/ jueves 31 de diciembre de 2020

La recuperación financiera de Tupperware

En diciembre de 2013 la acción de Tupperware (NYSE:TUP) se encontró en su máximo histórico de 93.24 dólares. En marzo de 2020, esta misma acción llegó a operarse en 1.25 dólares por acción. A partir de ahí, la acción se ha recuperado vertiginosamente superando su precio los 35 dólares. Según análisis de diversas instituciones, el precio de la acción se espera que supere los 45 dólares en el corto plazo.

Tupperware inició sus operaciones en 1948 en Massachusetts. Earl Sislas Tupper inventó la fórmula del plástico en 1938 y el sistema de sellado hermético en 1946. Inicialmente los productos se vendían en anaqueles, pero en los 50 el producto se popularizó mediante las ya conocidas “Fiestas Tupperware” o “demostraciones”, como se conocen en México. En los 60 inició su expansión y a la fecha está en más de 100 países.

Las ventas anuales de Tupperware han tenido una tendencia a la baja. En el año 2015 sus ventas fueron de 2,283.8 millones de dólares y en el 2019 se redujeron a 1,797.9 millones de dólares, un 21% menos. En donde el impacto fue realmente fuerte fue en las utilidades por acción, éstas se redujeron de 3.69 a 0.25 dólares, un 93% menos. Las utilidades reportadas han tenido una sorprendente recuperación derivadas del aumento de ventas y reducción del gasto.

Varios factores aportaron a la caída libre de la eficiencia de esta empresa. En primer lugar, el modelo de ventas en base a las demostraciones fue perdiendo fuerza por el cambio de dinamismo social, donde la gente ya no está dispuesta a perder toda una tarde en una reunión; la creciente oferta de productos vía internet con opciones como Amazon, que ofrecen más opciones y una experiencia de compra más rápida. La puntilla en la caída del precio de las acciones se debió a un problema derivado de una filial, Fuller Mexico Beauty Business, que forzó a un ajuste en sus utilidades y al inicio de una auditoría a sus libros contables. También contribuyó a la caída de la empresa una racha de CEO poco efectivos, hasta la llegada de Miguel Fernández en marzo de 2020, el tercer CEO en cuatro meses.

El resurgimiento de la empresa se debe primordialmente a dos factores: El nuevo liderazgo del recientemente llegado CEO, quien viene con una amplia trayectoria después de haber sido el presidente global de Avon y vicepresidente ejecutivo en Herbalife. Sus estrategias se han enfocado en reforzar el modelo de negocio actual, intensificar las ventas en anaqueles y explotar las ventas por internet. Por otro lado, las restricciones que han tenido los restaurantes debido a la pandemia han fomentado que se incremente la elaboración de comida en casa y por ende la necesidad de administrar el resguardo de las sobras, generando la necesidad de contenedores de calidad.

La historia de Tupperware demuestra cómo las empresas deben renovar sus liderazgos y adaptarse al cambio. Es una muy buena noticia para miles de vendedores independientes, Godínez y fieles usuarios de tan útil producto que la empresa decidiera renovar su liderazgo, salirse del pasado, adaptarse al presente y prepararse para el futuro.


En diciembre de 2013 la acción de Tupperware (NYSE:TUP) se encontró en su máximo histórico de 93.24 dólares. En marzo de 2020, esta misma acción llegó a operarse en 1.25 dólares por acción. A partir de ahí, la acción se ha recuperado vertiginosamente superando su precio los 35 dólares. Según análisis de diversas instituciones, el precio de la acción se espera que supere los 45 dólares en el corto plazo.

Tupperware inició sus operaciones en 1948 en Massachusetts. Earl Sislas Tupper inventó la fórmula del plástico en 1938 y el sistema de sellado hermético en 1946. Inicialmente los productos se vendían en anaqueles, pero en los 50 el producto se popularizó mediante las ya conocidas “Fiestas Tupperware” o “demostraciones”, como se conocen en México. En los 60 inició su expansión y a la fecha está en más de 100 países.

Las ventas anuales de Tupperware han tenido una tendencia a la baja. En el año 2015 sus ventas fueron de 2,283.8 millones de dólares y en el 2019 se redujeron a 1,797.9 millones de dólares, un 21% menos. En donde el impacto fue realmente fuerte fue en las utilidades por acción, éstas se redujeron de 3.69 a 0.25 dólares, un 93% menos. Las utilidades reportadas han tenido una sorprendente recuperación derivadas del aumento de ventas y reducción del gasto.

Varios factores aportaron a la caída libre de la eficiencia de esta empresa. En primer lugar, el modelo de ventas en base a las demostraciones fue perdiendo fuerza por el cambio de dinamismo social, donde la gente ya no está dispuesta a perder toda una tarde en una reunión; la creciente oferta de productos vía internet con opciones como Amazon, que ofrecen más opciones y una experiencia de compra más rápida. La puntilla en la caída del precio de las acciones se debió a un problema derivado de una filial, Fuller Mexico Beauty Business, que forzó a un ajuste en sus utilidades y al inicio de una auditoría a sus libros contables. También contribuyó a la caída de la empresa una racha de CEO poco efectivos, hasta la llegada de Miguel Fernández en marzo de 2020, el tercer CEO en cuatro meses.

El resurgimiento de la empresa se debe primordialmente a dos factores: El nuevo liderazgo del recientemente llegado CEO, quien viene con una amplia trayectoria después de haber sido el presidente global de Avon y vicepresidente ejecutivo en Herbalife. Sus estrategias se han enfocado en reforzar el modelo de negocio actual, intensificar las ventas en anaqueles y explotar las ventas por internet. Por otro lado, las restricciones que han tenido los restaurantes debido a la pandemia han fomentado que se incremente la elaboración de comida en casa y por ende la necesidad de administrar el resguardo de las sobras, generando la necesidad de contenedores de calidad.

La historia de Tupperware demuestra cómo las empresas deben renovar sus liderazgos y adaptarse al cambio. Es una muy buena noticia para miles de vendedores independientes, Godínez y fieles usuarios de tan útil producto que la empresa decidiera renovar su liderazgo, salirse del pasado, adaptarse al presente y prepararse para el futuro.