor mañana.

Secretario de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua



“Vivir de manera efectiva significa poseer la información adecuada”: Norbert Wiener

Aprecio el espacio que la Organización Editorial Mexicana me brinda a través de El Heraldo de Chihuahua para platicar y sincerarme con ustedes, queridos lectores, y en un ejercicio más de honestidad les digo que no me gusta acudir a los informes de actividades de gobernadores, presidentes municipales, diputados, senadores y de ningún personaje político; me aburren, a la media hora de estar escuchando me pierdo pensando en otra cosa y además me molesta mucho aplaudir cuando no deseo hacerlo, a veces en estos solemnes actos se aplaude sin saber por qué. Si a esto le agregamos que para el citado día del informe tiene uno que bañarse y ponerse sus mejores garras, prefiero mejor leerlo después con calma.

Entiendo y comprendo que en la eterna búsqueda de la democracia perfecta el gobernante tiene la obligación de informar al pueblo sobre sus acciones realizadas, así mismo el ciudadano tiene el derecho a recibir dicha información; esto obedece a fundamentos legales, pero existen quienes prefieren sentir los efectos de esas maravillosas acciones emprendidas por parte de la clase política en lugar de escucharlas y a veces lo informado contra la realidad no encuentra ningún elemento de coincidencia.

Derivado de la contingencia por la que estamos pasando debido a la pandemia, hoy los informes de nuestros distinguidos políticos son anunciados para que los veamos a través de las benditas redes sociales o plataformas virtuales, es decir, ya no se requiere de invitación personalizada con número de asiento asignado, ahora los invitados VIP se mezclan con los ciudadanos que no gozan de cierta exclusividad con sólo encender su computadora (quienes la tienen) e ingresar al Facebook o a la plataforma contratada para ello. De alguna manera, esta época del Covid nos está acercando.

El actual presidente de México informa todos los días a través de sus polémicas mañaneras la agenda nacional basada en lo que él desee dar a conocer; el ejercicio del mandatario dejó de ser interesante desde hace tiempo, la audiencia en picada, ya que se habla mucho pero no se resuelve nada de los problemas por los que atraviesa la nación en estos momentos. Las caprichosas mañaneras, cuya transmisión cuesta y bastante, se han convertido en una fastidiosa rutina, en un evento de jactancia donde supuestos periodistas, afines a la mal llamada cuarta transformación, hacen puntualmente el caldo gordo a quien nos dice que todo va bien y que en el tema de la pandemia ya vamos de salida.

Es muy cierto que la información es un derecho y quienes deambulamos de alguna manera en los medios de comunicación desempeñamos un papel crucial en el discernimiento de la realidad de nuestro diario vivir y para ello es indispensable contar con información veraz y comprobable para lograr que quienes nos regalan unos minutos al leernos tengan los elementos necesarios en la creación de un juicio que ayude con sustento a tener un mejor mañana.

Secretario de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua