Para algunas personas, el inicio de año a veces representa toda una odisea, pues el gasto excesivo en el mes de diciembre provoca que en este primer mes del año no se tenga la suficiente liquidez para hacer frente a los gastos cotidianos. Si este es tu caso, sigue las siguientes recomendaciones:
- Acéptala.- Cruzarse de brazos y fingir que todo está bien no resolverá nada. A cualquiera le puede pasar, gastar dinero en regalos y reuniones en diciembre, o hasta en ese capricho que por fin te compraste puede ocasionar que tus tarjetas estén al límite, y si estás acostumbrado a financiarte con ellas, puedes llegar a sentirte abrumado. Acepta la situación, y pasemos al segundo paso.
- No la hagas más grande.- Para poder salir de la cuesta, debes dejar de gastar, y si quieres equilibrar tu situación financiera debes entrar en un “plan de austeridad”, sólo gasta en lo estrictamente indispensable, como el pago de recibos y créditos, alimentos y transporte. Deja de usar las tarjetas de crédito para poder disminuir la deuda, si se te complica, debes tomar una medida más contundente: destrúyelas. En esta parte también puedes pensar en un refinanciamiento, por ejemplo, solicitar un crédito de nómina con una tasa más baja y pagos fijos a largo plazo, para liquidar y cancelar todas tus tarjetas.
- Acelera el paso.- Además de disminuir tus gastos, te ayudaría bastante incrementar tus ingresos, puedes trabajar horas extras, tratar de vender más en tu negocio o realizar alguna actividad adicional los fines de semana.
- Activos.- Si la situación es apremiante, es preferible vender algún activo antes que dejar de cumplir con tus compromisos financieros, pues mantener sano tu historial crediticio es sumamente importante para adquirir créditos en el futuro. Puedes vender una pantalla, un teléfono celular, algún equipo de audio o herramienta. ¡Ojo, jamás empeñes!, es preferible venderle ese activo a muy bajo costo a algún familiar o amigo, pues las casas de empeño manejan tasas de interés impagables. Si empeñas algo, quizá no lo podrás recuperar, y si lo haces, habrá sido muy costoso hacerlo.
- Año nuevo, finanzas nuevas.- Bien dicen que es mejor prevenir que lamentar, así que pon dentro de tus principales propósitos de este 2021, adquirir y poner en práctica con tu familia buenos hábitos financieros. Trata de eliminar de tu vida cotidiana gastos innecesarios y fomenta el ahorro y la inversión.
LAF y MF Luis Gómez
Analista financiero
