/ viernes 18 de enero de 2019

Los desabastos desastrosos

Me parece que es sólo el primer desabasto, el de la gasolina. Vendrán muchos otros detrás. Los populistas es lo que saben hacer, que falten las cosas elementales para la vida. Maduro vino a la toma de posesión para darle los detalles de qué hacer para generar desabastos. En esta misma semana Maduro levantó cuatro veces el salario mínimo de Venezuela. Los populistas creen que dando más a los necesitados, con eso la nación va a tener más riqueza. No se necesita dar, sino producir fuentes de trabajo. Pero la culpa no es del populista, es de los que votaron por él. Los desabastos los están haciendo los que lo elevaron a la presidencia por el voto.

La decisión es muy simplista. Se están robando la gasolina, vamos a esconder el combustible, para que no se lo roben. No vamos a exponer a los policías, mejor no exponer a la gente. Si el argumento se aplica a todo, llegaremos a la decisión de permitir el robo, de todo y en todo.

También la electricidad es nuestra, también otro populista aplicó la nacionalización a la luz, con el argumento de que si es nuestra nadie se la va a robar. En la práctica hemos visto que más fácilmente se roban lo que no es de nadie, lo que es del gobierno. La gente se ha colgado de los alambres de la luz y se están robando la corriente. Es un mal común, se da en todas las ciudades, en todas las colonias precarias. Si se aplica el mismo argumento se creará un desabasto de electricidad. Un buen día se cortará el servicio de luz a todo el país, para que no se lo roben. ¿Y qué haremos sin luz?

El agua también está nacionalizada. También se la roban en muchos domicilios. Se roban el agua no sólo los precarios, sino que también muchos ricos se roban el agua, se la han robado siempre, y lo seguirán haciendo. Aplicando el argumento simplista de que para que no se la roben vamos a esconderla, se generará el desabasto del agua.

No se generarán desabastos sólo de las empresas del gobierno, también sucederá en los bienes de los particulares. Todos los días hay robos en los supermercados. Supe de un ladrón de la carnicería del Súper. Se pegaba al cuerpo los cortes de carne. Salía más gordito, pero la llevaba su buena carga de carne. También vamos a cerrar todos los súperes. Habrá desabasto en todos los súperes.

Lo mismo sucedería en las tiendas de departamentos. También ahí suceden muchos robos. No se necesita mucha inteligencia para crear desabastos. Para eso son muy inteligentes los populistas.

Me parece que es sólo el primer desabasto, el de la gasolina. Vendrán muchos otros detrás. Los populistas es lo que saben hacer, que falten las cosas elementales para la vida. Maduro vino a la toma de posesión para darle los detalles de qué hacer para generar desabastos. En esta misma semana Maduro levantó cuatro veces el salario mínimo de Venezuela. Los populistas creen que dando más a los necesitados, con eso la nación va a tener más riqueza. No se necesita dar, sino producir fuentes de trabajo. Pero la culpa no es del populista, es de los que votaron por él. Los desabastos los están haciendo los que lo elevaron a la presidencia por el voto.

La decisión es muy simplista. Se están robando la gasolina, vamos a esconder el combustible, para que no se lo roben. No vamos a exponer a los policías, mejor no exponer a la gente. Si el argumento se aplica a todo, llegaremos a la decisión de permitir el robo, de todo y en todo.

También la electricidad es nuestra, también otro populista aplicó la nacionalización a la luz, con el argumento de que si es nuestra nadie se la va a robar. En la práctica hemos visto que más fácilmente se roban lo que no es de nadie, lo que es del gobierno. La gente se ha colgado de los alambres de la luz y se están robando la corriente. Es un mal común, se da en todas las ciudades, en todas las colonias precarias. Si se aplica el mismo argumento se creará un desabasto de electricidad. Un buen día se cortará el servicio de luz a todo el país, para que no se lo roben. ¿Y qué haremos sin luz?

El agua también está nacionalizada. También se la roban en muchos domicilios. Se roban el agua no sólo los precarios, sino que también muchos ricos se roban el agua, se la han robado siempre, y lo seguirán haciendo. Aplicando el argumento simplista de que para que no se la roben vamos a esconderla, se generará el desabasto del agua.

No se generarán desabastos sólo de las empresas del gobierno, también sucederá en los bienes de los particulares. Todos los días hay robos en los supermercados. Supe de un ladrón de la carnicería del Súper. Se pegaba al cuerpo los cortes de carne. Salía más gordito, pero la llevaba su buena carga de carne. También vamos a cerrar todos los súperes. Habrá desabasto en todos los súperes.

Lo mismo sucedería en las tiendas de departamentos. También ahí suceden muchos robos. No se necesita mucha inteligencia para crear desabastos. Para eso son muy inteligentes los populistas.