Hace como mil años, la leyenda de Robin Hood nos dice que era el mejor arquero de Inglaterra y defensor de los pobres y oprimidos, peleaba contra el poder que utilizaba la fuerza pública para acaparar riquezas.
Robin Hood robaba a los ricos para ayudar a los pobres, muchas de las leyes de México, aún vigentes, fueron diseñadas por el sistema corrupto de capitalismo salvaje para beneficiar a una élite y perjudicar a la gran mayoría.
La ley del sistema de ahorro para el retiro y su reglamento del 2009 regula las Afore, es decir, administradoras de fondos para el retiro, existen diez: Azteca, Citibanamex, Coppel, Inbursa, Invercap, Pensionissste, Principal, Futuro, Sura y XXI Banorte.
Las diez Afore en total administran cuentas de 64 millones de trabajadores, con un capital total, agárrese, de: 5 billones de pesos, es decir 263 mil millones de dólares, ése es el ahorro de los 64 millones de trabajadores mexicanos, que “generosamente” administran los bancos, la mayoría extranjeros.
Para dimensionar el valor de esta cifra, comparémosla, Pemex es la empresa más importante de México y una de las empresas más importantes del mundo, por sus ingresos, por sus activos, por su potencial de generar riqueza.
Como resultado de una administración corrupta, que tenía por objeto quebrarla para malvenderla, regalarla a las trasnacionales, y anular con ello la patriótica expropiación petrolera de 1938 del Gral. Lázaro Cárdenas, la endeudaron masivamente, más de 100 mil millones de dólares es la deuda de Pemex.
El capital de las Afore es casi tres veces el valor de esta deuda.
El costo de la Refinería Dos Bocas, que es la inversión pública más importante del sexenio de AMLO, está programada en 8 mil millones de dólares, para producir 340 mil barriles diarios de gasolina. Con las Afore se podrían construir una refinería del tamaño de Dos Bocas en cada uno de los estados de la república, y crear 100 mil empleos directos en cada estado, 100 mil empleos temporales serán creados en la construcción de la Refinería Dos Bocas, por información de Andrés Manuel.
Serían 100 mil en cada estado, por 32 estados, igual a 3.2 millones de empleos.
El 23 de enero del presente año, en una nota del Sol de México, firmada por Rafael Ramírez, se informa que el Congreso de la Unión analiza una iniciativa de ley para reformar las leyes de las Afore, la reforma del Ejecutivo que fue enviada por el secretario de Gobernación Robledo plantea que las administradoras de fondos para el retiro (Afore) sean empleadas como fondos de inversión que beneficien a los trabajadores.
Como fondos de inversión ya son utilizadas por los bancos, que obtienen cuantiosas utilidades, la tarea pendiente es que realmente beneficien a los trabajadores.
¿Qué tal si se les consulta a los 64 millones de trabajadores mexicanos, por primera vez en 22 años, desde que fueron creadas las Afore en el año 1997?
Es seguro que la política de Robin Hood de las Afore y sus banqueros insaciables sería diferente y mejor, los más ricos dejarían de robar a los más pobres para financiarse, y los más pobres podrían financiar empresas en que participaran los más ricos, no para robarlos sino para beneficiarse mutuamente, en función del capital invertido, en proyectos como: el Aeropuerto de la Ciudad de México, el Tren del Istmo y el Tren Maya, entre otros, pero beneficiándose principalmente los 64 millones de trabajadores mexicanos, que muchos de ellos tienen apenas para mal vivir, y sobre todo a nuestra patria, no los 64 más ricos del mundo. Con decenas de miles de millones de dólares cada uno.
Que el congreso consulte a los trabajadores y tome en cuenta sus propuestas, es la esperanza en la 4T.
Fuente de datos: Comisión Nacional de Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
