/ lunes 10 de mayo de 2021

Paridad de género

La paridad de género hace referencia a la participación y representación equilibrada de mujeres y hombres en los puestos de poder y de toma de decisiones en todas las esferas de nuestro entorno (política, económica y social).

En nuestro país la paridad es un principio constitucional que se refiere a la participación equilibrada, justa y legal, que asegura que al igual que los hombres, las mujeres en toda su diversidad tengan una participación y representación igualitaria en la vida democrática de nuestro país.

Fue en 1955 cuando el voto de la mujer se implementó por primera vez. A partir de ahí, en cada década se avanzó respecto a la representatividad, derechos y libertades de la mujer. Cada logro ha sido siempre producto de una lucha larga, compleja y llena de desafíos que van desde lograr que se reconociera el derecho de las mujeres de votar y ser votadas hasta una paridad total con excepciones positivas en su favor.

Hay que hacer hincapié sobre la labor de la mujer mexicana en este tema, pues los importantes logros obtenidos les permiten demostrar con hechos que tienen la preparación y capacidad necesaria para ser partícipes en todos los ámbitos y puedan alzar la voz en la solución de los grandes desafíos que México enfrenta. Sin embargo, las reformas que se implementan a lo largo del tiempo son benéficas para un mayor avance.

Este proceso electoral 2020-2021 será el ejercicio de democracia paritaria más importante de las mujeres, en el que también se considera el proceso electoral más grande de la historia de México. Las mujeres competirán por cargos de elección popular para alcanzar la igualdad sustantiva y concretar un 50-50 en todos los niveles de representación política en factor de paridad, por lo que será una gran oportunidad para definir una agenda paritaria en el sistema político mexicano.

La paridad garantizará a las mujeres cuando menos el 50% de las posiciones políticas que se elegirán en la jornada electoral 2021, lo que equivale a 21,368 cargos. Es decir, la mitad serán para el género femenino. Además, se disputarán en proporción paritaria 15 gubernaturas, 500 diputaciones federales, 642 diputaciones locales por mayoría relativa y 421 diputaciones locales por representación proporcional, 1,926 presidencias municipales, y otros 17,864 cargos de los ayuntamientos divididos en: 2,122 sindicaturas, 15,107 regidurías, 204 consejerías, 132 juntas municipales y 299 presidencias de comunidades.

Cada partido político determina y hace público los criterios para garantizar la paridad de género en las candidaturas a legisladores federales y locales, los cuales deberán ser objetivos y asegurar condiciones de igualdad.

Existe la convicción de que con la participación paritaria de mujeres y hombres en toda su diversidad, las decisiones públicas se enriquecerán y se acelerará el paso hacia la transformación con mayor igualdad, paz y bienestar para todas y todos.

La paridad de género hace referencia a la participación y representación equilibrada de mujeres y hombres en los puestos de poder y de toma de decisiones en todas las esferas de nuestro entorno (política, económica y social).

En nuestro país la paridad es un principio constitucional que se refiere a la participación equilibrada, justa y legal, que asegura que al igual que los hombres, las mujeres en toda su diversidad tengan una participación y representación igualitaria en la vida democrática de nuestro país.

Fue en 1955 cuando el voto de la mujer se implementó por primera vez. A partir de ahí, en cada década se avanzó respecto a la representatividad, derechos y libertades de la mujer. Cada logro ha sido siempre producto de una lucha larga, compleja y llena de desafíos que van desde lograr que se reconociera el derecho de las mujeres de votar y ser votadas hasta una paridad total con excepciones positivas en su favor.

Hay que hacer hincapié sobre la labor de la mujer mexicana en este tema, pues los importantes logros obtenidos les permiten demostrar con hechos que tienen la preparación y capacidad necesaria para ser partícipes en todos los ámbitos y puedan alzar la voz en la solución de los grandes desafíos que México enfrenta. Sin embargo, las reformas que se implementan a lo largo del tiempo son benéficas para un mayor avance.

Este proceso electoral 2020-2021 será el ejercicio de democracia paritaria más importante de las mujeres, en el que también se considera el proceso electoral más grande de la historia de México. Las mujeres competirán por cargos de elección popular para alcanzar la igualdad sustantiva y concretar un 50-50 en todos los niveles de representación política en factor de paridad, por lo que será una gran oportunidad para definir una agenda paritaria en el sistema político mexicano.

La paridad garantizará a las mujeres cuando menos el 50% de las posiciones políticas que se elegirán en la jornada electoral 2021, lo que equivale a 21,368 cargos. Es decir, la mitad serán para el género femenino. Además, se disputarán en proporción paritaria 15 gubernaturas, 500 diputaciones federales, 642 diputaciones locales por mayoría relativa y 421 diputaciones locales por representación proporcional, 1,926 presidencias municipales, y otros 17,864 cargos de los ayuntamientos divididos en: 2,122 sindicaturas, 15,107 regidurías, 204 consejerías, 132 juntas municipales y 299 presidencias de comunidades.

Cada partido político determina y hace público los criterios para garantizar la paridad de género en las candidaturas a legisladores federales y locales, los cuales deberán ser objetivos y asegurar condiciones de igualdad.

Existe la convicción de que con la participación paritaria de mujeres y hombres en toda su diversidad, las decisiones públicas se enriquecerán y se acelerará el paso hacia la transformación con mayor igualdad, paz y bienestar para todas y todos.