La soberanía nacional reside en cada uno de nosotros, tenemos una parte de ella.
La soberanía es el máximo poder que tiene el Estado, y se logra por medio de la democracia.
La soberanía es el máximo poder de un Estado y la tenemos todos los ciudadanos, y se la otorgamos a los órganos de poder.
La democracia no es sólo una cuestión de poder sino que es la participación de todos para obtener el desarrollo.
En mi formación de vida he entendido que somos consecuencia del compromiso de la Independencia de nuestro país, la Revolución Mexicana y que la consolidación de nuestra democracia nos permite disfrutar de los Derechos Humanos.
Por ello es que tenemos como tarea diaria trabajar para estar en un constante mejoramiento en lo económico, político y social, es decir trabajar por la democracia.
La democracia es uno de los valores y principios de las Naciones Unidas, es por ello que deben existir políticos inclusivos. Las posibilidades de participación ciudadana en las decisiones que se toman para definir el rumbo de un municipio, estado o país, se abren con el cabildeo ciudadano.
Lo que requerimos para transformar nuestras instituciones, es que haya una verdadera democracia participativa.
La democracia nosotros la planteamos desde el momento en que ejercemos nuestros derechos políticos, votando en las elecciones, y es justo ahí donde se plasma la voluntad del pueblo. Pero esta voluntad no queda ahí, la democracia ya es dinámica e inclusiva.
Como miembros de la sociedad debemos participar activamente en la consolidación de nuestro Estado de derecho.
La democracia con resultados se manifestará en un mayor ejercicio y protección de los Derechos Humanos.
La moral y la legalidad, considero que no deben de permanecer aislados, como tampoco la democracia y los Derechos Humanos.
La soberanía es el máximo poder que tiene el Estado, y se logra por medio de la democracia.
La democracia no es sólo una cuestión de poder sino que es la participación de todos para obtener el desarrollo.
Por ello, es que tenemos como tarea diaria trabajar para estar en un constante mejoramiento en lo económico, político y social, es decir, trabajar por la democracia.
¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!
