/ lunes 3 de enero de 2022

Los restos por venir este 2022

El inicio de un nuevo año representa un impulso de esperanza, renueva propósitos de vida y permite fijar nuevas metas en el ámbito personal; sin duda, todos hicimos al final del 2021 un análisis, llevamos a cabo un balance y nos propusimos algunas metas para iniciar con nuevos bríos los siguientes 365 días. Sin embargo, vale la pena hacer un balance sobre lo que como sociedad debemos abordar y que junto con la autoridad debemos atender; no podemos dejar de lado que la pandemia de Covid es el principal problema que nos aqueja como seres humanos, por las implicaciones que tiene en la salud, en la economía, en los mecanismos de convivencia social, en general en el desenvolvimiento tradicional de la sociedad.

Pero tal vez ha sido ese desenvolvimiento tradicional el que nos ha situado en una condición de vulnerabilidad como seres humanos; el cambio climático es una realidad latente; un riesgo que, derivado del descuido y desatención que sociedad y gobierno brindamos al tema, nos ha estado rebasando en muchos de los sentidos. Una sociedad donde el consumismo nos hace comprar todo aquello que no necesitamos, aumentando nuestros niveles de compromisos financieros a los cuales debemos hacerles frente día con día; una sociedad que no se involucra de manera decidida en los asuntos públicos, dejando que el gobernante decida y su decisión no sea la más conveniente en el tiempo y momento actual.

En mi opinión, muy simple si usted así lo quiere ver, estimado lector, este 2022 viviremos varios retos que es preciso atender: En el ámbito político estaremos en presencia de un proceso nacional sobre la revocación de mandato, que la sociedad resuelva de manera puntual si el presidente de la república debe continuar en el cargo; un proceso inédito, pero por inédito también representa muchas dudas sobre su verdadero propósito; así mismo, elecciones el seis estados de la república, donde se debatirán de nueva cuenta dos visiones sobre el quehacer gubernamental, el de la oposición unida en la alianza Va por México y el de Morena con sus aliados; en el ámbito económico, el crecimiento de la inflación, como un fenómeno que hacía algunos años no se había vivido; así como la falta de inversión pública, debido al ahorcamiento que los estados y municipios están sufriendo por el centralismo hacendario; en términos de seguridad pública, el avance de los grupos criminales que amenazan la estabilidad de las instituciones; en términos de salud pública, el manejo de la pandemia, con sus nuevas variantes, así como la aplicación de los refuerzos en la vacunación y la sensibilidad para que todos los grupos poblacionales sean atendidos en las diversas variantes de vacunas que se aplicaron; en términos de política internacional, cuál va a ser nuestra relación con el mundo, ya que llevamos tres años en donde el presidente evade reuniones, foros y encuentros que pueden beneficiar a México; y por último, en términos de apoyos sociales, la constancia y transparencia en los programas de bienestar que se aplican por el Gobierno de la República; es decir, la valoración de su eficiencia en la reducción de la brecha de desigualdad existente, más que la eficacia política que los mismos programas tienen.

Estamos ante un 2022 con muchos retos, sólo el tiempo, la disciplina y el compromiso que como sociedad tengamos van a definir el rumbo y destino de este año; deseo que sean 365 días llenos de realizaciones personales y colectivas para la gran familia chihuahuense.

Alex Domínguez


El inicio de un nuevo año representa un impulso de esperanza, renueva propósitos de vida y permite fijar nuevas metas en el ámbito personal; sin duda, todos hicimos al final del 2021 un análisis, llevamos a cabo un balance y nos propusimos algunas metas para iniciar con nuevos bríos los siguientes 365 días. Sin embargo, vale la pena hacer un balance sobre lo que como sociedad debemos abordar y que junto con la autoridad debemos atender; no podemos dejar de lado que la pandemia de Covid es el principal problema que nos aqueja como seres humanos, por las implicaciones que tiene en la salud, en la economía, en los mecanismos de convivencia social, en general en el desenvolvimiento tradicional de la sociedad.

Pero tal vez ha sido ese desenvolvimiento tradicional el que nos ha situado en una condición de vulnerabilidad como seres humanos; el cambio climático es una realidad latente; un riesgo que, derivado del descuido y desatención que sociedad y gobierno brindamos al tema, nos ha estado rebasando en muchos de los sentidos. Una sociedad donde el consumismo nos hace comprar todo aquello que no necesitamos, aumentando nuestros niveles de compromisos financieros a los cuales debemos hacerles frente día con día; una sociedad que no se involucra de manera decidida en los asuntos públicos, dejando que el gobernante decida y su decisión no sea la más conveniente en el tiempo y momento actual.

En mi opinión, muy simple si usted así lo quiere ver, estimado lector, este 2022 viviremos varios retos que es preciso atender: En el ámbito político estaremos en presencia de un proceso nacional sobre la revocación de mandato, que la sociedad resuelva de manera puntual si el presidente de la república debe continuar en el cargo; un proceso inédito, pero por inédito también representa muchas dudas sobre su verdadero propósito; así mismo, elecciones el seis estados de la república, donde se debatirán de nueva cuenta dos visiones sobre el quehacer gubernamental, el de la oposición unida en la alianza Va por México y el de Morena con sus aliados; en el ámbito económico, el crecimiento de la inflación, como un fenómeno que hacía algunos años no se había vivido; así como la falta de inversión pública, debido al ahorcamiento que los estados y municipios están sufriendo por el centralismo hacendario; en términos de seguridad pública, el avance de los grupos criminales que amenazan la estabilidad de las instituciones; en términos de salud pública, el manejo de la pandemia, con sus nuevas variantes, así como la aplicación de los refuerzos en la vacunación y la sensibilidad para que todos los grupos poblacionales sean atendidos en las diversas variantes de vacunas que se aplicaron; en términos de política internacional, cuál va a ser nuestra relación con el mundo, ya que llevamos tres años en donde el presidente evade reuniones, foros y encuentros que pueden beneficiar a México; y por último, en términos de apoyos sociales, la constancia y transparencia en los programas de bienestar que se aplican por el Gobierno de la República; es decir, la valoración de su eficiencia en la reducción de la brecha de desigualdad existente, más que la eficacia política que los mismos programas tienen.

Estamos ante un 2022 con muchos retos, sólo el tiempo, la disciplina y el compromiso que como sociedad tengamos van a definir el rumbo y destino de este año; deseo que sean 365 días llenos de realizaciones personales y colectivas para la gran familia chihuahuense.

Alex Domínguez