/ miércoles 18 de abril de 2018

Los niños en conflictos armados

Se entiende por niño soldado tanto niños como niñas menores de 18 años vinculados con una fuerza armada o un grupo armado que haya sido reclutado o utilizados como combatientes, cocineros, cargadores, espías o para fines sexuales”

A pesar de que la participación de los niños y niñas en conflictos armados no es en absoluto un fenómeno nuevo, sí hemos observado en los últimos años una gravedad creciente de los niños soldados.

Se calcula que al menos 300,000 niñas y niños menores de dieciocho años toman parte en los conflictos armados alrededor del mundo. Aunque la mayoría de los niños soldados está entre los quince y dieciocho años una parte del reclutamiento comienza a los diez años.

El artículo 77.2 del Protocolo I del 8 de junio de 1977 Adicional a las Convenciones de Ginebra, Relativo a la Protección de Víctimas de los Conflictos Armados Internacionales, establece que:

“Las partes en conflicto tomarán todas las medidas para que los niños en conflicto menores de quince años no participen directamente en hostilidades especialmente absteniéndose de reclutarlos para sus fuerzas armadas”.

En conflictos alrededor del mundo los niños se han convertido en objeto de ataques, son usados como escudos humanos, asesinados, esclavizados y reclutados para luchar. En el año 2017, el número de niños que han padecido estos graves abusos ha crecido, así lo advierte el Fondo para la Infancia UNICEF y los actores de los conflictos no respetan las leyes internacionales que fueron diseñados para proteger a los vulnerables.

Los niños que participan tienen graves consecuencias psíquicas como físicas. Los daños físicos son deformaciones en la espalda por las pesadas cargas que tienen que acarrear, desnutrición, infecciones respiratorias y cutáneas, enfermedades de trasmisión sexual incluyendo el sida, problemas visuales, auditivos, las drogas y el alcohol.

La manipulación psicológica se da porque se requiere tener soldados obedientes y feroces.

La mayor parte de los menores que forman parte de los conflictos armados son varones, se calcula que un tercio de los menores en guerra son niñas. Las cuales son discriminadas por ser mujeres y menores.

Las violaciones sexuales, el matrimonio forzado, el secuestro o la esclavización se han convertido en parte de los conflictos en Irak, Siria, Yemen, Nigeria, Sudán del Sur y Myanmar.

Yemen es el país más pobre de Oriente Próximo, el cual ya dependía en gran medida de la ayuda humanitaria antes de que el conflicto se intensificara en el año 2015. Yemen ha sufrido durante décadas la falta de desarrollo, el declive económico, conflictos intermitentes, olas de violencia y un Estado de derecho frágil.

Según un nuevo informe de UNICEF sobre la situación de los niños en Yemen, las vidas de los menores están sumidas en violencia, el desplazamiento, las enfermedades, la pobreza y la falta de acceso a necesidades básicas, como comida, agua potable, medicamentos, educación y seguridad.

Los niños no son solamente las principales víctimas de estos conflictos armados, sino que se trasforman deliberadamente en blancos y son forzados a tomar parte en estos conflictos.

Carol Bellamy

Directora ejecutiva de UNICEF

¡La guerra constituye la más brutal violación de los Derechos Humanos de las niñas y niños!

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!


heidy_universidad@hotmail.com

Se entiende por niño soldado tanto niños como niñas menores de 18 años vinculados con una fuerza armada o un grupo armado que haya sido reclutado o utilizados como combatientes, cocineros, cargadores, espías o para fines sexuales”

A pesar de que la participación de los niños y niñas en conflictos armados no es en absoluto un fenómeno nuevo, sí hemos observado en los últimos años una gravedad creciente de los niños soldados.

Se calcula que al menos 300,000 niñas y niños menores de dieciocho años toman parte en los conflictos armados alrededor del mundo. Aunque la mayoría de los niños soldados está entre los quince y dieciocho años una parte del reclutamiento comienza a los diez años.

El artículo 77.2 del Protocolo I del 8 de junio de 1977 Adicional a las Convenciones de Ginebra, Relativo a la Protección de Víctimas de los Conflictos Armados Internacionales, establece que:

“Las partes en conflicto tomarán todas las medidas para que los niños en conflicto menores de quince años no participen directamente en hostilidades especialmente absteniéndose de reclutarlos para sus fuerzas armadas”.

En conflictos alrededor del mundo los niños se han convertido en objeto de ataques, son usados como escudos humanos, asesinados, esclavizados y reclutados para luchar. En el año 2017, el número de niños que han padecido estos graves abusos ha crecido, así lo advierte el Fondo para la Infancia UNICEF y los actores de los conflictos no respetan las leyes internacionales que fueron diseñados para proteger a los vulnerables.

Los niños que participan tienen graves consecuencias psíquicas como físicas. Los daños físicos son deformaciones en la espalda por las pesadas cargas que tienen que acarrear, desnutrición, infecciones respiratorias y cutáneas, enfermedades de trasmisión sexual incluyendo el sida, problemas visuales, auditivos, las drogas y el alcohol.

La manipulación psicológica se da porque se requiere tener soldados obedientes y feroces.

La mayor parte de los menores que forman parte de los conflictos armados son varones, se calcula que un tercio de los menores en guerra son niñas. Las cuales son discriminadas por ser mujeres y menores.

Las violaciones sexuales, el matrimonio forzado, el secuestro o la esclavización se han convertido en parte de los conflictos en Irak, Siria, Yemen, Nigeria, Sudán del Sur y Myanmar.

Yemen es el país más pobre de Oriente Próximo, el cual ya dependía en gran medida de la ayuda humanitaria antes de que el conflicto se intensificara en el año 2015. Yemen ha sufrido durante décadas la falta de desarrollo, el declive económico, conflictos intermitentes, olas de violencia y un Estado de derecho frágil.

Según un nuevo informe de UNICEF sobre la situación de los niños en Yemen, las vidas de los menores están sumidas en violencia, el desplazamiento, las enfermedades, la pobreza y la falta de acceso a necesidades básicas, como comida, agua potable, medicamentos, educación y seguridad.

Los niños no son solamente las principales víctimas de estos conflictos armados, sino que se trasforman deliberadamente en blancos y son forzados a tomar parte en estos conflictos.

Carol Bellamy

Directora ejecutiva de UNICEF

¡La guerra constituye la más brutal violación de los Derechos Humanos de las niñas y niños!

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!


heidy_universidad@hotmail.com