/ jueves 12 de agosto de 2021

La juventud y sus desafíos

Por: Aída María Holguín Baeza

En el marco del Día Internacional de la Juventud, resulta necesario reflexionar acerca de los desafíos a los que actualmente se enfrenta el sector juvenil.
Y es que, a diferencia de las juventudes de otras épocas, los jóvenes de ahora se enfrentan a una serie de situaciones y circunstancias que, además de acentuar los retos propios de la etapa de juventud o los desafíos históricos -ya de por sí complejos-, se constituyen en nuevos y mayores desafíos que, tarde o temprano, tendrán que afrontar.
En ese contexto, la ONU plantea que a medida que los jóvenes exigen más oportunidades y soluciones más justas, equitativas y progresivas en sus sociedades, es necesario abordar con urgencia los desafíos históricos a los que este sector poblacional se enfrenta. Por ejemplo, el acceso a la educación, la salud, el empleo, la exclusión política y la igualdad de género.
El meollo del asunto es que, como ya se dijo, los jóvenes de ahora no sólo se enfrentan a desafíos ya conocidos, sino también a otros nuevos y mayores que demandan atención inmediata y oportuna, como es el caso del tema del Día Internacional de la Juventud 2021: "Transformar los sistemas alimentarios”.
Con la temática de este año, las Naciones Unidas abordan de manera especial y específica uno de los desafíos más importantes, graves y decisivos a los que actualmente se enfrenta la juventud. De ahí que enfatice en la urgencia de innovación juvenil para la salud de los seres humanos y del planeta; particularmente, en lo referente a la transformación integral y sostenida de los sistemas alimentarios. Esto debido a que, de lo contrario, será muy difícil lograr la necesaria restauración del planeta y, por ende, garantizar el bienestar humano de las próximas generaciones.
Con todo eso -y muchas cosas más- resulta evidente que los jóvenes tienen muchos desafíos que enfrentar y, por lo tanto, muchas responsabilidades que asumir. Es quizá por eso que la ONU ubica a los jóvenes como sector esencial y estratégico al que están destinados los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y, a la vez, como "los portadores de la antorcha" de la Agenda 2030. Es decir, como beneficiarios directos de las acciones y políticas de dicha Agenda y de los ODS y, a la vez, como potenciales constructores de un mundo apropiado para sus generaciones y para las generaciones futuras.
El asunto es que, como bien lo señala la misma ONU, los jóvenes pueden ser una gran fuerza positiva para el desarrollo cuando se les brinda el conocimiento y las oportunidades necesarias para vencer los desafíos y prosperar. El gran problema es que son pocos los gobiernos que en verdad prestan la atención necesaria a sus juventudes.
En esta ocasión finalizo citando lo dicho alguna vez por el gran poeta, dramaturgo y periodista uruguayo, Mario Benedetti: “Si los responsables del mundo son todos venerablemente adultos, y el mundo está como está, ¿no será que debemos prestar más atención a los jóvenes?”.

laecita.wordpress.com
laecita@gmail.com

Por: Aída María Holguín Baeza

En el marco del Día Internacional de la Juventud, resulta necesario reflexionar acerca de los desafíos a los que actualmente se enfrenta el sector juvenil.
Y es que, a diferencia de las juventudes de otras épocas, los jóvenes de ahora se enfrentan a una serie de situaciones y circunstancias que, además de acentuar los retos propios de la etapa de juventud o los desafíos históricos -ya de por sí complejos-, se constituyen en nuevos y mayores desafíos que, tarde o temprano, tendrán que afrontar.
En ese contexto, la ONU plantea que a medida que los jóvenes exigen más oportunidades y soluciones más justas, equitativas y progresivas en sus sociedades, es necesario abordar con urgencia los desafíos históricos a los que este sector poblacional se enfrenta. Por ejemplo, el acceso a la educación, la salud, el empleo, la exclusión política y la igualdad de género.
El meollo del asunto es que, como ya se dijo, los jóvenes de ahora no sólo se enfrentan a desafíos ya conocidos, sino también a otros nuevos y mayores que demandan atención inmediata y oportuna, como es el caso del tema del Día Internacional de la Juventud 2021: "Transformar los sistemas alimentarios”.
Con la temática de este año, las Naciones Unidas abordan de manera especial y específica uno de los desafíos más importantes, graves y decisivos a los que actualmente se enfrenta la juventud. De ahí que enfatice en la urgencia de innovación juvenil para la salud de los seres humanos y del planeta; particularmente, en lo referente a la transformación integral y sostenida de los sistemas alimentarios. Esto debido a que, de lo contrario, será muy difícil lograr la necesaria restauración del planeta y, por ende, garantizar el bienestar humano de las próximas generaciones.
Con todo eso -y muchas cosas más- resulta evidente que los jóvenes tienen muchos desafíos que enfrentar y, por lo tanto, muchas responsabilidades que asumir. Es quizá por eso que la ONU ubica a los jóvenes como sector esencial y estratégico al que están destinados los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y, a la vez, como "los portadores de la antorcha" de la Agenda 2030. Es decir, como beneficiarios directos de las acciones y políticas de dicha Agenda y de los ODS y, a la vez, como potenciales constructores de un mundo apropiado para sus generaciones y para las generaciones futuras.
El asunto es que, como bien lo señala la misma ONU, los jóvenes pueden ser una gran fuerza positiva para el desarrollo cuando se les brinda el conocimiento y las oportunidades necesarias para vencer los desafíos y prosperar. El gran problema es que son pocos los gobiernos que en verdad prestan la atención necesaria a sus juventudes.
En esta ocasión finalizo citando lo dicho alguna vez por el gran poeta, dramaturgo y periodista uruguayo, Mario Benedetti: “Si los responsables del mundo son todos venerablemente adultos, y el mundo está como está, ¿no será que debemos prestar más atención a los jóvenes?”.

laecita.wordpress.com
laecita@gmail.com