/ miércoles 27 de diciembre de 2017

Otro engaño de Mr. Trump

Esta semana se disparó el precio del dólar, de los $18.50 en que andaba hace quince días, brincó a los $20 por dólar, porque Mr. Trump logró que le aprobaran en el congreso bajar el impuesto sobre la renta de las empresas de 31% a 21%, lo que supuestamente va a aumentar la inversión en nuevas empresas, ampliación de las existentes, generando más empleos. De nuevo Mr. Trump engañó a los legisladores y a su pueblo.

Bajar el impuesto sobre las ganancias a las empresas sólo beneficia a los ricos de su país, dentro de los cuales está él mismo, a pesar de que desde la campaña se le acusó de ser un gran evasor de impuestos y a la gente no le importó esto. Sólo le dejará más dinero a los ricos y lo que toda economía necesita es que su pueblo, sobre todo la clase media, que es la que consume, tenga más dinero en su bolsillo para poder consumir, que al final es lo que mueve la economía y bienestar para todos. Que el rico tenga más dinero gracias a que le bajaron los impuestos no quiere decir que va a invertir más, y aun cuando así suceda, que sí es muy posible porque entusiasma al inversionista, no sólo al connacional, sino los extranjeros, pero como están de automatizados todos los procesos, la generación de empleos no será tan grande.

Por otro lado, lo que le falta a Estados Unidos es fortalecer su mercado interno y eso se logra dejándole dinero en el bolsillo a los consumidores.

¿De dónde sacará Mr. Trump dinero para construir el muro que quiere levantar entre la frontera de aquel país y México? Porque con esta medida va a recaudar menos impuestos, que para un gobierno que ya es deficitario, no le será fácil sacar este y otros proyectos que tiene, como el problema con el muchacho de Norcorea y los problemas en el Medio Oriente.

El dólar se disparó como si las inversiones fueran “golondrinas”, al menor cambio fiscal que favorezca a las empresas, se van a ir a los Estados Unidos. No, la economía no funciona así de rápido, si así fuera el mundo se volvería loco.

Ciertamente que el gobierno federal de Peña Nieto deberá tomar medidas para contrarrestar el efecto de la baja en la tasa de impuesto, que en México anda en el 30% y esto en el mediano y largo plazo, sí hace que nuestro país se vea menos atractivo para los inversionistas locales y extranjeros, pero lo dudamos que se le ocurra algo a un presidente tan mal preparado como el que tenemos, que ni un libro ha leído, bueno, ni el lenguaje castellano se le da.

Pero a los políticos rara vez les da pensar en su pueblo. Ya ven que el caso del robadero de César Duarte, ex gobernador de Chihuahua, está alcanzando a las altas esferas del poder político en México, al encarcelar a Alejandro Gutiérrez, ex secretario general del PRI Nacional.

El caso del “Chihuahuagate”, como se le ha llamado, llega hasta Videgaray, que fue secretario de Hacienda del actual presidente Peña Nieto, y a uno de los priistas más influyentes, Manlio Fabio Beltrones, ex presidente nacional del PRI, cuando este desvío de dinero público sucedió y por declaraciones bajo juramento de algunos implicados, fueron por órdenes directas del exgobernador César Duarte.

Trump sigue engañando a su pueblo.

 

Esta semana se disparó el precio del dólar, de los $18.50 en que andaba hace quince días, brincó a los $20 por dólar, porque Mr. Trump logró que le aprobaran en el congreso bajar el impuesto sobre la renta de las empresas de 31% a 21%, lo que supuestamente va a aumentar la inversión en nuevas empresas, ampliación de las existentes, generando más empleos. De nuevo Mr. Trump engañó a los legisladores y a su pueblo.

Bajar el impuesto sobre las ganancias a las empresas sólo beneficia a los ricos de su país, dentro de los cuales está él mismo, a pesar de que desde la campaña se le acusó de ser un gran evasor de impuestos y a la gente no le importó esto. Sólo le dejará más dinero a los ricos y lo que toda economía necesita es que su pueblo, sobre todo la clase media, que es la que consume, tenga más dinero en su bolsillo para poder consumir, que al final es lo que mueve la economía y bienestar para todos. Que el rico tenga más dinero gracias a que le bajaron los impuestos no quiere decir que va a invertir más, y aun cuando así suceda, que sí es muy posible porque entusiasma al inversionista, no sólo al connacional, sino los extranjeros, pero como están de automatizados todos los procesos, la generación de empleos no será tan grande.

Por otro lado, lo que le falta a Estados Unidos es fortalecer su mercado interno y eso se logra dejándole dinero en el bolsillo a los consumidores.

¿De dónde sacará Mr. Trump dinero para construir el muro que quiere levantar entre la frontera de aquel país y México? Porque con esta medida va a recaudar menos impuestos, que para un gobierno que ya es deficitario, no le será fácil sacar este y otros proyectos que tiene, como el problema con el muchacho de Norcorea y los problemas en el Medio Oriente.

El dólar se disparó como si las inversiones fueran “golondrinas”, al menor cambio fiscal que favorezca a las empresas, se van a ir a los Estados Unidos. No, la economía no funciona así de rápido, si así fuera el mundo se volvería loco.

Ciertamente que el gobierno federal de Peña Nieto deberá tomar medidas para contrarrestar el efecto de la baja en la tasa de impuesto, que en México anda en el 30% y esto en el mediano y largo plazo, sí hace que nuestro país se vea menos atractivo para los inversionistas locales y extranjeros, pero lo dudamos que se le ocurra algo a un presidente tan mal preparado como el que tenemos, que ni un libro ha leído, bueno, ni el lenguaje castellano se le da.

Pero a los políticos rara vez les da pensar en su pueblo. Ya ven que el caso del robadero de César Duarte, ex gobernador de Chihuahua, está alcanzando a las altas esferas del poder político en México, al encarcelar a Alejandro Gutiérrez, ex secretario general del PRI Nacional.

El caso del “Chihuahuagate”, como se le ha llamado, llega hasta Videgaray, que fue secretario de Hacienda del actual presidente Peña Nieto, y a uno de los priistas más influyentes, Manlio Fabio Beltrones, ex presidente nacional del PRI, cuando este desvío de dinero público sucedió y por declaraciones bajo juramento de algunos implicados, fueron por órdenes directas del exgobernador César Duarte.

Trump sigue engañando a su pueblo.