/ martes 5 de octubre de 2021

Interiorizar el odio

Por: Leslie Aime Oaxaca

Hablemos de endorracismo, “endo” proviene del griego que se traduce como “dentro” y racismo son los prejuicios causados por la “jerarquización” y distinción hacia personas de distintos grupos étnicos o nacionalidades (también “raza”). Podemos decir que endorracismo es el racismo que proviene desde dentro de nosotros hacia nosotros mismos o materializarlo a personas que pertenecen al mismo circulo que nosotros.

No es algo raro que cuando vamos a Estados Unidos, por ejemplo, sentimos racismo de personas de nuestro propio país, pero no somos los únicos, toda latinoamericana se incluye y también países de África o afrodescendientes.

Entonces esto tiene que ver con la percepción que tenemos primero sobre nosotros, pero no es algo que acabe de surgir, desde la colonización empezó a surgir una frase muy famosa que llega hasta la actualidad que es la de “mejorar la raza”, no hay manera más racista de referirnos a nuestras raíces que esa. Esas ideologías han influido muchísimo en la percepción que damos a otros o a nosotros mismos.

Cuando vemos comportamientos como estos, podemos percibir un apego aún más fuerte o grande a una cultura a la que originalmente no pertenecen, ya sea por una vergüenza estética (como no cumplir con los estereotipos) o por empezar a creer que todo lo malo que se dice del lugar de donde provenimos es cierto.

La verdad parece increíble que sucedan estas situaciones, pues vivimos en una sociedad multicultural y en México lo podemos ver muy marcado, Esther Pineda menciona en cuanto al tema: “Las sociedades latinoamericanas y caribeñas también pueden ser consideradas sociedades endorracistas, al rechazar su herencia pese a su carácter pluriétnico y multicultural”.

Es increíble vivir en un país tan variado, realmente podemos meditar mucho en esto, porque como vimos son conductas que se han repetido por cientos de años y el seguir creyendo que la estética de otros lugares es superior o ligar “raza” con “mejor” pueden ser los inicios de ser racistas incluso con nosotros mismos.

¿Mejorar? Si podemos y no necesitamos de absolutamente nada para mejorar como personas, no necesitamos da la noche a la mañana cambios radicales, empezar a sentirnos orgullosos de nuestras raíces y respetar las de otros es más que suficiente.


Por: Leslie Aime Oaxaca

Hablemos de endorracismo, “endo” proviene del griego que se traduce como “dentro” y racismo son los prejuicios causados por la “jerarquización” y distinción hacia personas de distintos grupos étnicos o nacionalidades (también “raza”). Podemos decir que endorracismo es el racismo que proviene desde dentro de nosotros hacia nosotros mismos o materializarlo a personas que pertenecen al mismo circulo que nosotros.

No es algo raro que cuando vamos a Estados Unidos, por ejemplo, sentimos racismo de personas de nuestro propio país, pero no somos los únicos, toda latinoamericana se incluye y también países de África o afrodescendientes.

Entonces esto tiene que ver con la percepción que tenemos primero sobre nosotros, pero no es algo que acabe de surgir, desde la colonización empezó a surgir una frase muy famosa que llega hasta la actualidad que es la de “mejorar la raza”, no hay manera más racista de referirnos a nuestras raíces que esa. Esas ideologías han influido muchísimo en la percepción que damos a otros o a nosotros mismos.

Cuando vemos comportamientos como estos, podemos percibir un apego aún más fuerte o grande a una cultura a la que originalmente no pertenecen, ya sea por una vergüenza estética (como no cumplir con los estereotipos) o por empezar a creer que todo lo malo que se dice del lugar de donde provenimos es cierto.

La verdad parece increíble que sucedan estas situaciones, pues vivimos en una sociedad multicultural y en México lo podemos ver muy marcado, Esther Pineda menciona en cuanto al tema: “Las sociedades latinoamericanas y caribeñas también pueden ser consideradas sociedades endorracistas, al rechazar su herencia pese a su carácter pluriétnico y multicultural”.

Es increíble vivir en un país tan variado, realmente podemos meditar mucho en esto, porque como vimos son conductas que se han repetido por cientos de años y el seguir creyendo que la estética de otros lugares es superior o ligar “raza” con “mejor” pueden ser los inicios de ser racistas incluso con nosotros mismos.

¿Mejorar? Si podemos y no necesitamos de absolutamente nada para mejorar como personas, no necesitamos da la noche a la mañana cambios radicales, empezar a sentirnos orgullosos de nuestras raíces y respetar las de otros es más que suficiente.