“Podemos cambiar el mundo y hacer que sea un mundo mejor. Está en tus manos hacerlo realidad”.
Nelson Mandela
Todos queremos a las tierras que nos brindan identidad. El egoísmo personal, propio de nuestra naturaleza humana, nos lleva a que trabajemos en un provecho propio, olvidándonos de la identidad de nuestras raíces, omitiendo el bien común.
El poder tiene que ser conquistado para el beneficio de los pueblos. Nelson Mandela fue un ejemplo de ello. Un hombre que llegó a la cúspide del poder, cambiando las situaciones que vulneraban las condiciones sociales de su país y no sólo eso, fue un exitoso mediador entre países en conflicto.
Fue un político y abogado que entendió que por la vida venimos transitando para ayudar a otros y que de esta forma se logra un verdadero liderazgo. Tan es así, que la Asamblea General de las Naciones Unidas decretó que el 18 de julio fuera el Día Internacional de Nelson Mandela.
Nelson Mandela fue un luchador social que lo llevó a ser presidente de su país. Estoy segura que sus intenciones legítimas no eran conquistar el poder, sino lograr mejores condiciones para que no existiera discriminación, desigualdad y violaciones a los derechos humanos.
En la lucha y defensa de sus ideales fue llevado a prisión, pero la atención internacional de su caso lo ayudó a ser libre y convertirse en portador del premio Nobel de la Paz.
El ejemplo de Nelson Mandela nos llama a todos a servir con valores y con vocación de servicio.
La ONU nos invita a que 67 minutos al día los dediquemos a ayudar a los demás, ya que fueron 67 años en los que Nelson Mandela estuvo al servicio de la humanidad.
Su estadía en prisión ha servido para que se busquen mejores condiciones para las personas que se encuentran privadas de su libertad.
Nelson Mandela fue en contra de un sistema que lastimaba seriamente a su país, el cual impedía el desarrollo político y social de las personas de color, él fue el primer mandatario de raza negra en ocupar el Poder Ejecutivo de su país, combatió el racismo y la desigualdad social. Durante su gobierno se realizaron reformas para combatir la pobreza, buscó la expansión de los servicios de salud y siempre estuvo a favor de los derechos humanos.
En la vida hay que transitar defendiendo nuestros ideales, actuando siempre con valores, teniendo disciplina, orden, limpieza y puntualidad en todas nuestras tareas.
¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!
Asociación de Editorialistas de Chihuahua.
