/ domingo 5 de julio de 2020

Los “demócratas” de ayer y los autoritarios de hoy

El papel que desempeñan los diferentes medios de comunicación en nuestra sociedad es fundamental, como seguramente lo es en otros contextos, pero en el nuestro es esencial para el desarrollo de la vida democrática para que los ciudadanos se enteren del quehacer público, no únicamente como queremos difundirlo los que de una u otra manera participamos en el quehacer público, sino cómo lo visualizan los propios medios de comunicación, tal como ellos interpretan la realidad.

La sociedad chihuahuense de ahora no es aquélla que se conforma con la sola recepción de los hechos de interés público, sino que participa del análisis y reflexión sobre los mismos sucesos que generan noticia. Ha ido evolucionando favorablemente conforme los medios de comunicación son más asequibles a todos los ciudadanos; por supuesto, la internet y las bondades informativas de las redes sociales (a pesar de los fake news, los bots y los vicios propios de las redes), son un aliciente para que los ciudadanos estén más y mejor informados.

En lo personal siempre he sido respetuoso de la acción social intrínseca de los medios, de sus aportaciones y de toda la labor que implica mantener informado al pueblo, mis diferencias con algunos representantes de dichos medios se han dirimido en la apertura del debate y de la aclaración de la nota o reportaje. Y valoro por mucho el espacio que se ofrece a este servidor, aspirante a editorialista en éste y otros apreciables medios de comunicación.

Reconozco que también hay fallas, pero también puedo decir que son los menos los que incurren en ellas. Muchos errores de los medios se originan precisamente por el ajetreo diario del manejo informativo, y entiendo que cuando no se puede manejar cierta información, ya sea proveniente de un comunicado o de una conferencia de prensa, se resuelve luego; pero cuando esa circunstancia se convierte en hábito, producto del consentimiento mas no de la distracción, entonces creo que hay dolo.
Digo lo anterior específicamente por el caso del Canal 28, con sede en la capital, que tan sólo en este año de 18 comunicados que ha emitido nuestra oficina de prensa ninguno ha sido publicado por ese medio de televisión. Hace unos días apenas que se dignaron publicar la información que difundimos en una rueda de prensa, que citamos en el Centro de la ciudad para dar a conocer lo relacionado al gasto del gobernador, Javier Corral, en sus vuelos aéreos, y la denuncia que presentaremos al respecto ante la Auditoría Superior del estado.

Para hacer este señalamiento por la falta de profesionalismo de quienes dirigen ese medio, no me baso solamente en las publicaciones que se han hecho en lo que va del quinquenio, que hablan del favoritismo del gobierno estatal para con ellos, y para muestra dichas publicaciones señalan los contratos de publicidad que colocan a este medio como uno de los más queridos por el gobernador Javier Corral. En el archivo de notas de diversos medios se encuentran también las indicaciones de Comunicación Social del gobierno estatal para que los empleados de la administración den seguimiento a publicaciones del Canal 28, hagan comentarios y compartan en sus redes sociales personales.

No es difícil suponer que la falta de atención a las actividades de un servidor, como senador de la República, obedecen a dicha cercanía entre el medio y gobernante, pero independientemente del escozor y prurito intenso que producen nuestras críticas al mandatario, independientemente de la inquina que nos tiene, el Canal 28 debiera ocupar su lugar como medio independiente, ser imparcial entre los actores políticos, de lo contrario que asuma la difusión de la administración estatal, pero ya no bajo la apariencia de un medio objetivo, sino por medio de un contrato formal, bajo las reglas de la comunicación social oficial, enteramente al servicio del gobierno estatal.
Comentarios y sugerencias favor de enviarlos al correo: cpc16169@gmail.com

El papel que desempeñan los diferentes medios de comunicación en nuestra sociedad es fundamental, como seguramente lo es en otros contextos, pero en el nuestro es esencial para el desarrollo de la vida democrática para que los ciudadanos se enteren del quehacer público, no únicamente como queremos difundirlo los que de una u otra manera participamos en el quehacer público, sino cómo lo visualizan los propios medios de comunicación, tal como ellos interpretan la realidad.

La sociedad chihuahuense de ahora no es aquélla que se conforma con la sola recepción de los hechos de interés público, sino que participa del análisis y reflexión sobre los mismos sucesos que generan noticia. Ha ido evolucionando favorablemente conforme los medios de comunicación son más asequibles a todos los ciudadanos; por supuesto, la internet y las bondades informativas de las redes sociales (a pesar de los fake news, los bots y los vicios propios de las redes), son un aliciente para que los ciudadanos estén más y mejor informados.

En lo personal siempre he sido respetuoso de la acción social intrínseca de los medios, de sus aportaciones y de toda la labor que implica mantener informado al pueblo, mis diferencias con algunos representantes de dichos medios se han dirimido en la apertura del debate y de la aclaración de la nota o reportaje. Y valoro por mucho el espacio que se ofrece a este servidor, aspirante a editorialista en éste y otros apreciables medios de comunicación.

Reconozco que también hay fallas, pero también puedo decir que son los menos los que incurren en ellas. Muchos errores de los medios se originan precisamente por el ajetreo diario del manejo informativo, y entiendo que cuando no se puede manejar cierta información, ya sea proveniente de un comunicado o de una conferencia de prensa, se resuelve luego; pero cuando esa circunstancia se convierte en hábito, producto del consentimiento mas no de la distracción, entonces creo que hay dolo.
Digo lo anterior específicamente por el caso del Canal 28, con sede en la capital, que tan sólo en este año de 18 comunicados que ha emitido nuestra oficina de prensa ninguno ha sido publicado por ese medio de televisión. Hace unos días apenas que se dignaron publicar la información que difundimos en una rueda de prensa, que citamos en el Centro de la ciudad para dar a conocer lo relacionado al gasto del gobernador, Javier Corral, en sus vuelos aéreos, y la denuncia que presentaremos al respecto ante la Auditoría Superior del estado.

Para hacer este señalamiento por la falta de profesionalismo de quienes dirigen ese medio, no me baso solamente en las publicaciones que se han hecho en lo que va del quinquenio, que hablan del favoritismo del gobierno estatal para con ellos, y para muestra dichas publicaciones señalan los contratos de publicidad que colocan a este medio como uno de los más queridos por el gobernador Javier Corral. En el archivo de notas de diversos medios se encuentran también las indicaciones de Comunicación Social del gobierno estatal para que los empleados de la administración den seguimiento a publicaciones del Canal 28, hagan comentarios y compartan en sus redes sociales personales.

No es difícil suponer que la falta de atención a las actividades de un servidor, como senador de la República, obedecen a dicha cercanía entre el medio y gobernante, pero independientemente del escozor y prurito intenso que producen nuestras críticas al mandatario, independientemente de la inquina que nos tiene, el Canal 28 debiera ocupar su lugar como medio independiente, ser imparcial entre los actores políticos, de lo contrario que asuma la difusión de la administración estatal, pero ya no bajo la apariencia de un medio objetivo, sino por medio de un contrato formal, bajo las reglas de la comunicación social oficial, enteramente al servicio del gobierno estatal.
Comentarios y sugerencias favor de enviarlos al correo: cpc16169@gmail.com