/ viernes 2 de octubre de 2020

¡No hay libertad de expresión!

“Que no hay libertad formal para atacar al gobierno; chayoteros del infierno… gritan en todo portal”.

Pero antes del tema de nuestro epigrama, comentaré que fue ejemplar y extraordinaria la conferencia del rector de la Universidad Iberoamericana, David Fernández Dávalos, con el título “El compromiso de los cristianos en la coyuntura de México de hoy”, impartida en el Templo de la Sagrada Familia en la Ciudad de México, en días recientes; y fue extraordinaria porque su apoyo a AMLO fue proverbial, veraz y honesto.

Mencionó que hay un ataque clasista, ideológico, político y económico de élites, para que AMLO, fracase; afirmó: “Intentan desacreditar al presidente AMLO, quien llegó ahí con la mayor legitimidad de toda la historia de México; es la reacción del miedo que tienen las élites de ser afectadas, al ser desplazadas del poder político, pero no del económico. Tales élites reprueban todos los proyectos del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, porque afectan los intereses de los grandes capitales, muchos de ellos mal habidos como todo el mundo bien sabe. Los contrapesos frente al gobierno se centran en intereses políticos de los grandes capitales del país, de la prensa, y de los canales de televisión; después de que ellos afectaron perniciosamente a otros, su campaña busca no sólo desacreditar a AMLO, sino incluso la calidad moral e intelectual de los 30 millones de mexicanos que votaron con gusto por él, a quienes definen como seres no racionales”.

Concluyó, que hay una crítica racista y clasista contra el gobierno de AMLO y que piensan que todo estaría bien, si cada quien se conformara con la casta que le ha sido asignada y con el lugar que tiene que ocupar en la sociedad. La conferencia mediante boletín informativo de la universidad, fue enviado a los mayores medios de información masiva, los que le dieron una mínima acogida en espacios y tiempos informativos.

Por su parte y respecto a que no hay libertad de expresión según desplegado periodístico de algunos pseudointelectuales del país, AMLO expresó que lo que no puede es negociar con la libertad de expresión, el ataque de muchos de estos periodistas y comunicadores le suena a “ataques en metálico”, y presentó un estudio que demuestra que ningún otro presidente de México ha sido tan atacado como él, sin que el gobierno haga o haya hecho nada al respecto; “jamás vamos a restringir la libre manifestación de las ideas y la libertad de prensa”. Se analizó el contenido temático de los rotativos: Financiero; Universal, Economista; Jornada; Excélsior, Milenio, Reforma, y otros; y se encontró que casi todas las columnas están dedicadas a atacar al gobierno y su persona; puso de ejemplo El Financiero… una columna a favor, dos neutrales y nueve en contra; El Universal… cero a favor, 10 en contra; Milenio… dos a favor, dos neutrales y 12 en contra; el Reforma... cero a favor, 10 en contra. Del porcentaje de todas las columnas, el 64% se dirige a la 4T, de ellas, el 10 por ciento son favorables, el 23 por ciento, son neutrales y el 67 por ciento son contrarias. ¿Cómo es que dicen que no hay libertad de expresión? Las élites que constituyen los grandes capitales del país y que incluyen los medios más poderosos de comunicación, y los conservadores retrógradas, confabulados con partidos políticos de grotesca alianza religiosa, son los enemigos del pueblo y la 4T; son el oscuro e ineluctable pasado de México, que tenemos que agotar. El PAN, sobre todo, los contiene a todos ellos.

“Que no hay libertad formal para atacar al gobierno; chayoteros del infierno… gritan en todo portal”.

Pero antes del tema de nuestro epigrama, comentaré que fue ejemplar y extraordinaria la conferencia del rector de la Universidad Iberoamericana, David Fernández Dávalos, con el título “El compromiso de los cristianos en la coyuntura de México de hoy”, impartida en el Templo de la Sagrada Familia en la Ciudad de México, en días recientes; y fue extraordinaria porque su apoyo a AMLO fue proverbial, veraz y honesto.

Mencionó que hay un ataque clasista, ideológico, político y económico de élites, para que AMLO, fracase; afirmó: “Intentan desacreditar al presidente AMLO, quien llegó ahí con la mayor legitimidad de toda la historia de México; es la reacción del miedo que tienen las élites de ser afectadas, al ser desplazadas del poder político, pero no del económico. Tales élites reprueban todos los proyectos del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, porque afectan los intereses de los grandes capitales, muchos de ellos mal habidos como todo el mundo bien sabe. Los contrapesos frente al gobierno se centran en intereses políticos de los grandes capitales del país, de la prensa, y de los canales de televisión; después de que ellos afectaron perniciosamente a otros, su campaña busca no sólo desacreditar a AMLO, sino incluso la calidad moral e intelectual de los 30 millones de mexicanos que votaron con gusto por él, a quienes definen como seres no racionales”.

Concluyó, que hay una crítica racista y clasista contra el gobierno de AMLO y que piensan que todo estaría bien, si cada quien se conformara con la casta que le ha sido asignada y con el lugar que tiene que ocupar en la sociedad. La conferencia mediante boletín informativo de la universidad, fue enviado a los mayores medios de información masiva, los que le dieron una mínima acogida en espacios y tiempos informativos.

Por su parte y respecto a que no hay libertad de expresión según desplegado periodístico de algunos pseudointelectuales del país, AMLO expresó que lo que no puede es negociar con la libertad de expresión, el ataque de muchos de estos periodistas y comunicadores le suena a “ataques en metálico”, y presentó un estudio que demuestra que ningún otro presidente de México ha sido tan atacado como él, sin que el gobierno haga o haya hecho nada al respecto; “jamás vamos a restringir la libre manifestación de las ideas y la libertad de prensa”. Se analizó el contenido temático de los rotativos: Financiero; Universal, Economista; Jornada; Excélsior, Milenio, Reforma, y otros; y se encontró que casi todas las columnas están dedicadas a atacar al gobierno y su persona; puso de ejemplo El Financiero… una columna a favor, dos neutrales y nueve en contra; El Universal… cero a favor, 10 en contra; Milenio… dos a favor, dos neutrales y 12 en contra; el Reforma... cero a favor, 10 en contra. Del porcentaje de todas las columnas, el 64% se dirige a la 4T, de ellas, el 10 por ciento son favorables, el 23 por ciento, son neutrales y el 67 por ciento son contrarias. ¿Cómo es que dicen que no hay libertad de expresión? Las élites que constituyen los grandes capitales del país y que incluyen los medios más poderosos de comunicación, y los conservadores retrógradas, confabulados con partidos políticos de grotesca alianza religiosa, son los enemigos del pueblo y la 4T; son el oscuro e ineluctable pasado de México, que tenemos que agotar. El PAN, sobre todo, los contiene a todos ellos.