/ lunes 1 de marzo de 2021

Momento Corporativo | Fibra Uno, lo tormenta ya está pasando

El 18 de marzo el fideicomiso inmobiliario que dirige Gonzalo Robina cumple 10 años de su debut en la BMV de José Oriol Bosch, periodo durante el cual se consolidó como el jugador más importante del mercado con 641 propiedades y más de 10 millones de metros cuadrados de área rentable. Y tanto en el ámbito financiero, bursátil e incluso operativo, Fibra Uno marcó la ruta para el resto de los fideicomisos inmobiliarios que hoy cotizan en el mercado de valores. Sin embargo, el fideicomiso no fue ajeno a la debacle provocada por la pandemia, pero las tendencias y señales de recuperación son cada vez más evidentes y la propia administración reconoce que lo peor de la crisis ya habría pasado y que conforme avance el proceso de vacunación en Estados Unidos, el principal socio comercial de México, y a nivel doméstico la recuperación sería más sólida y tendrá un efecto inmediato en el sector inmobiliario, que tradicionalmente es de los primeros en anticipar los ciclos económicos. Al cierre del año pasado 38% de los ingresos provinieron del segmento comercial, 31% del industrial, y 23% del rubro de oficinas que pese a la inquietud que generó el impacto de una desocupación obligada, para Fibra Uno el efecto neto negativo fue de sólo 38 mil metros cuadrados, y con las mejores ubicaciones disponibles, precios por debajo del promedio del mercado, y una potencial tendencia de rentar espacios más amplios para seguir cumpliendo las reglas de sana distancia, se podría mejorar el desempeño, aunque los analistas destacan que la resiliencia mayor seguirá siendo en el segmento industrial. Pese a los avances y las expectativas positivas, Fibra Uno mantiene una prudencia financiera y operativa, pero además cautela en sus decisiones las cuales no se detienen y la administración sigue pendiente de oportunidades de compra e incluso desinversiones que agreguen más valor a sus accionistas.

¿Porqué tantos privilegios?

Resulta que Sincronía Médica Aplicada propiedad de Nelly Guevara Madrigal no sólo fue una empresa consentida en el sexenio anterior con más de mil 300 millones de pesos en contratos que obtuvo mediante licitaciones y adjudicaciones directas, porque sigue haciendo de las suyas y en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ya obtuvo sendos contratos con la Sedena y el ISSSTE gracias a las relaciones que conserva con funcionarios del gobierno anterior, específicamente José López Rodríguez, quien es cercano al ex director del ISSSTE, José Reyes Baeza.

La compañía de Nelly Guevara Madrigal ha suministrado servicios de hemodinamia en Veracruz, Chihuahua y Puebla. La forma de operar de Sincronía Médica Aplicada no es ajena a las autoridades y trascendió que habría varias carpetas de investigación por irregularidades en los contratos cuyo análisis está a cargo de un equipo de la propia Unidad de Inteligencia Financiera que encabeza Santiago Nieto.

@robertoah

El 18 de marzo el fideicomiso inmobiliario que dirige Gonzalo Robina cumple 10 años de su debut en la BMV de José Oriol Bosch, periodo durante el cual se consolidó como el jugador más importante del mercado con 641 propiedades y más de 10 millones de metros cuadrados de área rentable. Y tanto en el ámbito financiero, bursátil e incluso operativo, Fibra Uno marcó la ruta para el resto de los fideicomisos inmobiliarios que hoy cotizan en el mercado de valores. Sin embargo, el fideicomiso no fue ajeno a la debacle provocada por la pandemia, pero las tendencias y señales de recuperación son cada vez más evidentes y la propia administración reconoce que lo peor de la crisis ya habría pasado y que conforme avance el proceso de vacunación en Estados Unidos, el principal socio comercial de México, y a nivel doméstico la recuperación sería más sólida y tendrá un efecto inmediato en el sector inmobiliario, que tradicionalmente es de los primeros en anticipar los ciclos económicos. Al cierre del año pasado 38% de los ingresos provinieron del segmento comercial, 31% del industrial, y 23% del rubro de oficinas que pese a la inquietud que generó el impacto de una desocupación obligada, para Fibra Uno el efecto neto negativo fue de sólo 38 mil metros cuadrados, y con las mejores ubicaciones disponibles, precios por debajo del promedio del mercado, y una potencial tendencia de rentar espacios más amplios para seguir cumpliendo las reglas de sana distancia, se podría mejorar el desempeño, aunque los analistas destacan que la resiliencia mayor seguirá siendo en el segmento industrial. Pese a los avances y las expectativas positivas, Fibra Uno mantiene una prudencia financiera y operativa, pero además cautela en sus decisiones las cuales no se detienen y la administración sigue pendiente de oportunidades de compra e incluso desinversiones que agreguen más valor a sus accionistas.

¿Porqué tantos privilegios?

Resulta que Sincronía Médica Aplicada propiedad de Nelly Guevara Madrigal no sólo fue una empresa consentida en el sexenio anterior con más de mil 300 millones de pesos en contratos que obtuvo mediante licitaciones y adjudicaciones directas, porque sigue haciendo de las suyas y en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ya obtuvo sendos contratos con la Sedena y el ISSSTE gracias a las relaciones que conserva con funcionarios del gobierno anterior, específicamente José López Rodríguez, quien es cercano al ex director del ISSSTE, José Reyes Baeza.

La compañía de Nelly Guevara Madrigal ha suministrado servicios de hemodinamia en Veracruz, Chihuahua y Puebla. La forma de operar de Sincronía Médica Aplicada no es ajena a las autoridades y trascendió que habría varias carpetas de investigación por irregularidades en los contratos cuyo análisis está a cargo de un equipo de la propia Unidad de Inteligencia Financiera que encabeza Santiago Nieto.

@robertoah