Una sociedad más justa e igualitaria se logra mediante el respeto de los derechos humanos.
Las niñas, niños y adolescentes forman parte de nuestra sociedad, son seres humanos en desarrollo y tienen que ser protegidos por el Estado, al cual se le establecen obligaciones en su actuar que consisten por un lado en que la legislación nacional se armonice con los instrumentos internacionales de derechos humanos en que el Estado Mexicano sea parte.
Los antecedentes en materia de los derechos de la niñez y la adolescencia se encuentran en diversos instrumentos internacionales. La declaración de Ginebra de 1924 por primera ocasión estableció la protección a los derechos de la niñez, la cual se reconoció posteriormente en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La Asamblea General de las Naciones Unidas en su Resolución 44/25 aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño, que se abrió a la firma en Nueva York el 26 de enero de 1990 y entró en vigor el 2 de septiembre de dicho año. Dicha Convención constituye el referente para el reconocimiento de las niñas, los niños y los adolescentes como sujetos de derechos con capacidad para defenderlos y exigirlos.
En nuestro país el Artículo 4º Constitucional establece las bases para el derecho de la niñez mexicana y en ello se establecen como requisitos preestablecidos las necesidades de su alimentación, salud, educación y sano esparcimiento.
Pero para el ejercicio y defensa de estos derechos es importante su promoción, difusión y conocimiento, ya que así los menores podrán identificar cuando éstos han sido violados.
Las niñas, niños y adolescentes víctimas de cualquier tipo de violencia en su contra deben tener conciencia de su derecho a que se les proteja del daño y saber a dónde pueden acudir para obtener ayuda en caso necesario.
Facilitar el acceso a la justicia a los menores, ya sea ésta judicial o administrativa, tiene que ser simplificada, gratuita, rápida y expedita, ya que en México sólo 1.5% de los casos denunciados de abuso infantil llega a juicio.
Actualmente en nuestro país se encuentra vigente la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, gracias a esta Ley por primera vez el país cuenta con un sistema nacional de protección integral de niñas, niños y adolescentes, el cual coordina de manera efectiva las instancias y mecanismos de los tres órdenes de Gobierno, orientados a promover, proteger y garantizar sus derechos.
En la actualidad, dada la violencia feminicida, tenemos a muchos menores que son víctimas de ella porque sus madres la han sufrido. La tarea no es sencilla, tiene que haber coordinación en todos los niveles públicos y privados para proteger la vida de las niñas, niños y adolescentes, ya que ellos son el futuro de nuestra sociedad y tienen que ser los factores de cambio.
¡Me siento orgullosa de ser hija de estashermosas tierras norteñas!
