/ martes 7 de septiembre de 2021

La bandera de la lucha anticorrupción 

Por: Víctor Manuel Medina Calderón

“Si no tenemos policías, jueces, abogados, fiscales, honestos, valerosos y eficientes; si se rinden al crimen y a la corrupción, están condenando al país a la ignominia más desesperante y atroz” (JAVIER SICILIA)

Hoy termina un quinquenio que nos deja a los chihuahuenses un amargo sabor de boca. No sólo en la percepción, sino en la realidad de la nula obra pública, de un sistema de transporte fallido, con un alto índice de inseguridad, un sistema judicial corrupto y corruptor, con endeudamiento superior a los 65 mil millones de pesos, un sistema financiero quebrado, un gobernador acusado de negligente, flojo, viajero con recursos del estado, apasionado del deporte del golf, con gran capacidad de oratoria, pero poca capacidad de asumir responsabilidades y cumplir los encargos prometidos en su campaña y desde los inicios de su gobierno, agresivo y buscapleitos, pero al mismo tiempo solícito y cómplice cuando se trata de salvaguardarse.

Tal vez lo más lamentable es la complicidad de los llamados “órganos autónomos” caracterizados por acomodarse donde los intereses o los compromisos les invocan y el abuso que el ya casi exgobernador hizo de esta terrible falla de la democracia para sostener su ruta de gobierno.

Lo vemos en muchas instancias, el Poder Judicial, el Legislativo, la Fiscalía Anticorrupción, el Instituto de la Transparencia, la Contraloría y tantos más que incluyen hasta la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.

Las recomendaciones 17 y 20 del 2021 emitidas por la CEDH reflejan que desde la visión de este órgano “autónomo” se requieren dos varas distintas para una misma medida. Dirigidas a Javier Corral la primera y a la Presidencia Municipal de Chihuahua la segunda, se nota la intención de no tocar ni con una hoja de papel a quien designó al actual presidente de la CEDH al destacar que en el primer caso no se establece carácter de víctima, no se inscribe en el padrón de víctimas y no se obliga la reparación de daño, mientras en el segundo caso sí se establecen cinco puntos importantes como los antes descritos ante violaciones acreditadas, en ambos casos, a los derechos humanos de las demandantes. Para muestra un botón.

Afortunadamente Javier Corral ya se va. Abrazado de la lucha anticorrupción prometió que César Duarte pagaría por sus excesos. Hoy nadie promete que Javier Corral pague por los suyos. ¿Será que todos se tapan con la misma cobija y sólo simulan ante los ciudadanos su compromiso con el pueblo? De ser así, ¡Dios nos agarre confesados!

Correo: vicmedina@hotmail.com

Por: Víctor Manuel Medina Calderón

“Si no tenemos policías, jueces, abogados, fiscales, honestos, valerosos y eficientes; si se rinden al crimen y a la corrupción, están condenando al país a la ignominia más desesperante y atroz” (JAVIER SICILIA)

Hoy termina un quinquenio que nos deja a los chihuahuenses un amargo sabor de boca. No sólo en la percepción, sino en la realidad de la nula obra pública, de un sistema de transporte fallido, con un alto índice de inseguridad, un sistema judicial corrupto y corruptor, con endeudamiento superior a los 65 mil millones de pesos, un sistema financiero quebrado, un gobernador acusado de negligente, flojo, viajero con recursos del estado, apasionado del deporte del golf, con gran capacidad de oratoria, pero poca capacidad de asumir responsabilidades y cumplir los encargos prometidos en su campaña y desde los inicios de su gobierno, agresivo y buscapleitos, pero al mismo tiempo solícito y cómplice cuando se trata de salvaguardarse.

Tal vez lo más lamentable es la complicidad de los llamados “órganos autónomos” caracterizados por acomodarse donde los intereses o los compromisos les invocan y el abuso que el ya casi exgobernador hizo de esta terrible falla de la democracia para sostener su ruta de gobierno.

Lo vemos en muchas instancias, el Poder Judicial, el Legislativo, la Fiscalía Anticorrupción, el Instituto de la Transparencia, la Contraloría y tantos más que incluyen hasta la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.

Las recomendaciones 17 y 20 del 2021 emitidas por la CEDH reflejan que desde la visión de este órgano “autónomo” se requieren dos varas distintas para una misma medida. Dirigidas a Javier Corral la primera y a la Presidencia Municipal de Chihuahua la segunda, se nota la intención de no tocar ni con una hoja de papel a quien designó al actual presidente de la CEDH al destacar que en el primer caso no se establece carácter de víctima, no se inscribe en el padrón de víctimas y no se obliga la reparación de daño, mientras en el segundo caso sí se establecen cinco puntos importantes como los antes descritos ante violaciones acreditadas, en ambos casos, a los derechos humanos de las demandantes. Para muestra un botón.

Afortunadamente Javier Corral ya se va. Abrazado de la lucha anticorrupción prometió que César Duarte pagaría por sus excesos. Hoy nadie promete que Javier Corral pague por los suyos. ¿Será que todos se tapan con la misma cobija y sólo simulan ante los ciudadanos su compromiso con el pueblo? De ser así, ¡Dios nos agarre confesados!

Correo: vicmedina@hotmail.com