/ viernes 7 de septiembre de 2018

Ni hace falta el que se va ni estorba el que se queda

LaLa participación política en su esencia es: voluntaria, nadie nos obliga, presiona o induce, tiene y debe ser, por voluntad propia, convicción y por herencia, como los valores, se supone, y… ante todo esto, la palabra y los fundamentos del hombre, tienen y deben ser fundamentales, Marquito se va del PRI, orgullosamente mi partido, por intereses personales y de grupúsculo, como los tuvo en dizque su leal militancia en el PRI. El hombre es hombre y aunque se lo lleve la tía de las muchachas, que reniega de las dirigencias y hasta de su compadre Reyes, ¿qué más quiere?, le tiene a Lucy de delegada, y ahora a la m… Martínez, pues quiere todo, muchachito llorón, así lo hizo él con el profesor Sánchez, Andrés de la O y Pancho Rivera, y sabrá cuántos más, todo se paga en la vida.

Así que, Marquito, que le vaya bien y Dios le bendiga, y a donde vaya será traidor, y no sea tan chillón, y le sirva de experiencia y a donde lo acepten, no haga daño, disculpen las expresiones, pero es mi sentir muy personal; y ojalá siga usufructuando del sueldo de su señora esposa y de lo que se llevó en los cargos en que estuvo (acuérdese que le conocí vendiendo quesos y asaderos), gracias al partido que ahora “dizque” abandona y reniega, porque no tiene el valor de dar nombres, y además ya fue a destiempo, antes de la elección hubiera sido magnífico.

En la terminología corriente de la ciencia política, la expresión participación política se utiliza generalmente para designar toda una serie de actividades: el acto de la votación, la militancia en un partido político, participación en manifestaciones, las contribuciones dadas a ciertas agrupaciones políticas, la discusión de sucesos políticos, la participación en comicios o en reuniones sectoriales, apoyo a determinados candidatos en el curso de las campañas electorales, la presión ejercida sobre las dirigencias políticas, “que es lo que usted no tuvo en su momento el valor civil y… partidista de hacer”, menos difundir las acciones políticas de las actuales dirigencias.

Es fácil ver, hoy, que esté haciendo uso de los medios de comunicación para rumiar su derrota, donde quiere reflejar prácticas, orientaciones y procesos típicos. El ideal democrático prevé unos ciudadanos atentos a los desarrollos de la cosa pública, informados sobre los acontecimientos políticos, al corriente de las cuestiones, capaces de elegir entre las distintas alternativas propuestas por las fuerzas políticas y comprometidos directa o indirectamente en formas de participación.

A donde vaya no le deseamos mal, que le vaya muy bien. No repita lo que hoy cobarde hizo, y esperamos jamás vuelva, se lo dice un auténtico priista, hombre de palabra, y… que jamás morderá la mano de quien se la tiende.

El gallo para mi partido estatal es el Lic. Notario Sergio granados, ojalá no se le ocurra a Reyes mandarnos al Negro Márquez.


LaLa participación política en su esencia es: voluntaria, nadie nos obliga, presiona o induce, tiene y debe ser, por voluntad propia, convicción y por herencia, como los valores, se supone, y… ante todo esto, la palabra y los fundamentos del hombre, tienen y deben ser fundamentales, Marquito se va del PRI, orgullosamente mi partido, por intereses personales y de grupúsculo, como los tuvo en dizque su leal militancia en el PRI. El hombre es hombre y aunque se lo lleve la tía de las muchachas, que reniega de las dirigencias y hasta de su compadre Reyes, ¿qué más quiere?, le tiene a Lucy de delegada, y ahora a la m… Martínez, pues quiere todo, muchachito llorón, así lo hizo él con el profesor Sánchez, Andrés de la O y Pancho Rivera, y sabrá cuántos más, todo se paga en la vida.

Así que, Marquito, que le vaya bien y Dios le bendiga, y a donde vaya será traidor, y no sea tan chillón, y le sirva de experiencia y a donde lo acepten, no haga daño, disculpen las expresiones, pero es mi sentir muy personal; y ojalá siga usufructuando del sueldo de su señora esposa y de lo que se llevó en los cargos en que estuvo (acuérdese que le conocí vendiendo quesos y asaderos), gracias al partido que ahora “dizque” abandona y reniega, porque no tiene el valor de dar nombres, y además ya fue a destiempo, antes de la elección hubiera sido magnífico.

En la terminología corriente de la ciencia política, la expresión participación política se utiliza generalmente para designar toda una serie de actividades: el acto de la votación, la militancia en un partido político, participación en manifestaciones, las contribuciones dadas a ciertas agrupaciones políticas, la discusión de sucesos políticos, la participación en comicios o en reuniones sectoriales, apoyo a determinados candidatos en el curso de las campañas electorales, la presión ejercida sobre las dirigencias políticas, “que es lo que usted no tuvo en su momento el valor civil y… partidista de hacer”, menos difundir las acciones políticas de las actuales dirigencias.

Es fácil ver, hoy, que esté haciendo uso de los medios de comunicación para rumiar su derrota, donde quiere reflejar prácticas, orientaciones y procesos típicos. El ideal democrático prevé unos ciudadanos atentos a los desarrollos de la cosa pública, informados sobre los acontecimientos políticos, al corriente de las cuestiones, capaces de elegir entre las distintas alternativas propuestas por las fuerzas políticas y comprometidos directa o indirectamente en formas de participación.

A donde vaya no le deseamos mal, que le vaya muy bien. No repita lo que hoy cobarde hizo, y esperamos jamás vuelva, se lo dice un auténtico priista, hombre de palabra, y… que jamás morderá la mano de quien se la tiende.

El gallo para mi partido estatal es el Lic. Notario Sergio granados, ojalá no se le ocurra a Reyes mandarnos al Negro Márquez.