/ miércoles 10 de marzo de 2021

Multas a las personas, no a vehículos

Hace unos días expuse en el pleno del Congreso local la urgencia de adecuar el procedimiento usado por la Policía Vial para emitir infracciones de tránsito a conductores, y me llena de orgullo que la propuesta haya sido bien recibida por numerosos expertos en la materia, quienes me han externado su apoyo a través de llamadas y mensajes.

En esta entrega trataré de desmenuzar para ti mi iniciativa, estimado lector, con el fin de que puedas establecer tu propio criterio.

Actualmente las multas de Vialidad, como son comúnmente conocidas, se aplican al vehículo, es decir a través del número de placa. Esto ha venido ocasionando graves inconvenientes con la recaudación, es decir, el auto “deudoso” va a parar a un yonke o se abandona y el cobro queda en el "limbo".

Lo anterior, aunque es un factor de gran importancia para la economía gubernamental y el sostenimiento de obras y servicios públicos, pasa a segundo plano si consideramos que mi iniciativa será benéfica para reducir los accidentes y daños causados por eventos de tráfico, pues el infractor pensará dos veces al momento de volver a cometerla.

El hecho de que la infracción recaiga en el conductor y no en la placa dará pie al impulso de la educación vial a través de una población más educada y más consciente.

Dentro de las ventajas de llevar el registro de infracciones a la persona está en que el conductor sea quien responda por sus actos de forma económica y/o detención, por eso insisto en que debe actualizarse el procedimiento infractor.

Si cambiamos la forma en que se aplican las infracciones, podemos aspirar a un registro estatal de infractores cuyo historial servirá para diversos factores:

Se podrá sancionar en base a trabajo social, arresto y por ende, el infractor tendrá más conciencia para no recaer en la misma falta vial.

No puedo dejar a un lado el hecho de que este historial incluirá los nombres de personas que reincidan en faltas relacionadas con el consumo del alcohol, a quienes podrá retirárseles su licencia temporalmente, esto redundará en evitar bombas de tiempo en nuestras calles.

Los conductores sin un castigo no valoran el conducir como marca la ley y recaen en las infracciones, quizá no se tenga este dato porque el registro se lleva a los vehículos y no al conductor.

Motivos principales de infracciones de tránsito:

Exceso de velocidad

Conducir usando dispositivos telefónicos

Manejar en estado de ebriedad

Estacionarse en doble fila

Estacionarse en áreas prohibidas

Conducir sin licencia o documentos

No portar cinturón de seguridad

Conducir sin placas

Hace unos días expuse en el pleno del Congreso local la urgencia de adecuar el procedimiento usado por la Policía Vial para emitir infracciones de tránsito a conductores, y me llena de orgullo que la propuesta haya sido bien recibida por numerosos expertos en la materia, quienes me han externado su apoyo a través de llamadas y mensajes.

En esta entrega trataré de desmenuzar para ti mi iniciativa, estimado lector, con el fin de que puedas establecer tu propio criterio.

Actualmente las multas de Vialidad, como son comúnmente conocidas, se aplican al vehículo, es decir a través del número de placa. Esto ha venido ocasionando graves inconvenientes con la recaudación, es decir, el auto “deudoso” va a parar a un yonke o se abandona y el cobro queda en el "limbo".

Lo anterior, aunque es un factor de gran importancia para la economía gubernamental y el sostenimiento de obras y servicios públicos, pasa a segundo plano si consideramos que mi iniciativa será benéfica para reducir los accidentes y daños causados por eventos de tráfico, pues el infractor pensará dos veces al momento de volver a cometerla.

El hecho de que la infracción recaiga en el conductor y no en la placa dará pie al impulso de la educación vial a través de una población más educada y más consciente.

Dentro de las ventajas de llevar el registro de infracciones a la persona está en que el conductor sea quien responda por sus actos de forma económica y/o detención, por eso insisto en que debe actualizarse el procedimiento infractor.

Si cambiamos la forma en que se aplican las infracciones, podemos aspirar a un registro estatal de infractores cuyo historial servirá para diversos factores:

Se podrá sancionar en base a trabajo social, arresto y por ende, el infractor tendrá más conciencia para no recaer en la misma falta vial.

No puedo dejar a un lado el hecho de que este historial incluirá los nombres de personas que reincidan en faltas relacionadas con el consumo del alcohol, a quienes podrá retirárseles su licencia temporalmente, esto redundará en evitar bombas de tiempo en nuestras calles.

Los conductores sin un castigo no valoran el conducir como marca la ley y recaen en las infracciones, quizá no se tenga este dato porque el registro se lleva a los vehículos y no al conductor.

Motivos principales de infracciones de tránsito:

Exceso de velocidad

Conducir usando dispositivos telefónicos

Manejar en estado de ebriedad

Estacionarse en doble fila

Estacionarse en áreas prohibidas

Conducir sin licencia o documentos

No portar cinturón de seguridad

Conducir sin placas