/ miércoles 20 de octubre de 2021

La Reforma Eléctrica (2da de 2 partes)

La semana pasada se expuso cómo el Ejecutivo federal envió a la Cámara de Diputados una iniciativa con proyecto de Decreto para modificar los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que no es “Reforma”, ni sólo “Eléctrica”, porque va en contra de la verdadera “Reforma Energética” de la década pasada.

Se pretende crear un nuevo sistema eléctrico mexicano y modifica la política energética, se busca que el Estado monopolice la conducción del Sistema Eléctrico Nacional, a través de la CFE, que se convertirá en organismo descentralizado del Estado, no empresa productiva.

Nuestra posición de Acción Nacional es votar en contra, por ser un retroceso económico, sobre todo porque; afecta a las familias mexicanas y la apertura a los mercados internacionales, que tanto esfuerzo nos ha costado en los últimos 20 años, así como por las pérdidas por las demandas inminentes y quizá la mayor razón es no volver a la generación de energía contaminante con el deterioro del medio ambiente y de la salud de todos los mexicanos.

Es en estos momentos donde el tiempo nos da la razón a quienes defendimos la Alianza “Va por México”, y no a aquellos que dijeron que no se ganó nada, que era una alianza electorera. Hoy queda demostrado que el haber frenado a Morena y sus partiditos comparsa el 2021, evitó que tuvieran la mayoría calificada, o sea las 2/3 partes en la Cámara Baja, teniendo sólo la mayoría simple, 50% más 1; esto evita que puedan pasar las reformas constitucionales, como es la que estamos tratando, sin tener que recurrir a la negociación con la oposición.

Y aquí viene la manzana envenenada de esta propuesta, AMLO quiere destruir la Alianza que amenaza con quitarles el poder en el 2024 si seguimos juntos, evidenciando al PRI sobre todo, al presionar a los diputados de esa bancada con aplicarles el peso del poder para obligarlos a votar a favor.

En este momento el presidente tiene 277 votos a favor, de Morena, el casi desaparecido palero del PT y paradójicamente el Verde, el único partido del mundo que teniendo un origen ecologista va a favor de la contaminación, el calentamiento global y el cambio climático. En el bloque opositor hay 222 votos, de los cuales el Ejecutivo tiene que rescatar por lo menos 56. De los cuales vamos en contra de la reforma PAN 114, PRD 14 y MC 23, por lo que le quedan únicamente los 71 del PRI, con 16 que no cedan, no pasa.

Entonces el presidente va a victimizarse y decir que somos traidores a la patria. Hoy más que nunca la ciudadanía, el llamado 5º poder debe presionar para que en la Cámara de Diputados, se imponga la cordura, los consensos, la búsqueda del bien común y el progreso de México; no la imposición de un solo hombre que quiere pasar a la historia como un transformador, pero lo que en realidad es un autócrata que no entiende de democracia y de división de poderes, que es la base de la misma.


La semana pasada se expuso cómo el Ejecutivo federal envió a la Cámara de Diputados una iniciativa con proyecto de Decreto para modificar los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que no es “Reforma”, ni sólo “Eléctrica”, porque va en contra de la verdadera “Reforma Energética” de la década pasada.

Se pretende crear un nuevo sistema eléctrico mexicano y modifica la política energética, se busca que el Estado monopolice la conducción del Sistema Eléctrico Nacional, a través de la CFE, que se convertirá en organismo descentralizado del Estado, no empresa productiva.

Nuestra posición de Acción Nacional es votar en contra, por ser un retroceso económico, sobre todo porque; afecta a las familias mexicanas y la apertura a los mercados internacionales, que tanto esfuerzo nos ha costado en los últimos 20 años, así como por las pérdidas por las demandas inminentes y quizá la mayor razón es no volver a la generación de energía contaminante con el deterioro del medio ambiente y de la salud de todos los mexicanos.

Es en estos momentos donde el tiempo nos da la razón a quienes defendimos la Alianza “Va por México”, y no a aquellos que dijeron que no se ganó nada, que era una alianza electorera. Hoy queda demostrado que el haber frenado a Morena y sus partiditos comparsa el 2021, evitó que tuvieran la mayoría calificada, o sea las 2/3 partes en la Cámara Baja, teniendo sólo la mayoría simple, 50% más 1; esto evita que puedan pasar las reformas constitucionales, como es la que estamos tratando, sin tener que recurrir a la negociación con la oposición.

Y aquí viene la manzana envenenada de esta propuesta, AMLO quiere destruir la Alianza que amenaza con quitarles el poder en el 2024 si seguimos juntos, evidenciando al PRI sobre todo, al presionar a los diputados de esa bancada con aplicarles el peso del poder para obligarlos a votar a favor.

En este momento el presidente tiene 277 votos a favor, de Morena, el casi desaparecido palero del PT y paradójicamente el Verde, el único partido del mundo que teniendo un origen ecologista va a favor de la contaminación, el calentamiento global y el cambio climático. En el bloque opositor hay 222 votos, de los cuales el Ejecutivo tiene que rescatar por lo menos 56. De los cuales vamos en contra de la reforma PAN 114, PRD 14 y MC 23, por lo que le quedan únicamente los 71 del PRI, con 16 que no cedan, no pasa.

Entonces el presidente va a victimizarse y decir que somos traidores a la patria. Hoy más que nunca la ciudadanía, el llamado 5º poder debe presionar para que en la Cámara de Diputados, se imponga la cordura, los consensos, la búsqueda del bien común y el progreso de México; no la imposición de un solo hombre que quiere pasar a la historia como un transformador, pero lo que en realidad es un autócrata que no entiende de democracia y de división de poderes, que es la base de la misma.