/ viernes 8 de abril de 2022

Libertad de expresión bajo agresión

“Hoy el ejercicio de la libertad de expresión no tiene mejores condiciones que antes del 2018” Artículo 19. Informe Anual 2021

Hay que partir de una afirmación que no debemos descuidar en cuanto a la prensa y el ejercicio libre de informar: el derecho a la información no es tanto de los periodistas como de los ciudadanos. Atentar contra ese derecho es mucho más que atentar contra los periodistas.

Cuando se habla de agresiones a la libertad de expresión no se habla sólo de los reporteros o de los medios de comunicación en cuanto víctimas, sino que es la sociedad en general la que recibe el daño cuando se le priva de la transparencia y la veracidad informativas.

Artículo 19, la organización civil que defiende los derechos de propios de la actividad periodística, insiste que el programa de difusión oficial en México conocido como “la Mañanera” ha publicado falsedades (40 por ciento de los dichos verificables no son verdaderos) y de ellas “se sigue la clausura de los mecanismos de acceso a la información”.

Así se expone en el Informe Anual 2021 de dicha asociación, la cual manifiesta también que con dichas conferencias del Ejecutivo federal también se ha puesto en riesgo la seguridad de quienes ejercen la profesión de comunicar e informar.

El mencionado informe, llamado “Negación”, señala que durante el 2021 se documentaron en México 644 ataques contra la prensa. También se contaron siete asesinatos de periodistas. En redes sociales, Artículo 119 habla de una “realidad adversa para la libertad de expresión en México”.

Para Artículo 19, asociación que opera en México desde hace 15 años, la “narrativa descalificadora” contra la prensa desde “la Mañanera” ha sido imitada en los diferentes niveles de gobierno, con lo cual la misión de prevención y combate a la violencia pierde fuerza.

Efectivamente, se ha registrado un incremento en las agresiones a la prensa por parte de funcionarios públicos de distintos niveles de gobierno, como si siguieran el ejemplo de lo que se observa en el nivel superior de gobierno. Como si el mismo ejemplo los amparase en su acción.

El informe de Artículo 19 manifiesta que “los primeros tres años de López Obrador representan casi un 85% más de ataques contra la prensa que los primeros tres años del anterior mandatario, marcando el periodo más violento contra la prensa del que se tenga registro”.

Negar los hechos, según dicha organización tiene consecuencias sobre el ejercicio del derecho a la información, y subraya que “recordar o denunciar esos hechos que inhiben el ejercicio de la libertad de expresión de las mayorías es considerado un “ataque” a los funcionarios públicos”.

Una mínima conciencia cívica nos dice que atacar a la prensa es atacar al derecho a la información, el cual debe orientar la relación de los gobernantes con los gobernados. La información pública es un bien social, un elemento imprescindible en la vida democrática.


“Hoy el ejercicio de la libertad de expresión no tiene mejores condiciones que antes del 2018” Artículo 19. Informe Anual 2021

Hay que partir de una afirmación que no debemos descuidar en cuanto a la prensa y el ejercicio libre de informar: el derecho a la información no es tanto de los periodistas como de los ciudadanos. Atentar contra ese derecho es mucho más que atentar contra los periodistas.

Cuando se habla de agresiones a la libertad de expresión no se habla sólo de los reporteros o de los medios de comunicación en cuanto víctimas, sino que es la sociedad en general la que recibe el daño cuando se le priva de la transparencia y la veracidad informativas.

Artículo 19, la organización civil que defiende los derechos de propios de la actividad periodística, insiste que el programa de difusión oficial en México conocido como “la Mañanera” ha publicado falsedades (40 por ciento de los dichos verificables no son verdaderos) y de ellas “se sigue la clausura de los mecanismos de acceso a la información”.

Así se expone en el Informe Anual 2021 de dicha asociación, la cual manifiesta también que con dichas conferencias del Ejecutivo federal también se ha puesto en riesgo la seguridad de quienes ejercen la profesión de comunicar e informar.

El mencionado informe, llamado “Negación”, señala que durante el 2021 se documentaron en México 644 ataques contra la prensa. También se contaron siete asesinatos de periodistas. En redes sociales, Artículo 119 habla de una “realidad adversa para la libertad de expresión en México”.

Para Artículo 19, asociación que opera en México desde hace 15 años, la “narrativa descalificadora” contra la prensa desde “la Mañanera” ha sido imitada en los diferentes niveles de gobierno, con lo cual la misión de prevención y combate a la violencia pierde fuerza.

Efectivamente, se ha registrado un incremento en las agresiones a la prensa por parte de funcionarios públicos de distintos niveles de gobierno, como si siguieran el ejemplo de lo que se observa en el nivel superior de gobierno. Como si el mismo ejemplo los amparase en su acción.

El informe de Artículo 19 manifiesta que “los primeros tres años de López Obrador representan casi un 85% más de ataques contra la prensa que los primeros tres años del anterior mandatario, marcando el periodo más violento contra la prensa del que se tenga registro”.

Negar los hechos, según dicha organización tiene consecuencias sobre el ejercicio del derecho a la información, y subraya que “recordar o denunciar esos hechos que inhiben el ejercicio de la libertad de expresión de las mayorías es considerado un “ataque” a los funcionarios públicos”.

Una mínima conciencia cívica nos dice que atacar a la prensa es atacar al derecho a la información, el cual debe orientar la relación de los gobernantes con los gobernados. La información pública es un bien social, un elemento imprescindible en la vida democrática.