/ viernes 20 de noviembre de 2020

¿Para qué es el dinero?

“Normalmente somos conocedores del precio de casi todo, pero es poco común que conozcamos el valor de las cosas”


El dinero para López Obrador, para la 4T y para los gobiernos comunistas, es algo “malo, muy malo”, como lo afirmaba Hugo Chávez; mientras ellos, los gobernantes son ricos, muy ricos; sin embargo todos y cada uno de los miembros de Morena no pertenecen a dicho partido para ayudar a la gente ni para salvar vidas, sino para obtener dinero, para asegurarse que “la Revolución les hará justicia”

Normalmente somos conocedores del precio de casi todo, pero es poco común que conozcamos el valor de las cosas. Aunque parezca inverosímil, es mejor el efecto que tiene para el espíritu vivir en un hogar modesto y tranquilo, que en uno lujoso y desquiciado, pero no bajo las condiciones de austeridad que nos quiere imponer López Obrador con la ayuda de la “gloriosa y heroica” Guardia Nacional, de sólo tener un par de zapatos, y un carrito viejo.

La fortuna y la riqueza no son en realidad lo que tenemos, sino lo que hacemos con todo aquello que poseemos. La fortuna nunca está en el banco. Está dentro de nosotros.

Para unos, el dinero es meramente algo para comer; para otros es el tener libertad; para otros más representa todas las comodidades; para muchos el vicio y las drogas; y para algunos el poder y la gloria.

El tener o no tener dinero son meramente situaciones pasajeras en la vida. Muchos que han querido ser millonarios lo han sido, pero el que no ha probado la pobreza en alguna de sus formas no ha adquirido la verdadera filosofía de la vida. La felicidad y la satisfacción no dependen de lo que poseemos, sino de quiénes somos.

Quizá el problema con el hombre es que los que creen que pueden hacer cualquier cosa con el dinero están dispuestos a hacer cualquier cosa por él.

Pensar que el dinero puede dar el poder que muchos desean es una idea equivocada de lo que significan el poder y el dinero. El dinero solamente se convierte en poder, cuando lo asociamos con el valor, no con el precio de las cosas.

Con el dinero pasa lo que con el universo, no sabemos exactamente lo que es, pero sí conocemos las leyes que lo gobiernan. El dinero cada uno lo estima de forma diferente, porque cada uno de nosotros es diferente. Sin embargo, tener algo que desear es parte de la felicidad.

Cuántos hay que ya no tienen por qué entusiasmarse, algo por lo que quieran vivir. Cuántas veces, también, lo que ya tenemos nos hace más bien que lo que deseamos o lo que nos falta.

Sin duda alguna necesitamos del dinero, pero necesitamos aún más el saber, el contar con sabiduría.

El dinero se convierte en riqueza cuando el hombre trabaja por el gusto de hacerlo. Nunca trabaja con igual entusiasmo quien trabaja por dinero. La vida es mucho más que hacer dinero y acumular bienes y poderes materiales.

Es disfrutar con pasión, amor y entrega lo que se hace. Lo que cuenta no es quién tiene más dinero, sino quién es más dichoso.


Es cierto que contar con dinero nos proporciona cierta seguridad y un equilibrio psicológico, pero sin caer en la miseria, se puede ser relativamente independiente, tener seguridad, no tener que depender de nadie ¡y ser feliz!

Un mensaje para el presidente: Nunca es grande quien lucha por la grandeza y menos es rico quien se desvive por la riqueza.



“Normalmente somos conocedores del precio de casi todo, pero es poco común que conozcamos el valor de las cosas”


El dinero para López Obrador, para la 4T y para los gobiernos comunistas, es algo “malo, muy malo”, como lo afirmaba Hugo Chávez; mientras ellos, los gobernantes son ricos, muy ricos; sin embargo todos y cada uno de los miembros de Morena no pertenecen a dicho partido para ayudar a la gente ni para salvar vidas, sino para obtener dinero, para asegurarse que “la Revolución les hará justicia”

Normalmente somos conocedores del precio de casi todo, pero es poco común que conozcamos el valor de las cosas. Aunque parezca inverosímil, es mejor el efecto que tiene para el espíritu vivir en un hogar modesto y tranquilo, que en uno lujoso y desquiciado, pero no bajo las condiciones de austeridad que nos quiere imponer López Obrador con la ayuda de la “gloriosa y heroica” Guardia Nacional, de sólo tener un par de zapatos, y un carrito viejo.

La fortuna y la riqueza no son en realidad lo que tenemos, sino lo que hacemos con todo aquello que poseemos. La fortuna nunca está en el banco. Está dentro de nosotros.

Para unos, el dinero es meramente algo para comer; para otros es el tener libertad; para otros más representa todas las comodidades; para muchos el vicio y las drogas; y para algunos el poder y la gloria.

El tener o no tener dinero son meramente situaciones pasajeras en la vida. Muchos que han querido ser millonarios lo han sido, pero el que no ha probado la pobreza en alguna de sus formas no ha adquirido la verdadera filosofía de la vida. La felicidad y la satisfacción no dependen de lo que poseemos, sino de quiénes somos.

Quizá el problema con el hombre es que los que creen que pueden hacer cualquier cosa con el dinero están dispuestos a hacer cualquier cosa por él.

Pensar que el dinero puede dar el poder que muchos desean es una idea equivocada de lo que significan el poder y el dinero. El dinero solamente se convierte en poder, cuando lo asociamos con el valor, no con el precio de las cosas.

Con el dinero pasa lo que con el universo, no sabemos exactamente lo que es, pero sí conocemos las leyes que lo gobiernan. El dinero cada uno lo estima de forma diferente, porque cada uno de nosotros es diferente. Sin embargo, tener algo que desear es parte de la felicidad.

Cuántos hay que ya no tienen por qué entusiasmarse, algo por lo que quieran vivir. Cuántas veces, también, lo que ya tenemos nos hace más bien que lo que deseamos o lo que nos falta.

Sin duda alguna necesitamos del dinero, pero necesitamos aún más el saber, el contar con sabiduría.

El dinero se convierte en riqueza cuando el hombre trabaja por el gusto de hacerlo. Nunca trabaja con igual entusiasmo quien trabaja por dinero. La vida es mucho más que hacer dinero y acumular bienes y poderes materiales.

Es disfrutar con pasión, amor y entrega lo que se hace. Lo que cuenta no es quién tiene más dinero, sino quién es más dichoso.


Es cierto que contar con dinero nos proporciona cierta seguridad y un equilibrio psicológico, pero sin caer en la miseria, se puede ser relativamente independiente, tener seguridad, no tener que depender de nadie ¡y ser feliz!

Un mensaje para el presidente: Nunca es grande quien lucha por la grandeza y menos es rico quien se desvive por la riqueza.