/ domingo 29 de agosto de 2021

Inicia el regreso a clases presenciales

Por: Francisco Javier Pizarro

Mañana, lunes, se retorna en 21 estados de la república a las clases presenciales en los planteles escolares, las cuales se cerraron en marzo de 2020 a consecuencia del brote del Covid-19 del año pasado.

Los describo alfabéticamente: Aguascalientes, Bajo California (sur), Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Durango, Estado de México, Ciudad de México, Colima, Guanajuato, Jalisco, Querétaro, Morelos, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

Hidalgo, San Luis Potosí y Tamaulipas, por su parte, lo harán de manera escalonada, esto es, paulatinamente.

En Oaxaca el regreso a clases será sólo en escuelas privadas, ya que la sección del sindicato de Nacional de Trabajadores de la Educación declaró que las condiciones de las escuelas públicas “no eran adecuadas”. En realidad, porque no les han abonado el pago de sus salarios.

El gobernador de Quintana Roo, por su parte, dijo que será un regreso a clases voluntario, sólo hasta que se regrese al “semáforo verde” de la pandemia. Los mandatarios de Nayarit y Puebla optaron por implementar un modelo mixto digital y presencial.

Y finalmente, Baja California (norte) y Michoacán mantendrán las aulas virtuales y Guerrero anunció que el regreso a clases “se retrasará”, sin explicación alguna.

Es evidente que las 17 gubernaturas que ganó Morena el 6 de junio pasado fueron los que realmente acataron la política educativa del regreso a clases, en tanto que los gobernadores del PAN, PRI y MC, que fracasaron en 11 estados, se opusieron al regreso a clases presenciales, unos de manera soterrada y otros abiertamente.

Los comités participativos de diversas escuelas en el país han puesto ya en marcha el protocolo sanitario de la Secretaría de Educación Pública, integrado por padres, profesores y autoridades, el cual contempla varias medidas precautorias, que les comparto a grosso modo:

Se realizarán tres filtros a todas las personas que entren a las escuelas; se harán preguntas para saber si los que asisten tienen temperatura, tos a algún síntoma relacionado con el Covid-19 y, ahora también del virus Delta. Se contará con termómetros infrarrojos o digitales, se lavarán las manos con jabón y agua o gel con alcohol al 70%.

Todas las personas deberán portar cubreboca y mantener la sana distancia; suspender ceremonias, eventos y reuniones y dar mayor uso a los espacios abiertos, y, lo que es más trascendental: Avisar de inmediato a las autoridades competentes en caso de detectar o sospechar de algún contagio o malestar, ya sea en la casa de los alumnos o la escuela.

Finalizó dejando en claro que el regreso a las clases presenciales no es “obligatorio”, como se ha difundido perversamente con fines políticos. Si los padres, madres, abuelos y tutores no quieren que sus hijos “regresen a las clases presenciales”, es su derecho, pero también su responsabilidad.

Veremos y diremos qué alcance se logrará en términos de salud y desarrollo educativo la reintegración de las clases presenciales, para nuestros hijos y/o nietos.


Por: Francisco Javier Pizarro

Mañana, lunes, se retorna en 21 estados de la república a las clases presenciales en los planteles escolares, las cuales se cerraron en marzo de 2020 a consecuencia del brote del Covid-19 del año pasado.

Los describo alfabéticamente: Aguascalientes, Bajo California (sur), Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Durango, Estado de México, Ciudad de México, Colima, Guanajuato, Jalisco, Querétaro, Morelos, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

Hidalgo, San Luis Potosí y Tamaulipas, por su parte, lo harán de manera escalonada, esto es, paulatinamente.

En Oaxaca el regreso a clases será sólo en escuelas privadas, ya que la sección del sindicato de Nacional de Trabajadores de la Educación declaró que las condiciones de las escuelas públicas “no eran adecuadas”. En realidad, porque no les han abonado el pago de sus salarios.

El gobernador de Quintana Roo, por su parte, dijo que será un regreso a clases voluntario, sólo hasta que se regrese al “semáforo verde” de la pandemia. Los mandatarios de Nayarit y Puebla optaron por implementar un modelo mixto digital y presencial.

Y finalmente, Baja California (norte) y Michoacán mantendrán las aulas virtuales y Guerrero anunció que el regreso a clases “se retrasará”, sin explicación alguna.

Es evidente que las 17 gubernaturas que ganó Morena el 6 de junio pasado fueron los que realmente acataron la política educativa del regreso a clases, en tanto que los gobernadores del PAN, PRI y MC, que fracasaron en 11 estados, se opusieron al regreso a clases presenciales, unos de manera soterrada y otros abiertamente.

Los comités participativos de diversas escuelas en el país han puesto ya en marcha el protocolo sanitario de la Secretaría de Educación Pública, integrado por padres, profesores y autoridades, el cual contempla varias medidas precautorias, que les comparto a grosso modo:

Se realizarán tres filtros a todas las personas que entren a las escuelas; se harán preguntas para saber si los que asisten tienen temperatura, tos a algún síntoma relacionado con el Covid-19 y, ahora también del virus Delta. Se contará con termómetros infrarrojos o digitales, se lavarán las manos con jabón y agua o gel con alcohol al 70%.

Todas las personas deberán portar cubreboca y mantener la sana distancia; suspender ceremonias, eventos y reuniones y dar mayor uso a los espacios abiertos, y, lo que es más trascendental: Avisar de inmediato a las autoridades competentes en caso de detectar o sospechar de algún contagio o malestar, ya sea en la casa de los alumnos o la escuela.

Finalizó dejando en claro que el regreso a las clases presenciales no es “obligatorio”, como se ha difundido perversamente con fines políticos. Si los padres, madres, abuelos y tutores no quieren que sus hijos “regresen a las clases presenciales”, es su derecho, pero también su responsabilidad.

Veremos y diremos qué alcance se logrará en términos de salud y desarrollo educativo la reintegración de las clases presenciales, para nuestros hijos y/o nietos.