Estamos frente a otro año más de manifestaciones, discursos, conferencias, talleres, reconocimientos y debates.
Pero hoy es tiempo de actuar, cada uno desde su zona de influencia, porque las mujeres necesitan acciones, no sólo discursos. Y nosotros como empresarios y empresarias podemos y debemos tomar acciones concretas con resultados rápidos y tangibles para reconocer y mejorar la calidad de vida de nuestras colaboradoras.
¿Cómo puede mi empresa hacer esto? Aquí 8 propuestas para actuar:
1. Conoce a tus colaboradoras: ¿Cuántas son? ¿Qué edad tienen? ¿Cuál es su escolaridad? ¿Son madres? ¿Son jefas de familia? ¿Cuál es su situación familiar?
2. Genera indicadores de género: ¿Cuántos hombres y cuántas mujeres laboran en la empresa? Desglosa por sexo su edad, antigüedad en la empresa, ausentismo, horas de capacitación, proporción hombre / mujer en cada nivel de puesto.
3. Formaliza y comunica tus políticas de permisos, incapacidades, horarios flexibles.
4. Genera un código de ética en tu empresa donde incluya acciones contra el acoso, la violencia, la discriminación y que promueva la inclusión. Comunícalo e impleméntalo.
5. Revisa la infraestructura y prestaciones para la crianza, tales como salas de lactancia o permisos para promover una paternidad responsable en tus colaboradores.
6. Define y prioriza metas de equidad a corto, mediano y largo plazo.
7. Fija la meta para que los puestos directivos de tu empresa, así como la formación de consejo de administración, cuente con el 50% de participación de mujeres.
8. Trabaja en la brecha salarial: esto no es negociable, la equidad tiene que iniciar en la remuneración económica; mide cuánto gana un hombre y una mujer en un mismo puesto, e inicia por reducir esta desigualdad a corto plazo y llegar en menos de un año a que ganen lo mismo si tienen las mismas capacidades y desarrollan las mismas funciones.
Así como nuestras empresas pueden actuar rápida y concretamente, nuestros gobiernos como grandes empleadores pueden tomar estas acciones, iniciando porque todas sus colaboradoras estén en la formalidad, contratadas como lo hacemos en cualquier empresa, con contratos formales, con prestaciones y seguridad social. Desafortunadamente, hoy en día los gobiernos son los que tienen más colaboradoras en la informalidad y las mantienen en la incertidumbre del vencimiento del contrato trimestral, el cual se puede prestar para presiones o sometimientos.
En Chihuahua estamos viendo una diferencia, al contar con mujeres en todos los poderes de gobierno: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Esto habla de un avance en materia de equidad, pues elegimos a nuestras representantes con base en sus capacidades, y no para cumplir una cuota. Aún tenemos un largo camino por recorrer, pero confiamos en que seguiremos dando pasos firmes en materia de equidad, liderado por nuestras autoridades y confirmado y ejecutado desde la voluntad y las acciones de los empresarios.
Francisco Santini Ramos
Presidente del Consejo Coordinador de Chihuahua
#SomosLaFuerzaQueMueveAChihuahua
Ingeniero civil. Presidente del Consejo Coordinador Empresarial