La semana pasada y con respecto a la publicación de los datos económicos publicados por el Inegi, correspondientes al primer trimestre del año, leí una opinión que estipulaba: “Estamos en un momento en el que la forma en que recortemos y comparemos las cifras va a generar impresiones muy diferentes”. “Cada uno va a tener sus propios datos, ya no sólo el presidente de la República”.
En psicología cognitiva se establecen dos conceptos diferentes: la racionalización y el razonamiento. El primero parte de creencias preconcebidas y busca evidencias para justificarlas, y son equivocadas las que no coinciden con la propia. El razonamiento, por su lado, deja a un lado los prejuicios y busca honestamente en las evidencias, las conclusiones que se correspondan con ellas.
Trataré de presentar las cifras mencionadas de una manera razonada.
Inegi, PIB: Variación respecto a igual trimestre del año anterior, -2.9%, crecimiento negativo de -2,9%, que se suma al -0.01% de 2019 (antes de la pandemia) y el -8.5% de 2020.
Por otro lado, comparando el trimestre 2021 con el trimestre anterior, muestra un crecimiento de 0.4%. En el mismo período, Estados Unidos, nuestro primer socio comercial, creció un sorprendente 1.6%, cuatro veces más que nosotros.
Del primer trimestre de 2019 al cuarto trimestre de 2020 el PIB se ha reducido en 1 billón 29, 983 millones de pesos, una reducción de -5.54%.
Otras cifras razonadas son las siguientes: en lo que va del sexenio nuestra deuda externa se ha incrementado en 22 mil 332 millones de dólares (446,640 millones de pesos), 13 millones de nuevos pobres en el mismo período. De acuerdo con el IMSS, se han perdido 1 millón 58 mil empleos formales entre 2019 y 2020, y la inversión extranjera se redujo 12%. Como consecuencia, 625 mil connacionales han emigrado hacia los Estados Unidos, sólo en el año pasado.
Pero si dejamos la economía y entramos a otros sectores, no necesitamos modificar cifras para mostrar la ineptitud gubernamental. El pésimo manejo de la pandemia, con más de 350 mil muertes de acuerdo a las cifras oficiales, que fuentes no oficiales estiman es de 2 a 3 veces la cifra oficial. Gracias a esto poseemos el nada honorable 3er lugar mundial en el peor manejo de la pandemia, peleando el lugar con la India. A este respecto, hablemos de beisbol, la afición del presidente, de 2019 a 2021 el gasto público total en beisbol es de 1,723 millones de pesos. y en plena pandemia se destinaron 570 millones de pesos en 2 estadios.
Pero fuera de ser razonada o no, la realidad más preocupante es la de mayor incertidumbre relacionada con el deterioro del marco institucional y del Estado de derecho en México. Aun si esto logra superarse, se estima que la etapa de recuperación podría durar dos o tres años más, o incluso más de una década si se considera el PIB per cápita.
Y respondiendo a una nota racionalizada: Es imposible que a mediados del año se puedan recuperar los niveles de antes de la pandemia, como lo reiteró ayer el presidente López Obrador.
