En el año 2004 Javier Corral ganó la candidatura al Gobierno del Estado, postulado por la coalición conformada por el PAN, PRD y Convergencia “Todos Somos Chihuahua”, perdiendo frente a José Reyes Baeza la elección constitucional. En aquella elección triunfó Juan Blanco, también postulado por la misma coalición para el gobierno municipal de Chihuahua.
Desde el movimiento barzonista consideramos que podía ser la opción que necesitaba el estado para avanzar en políticas públicas a favor de la gente, de los más necesitados, de quienes sin voz clamaban justicia ante la avaricia de la clase económica, la voracidad de los banqueros y agiotistas y la indolencia de los gobernantes en la crisis económica que enfrentó nuestro país a mediados de la década de los 90 y pensamos que Javier Corral tenía todas las cualidades para hacerlo. Nos lanzarnos a las calles y convocamos a nuestros compañeros al apoyo a esa candidatura.
Años después se presentó de nuevo la oportunidad de una candidatura. Frentes como Unión Ciudadana, Movimiento Ciudadano, organizaciones sociales y sindicales se unieron al apoyo creando una bandera de proyectos y compromisos para quienes más sufren por problemas como el transporte urbano, la corrupción y la impunidad, el acceso a la educación, a la salud, a la adecuada alimentación sobre todo en el área rural.
Y a través del voto, se tuvo acceso al poder.
Se logró el gran cambio por el que luchamos, y vemos con tristeza cómo todo sigue igual. Los avances son mínimos y la frivolidad política permea las esferas gubernamentales. La “justicia para Chihuahua” sólo se asoma tímidamente en las cortinas del telón que cubre los actos del Poder Judicial.
Muchos de los que votamos por este proyecto vemos con tristeza cómo hemos sido aislados y marginados en la continuidad del proyecto planteado. Personajes como Jaime García Chávez, Javier Félix y muchos más son ahora críticos del gobierno, gente que apoyó como el padre Camilo Daniel también escribe su sentir.
La entrevista del pasado viernes en el programa Opinión Pública (www.noticiasaldia.com.mx) nos muestra un gobernador que no conocemos, y respetando profundamente a su persona, son muy criticables las acciones de su gobierno.
La esperanza es la última que muere. Ojalá y reconsidere y encamine los actos del gobierno hacia quienes más lo necesitan, ojalá se acerque a la gente, y deje la belicosidad de lado para dar paso al trabajo por una mejor sociedad. Por Chihuahua.
Correo: vicmedina@hotmail.com
