/ martes 30 de marzo de 2021

Populismo o apoyo social

“Si no estás haciendo la vida de alguien mejor, estás perdiendo el tiempo. Tu vida mejora al hacer mejorar la vida de alguien más” (Will Smith).

Nuestro país está cambiando. Independientemente de las filias o las fobias al presidente López Obrador, no podemos dejar de ver que en nuestro México lindo y querido ha cambiado la tendencia de privilegiar el aspecto económico por el aspecto social.

Hoy más que nunca los programas sociales del gobierno federal, con todos los bemoles que se les quiera poner, representan una forma diferente de buscar el bien común que por muchos años más bien que “común” fue el “particular” de los grandes empresarios y políticos del país.

Uno de los más fuertes programas sociales implementados por el gobierno federal lo representa la Pensión Universal para los Adultos Mayores, que a partir del mes de julio pasará disminuyendo la base de los 68 años a 65 años de edad para acceder a este apoyo, lo cual que representa alrededor de tres mil pesos bimestrales, a incrementarse en 20 por ciento anual hasta alcanzar el doble, o sea hasta seis mil pesos bimestrales en el año 2024, mandato constitucional que deberá conservarse sin importar quién asuma el poder en la siguiente administración federal.

Así, los programas sociales como la Pensión Universal para los Adultos Mayores, las becas estudiantiles Benito Juárez, los programas Sembrando Vida, Jóvenes Escribiendo el Futuro, Apoyo para el Bienestar de las Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras, Crédito Ganadero a la Palabra, Tandas para el Bienestar y Producción para el Bienestar sin duda son un impulso para las clases tradicionalmente más olvidadas del país que hoy son víctimas del populismo de un gobierno que privilegia la visión social por sobre la visión económica y que naturalmente, no tiene contentos a quienes durante todo el proyecto neoliberal gozaron de los beneficios de esta perversa visión que concentra en un puñado el poder y la riqueza de un país que pertenece a todos los mexicanos.

Aun cuando los opositores llaman “populismo” a estos apoyos, hay que señalar que cuando estos opositores se encuentran en el poder les llaman “democracia y apoyo social”. Sin embargo, no es lo mismo la “democracia y la libertad” desde la perspectiva de un empresario o prominente político de derecha, que la “democracia y la libertad” para un obrero o un campesino. Este concepto desde el primer escenario representa que las cosas que les ha permitido la acumulación de riquezas continué igual, ya que de lo contrario, “la democracia y la libertad” corren serio peligro mientras que para un obrero o campesino representa “bienestar y vida digna”.

Correo: vicmedina@hotmail.com

“Si no estás haciendo la vida de alguien mejor, estás perdiendo el tiempo. Tu vida mejora al hacer mejorar la vida de alguien más” (Will Smith).

Nuestro país está cambiando. Independientemente de las filias o las fobias al presidente López Obrador, no podemos dejar de ver que en nuestro México lindo y querido ha cambiado la tendencia de privilegiar el aspecto económico por el aspecto social.

Hoy más que nunca los programas sociales del gobierno federal, con todos los bemoles que se les quiera poner, representan una forma diferente de buscar el bien común que por muchos años más bien que “común” fue el “particular” de los grandes empresarios y políticos del país.

Uno de los más fuertes programas sociales implementados por el gobierno federal lo representa la Pensión Universal para los Adultos Mayores, que a partir del mes de julio pasará disminuyendo la base de los 68 años a 65 años de edad para acceder a este apoyo, lo cual que representa alrededor de tres mil pesos bimestrales, a incrementarse en 20 por ciento anual hasta alcanzar el doble, o sea hasta seis mil pesos bimestrales en el año 2024, mandato constitucional que deberá conservarse sin importar quién asuma el poder en la siguiente administración federal.

Así, los programas sociales como la Pensión Universal para los Adultos Mayores, las becas estudiantiles Benito Juárez, los programas Sembrando Vida, Jóvenes Escribiendo el Futuro, Apoyo para el Bienestar de las Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras, Crédito Ganadero a la Palabra, Tandas para el Bienestar y Producción para el Bienestar sin duda son un impulso para las clases tradicionalmente más olvidadas del país que hoy son víctimas del populismo de un gobierno que privilegia la visión social por sobre la visión económica y que naturalmente, no tiene contentos a quienes durante todo el proyecto neoliberal gozaron de los beneficios de esta perversa visión que concentra en un puñado el poder y la riqueza de un país que pertenece a todos los mexicanos.

Aun cuando los opositores llaman “populismo” a estos apoyos, hay que señalar que cuando estos opositores se encuentran en el poder les llaman “democracia y apoyo social”. Sin embargo, no es lo mismo la “democracia y la libertad” desde la perspectiva de un empresario o prominente político de derecha, que la “democracia y la libertad” para un obrero o un campesino. Este concepto desde el primer escenario representa que las cosas que les ha permitido la acumulación de riquezas continué igual, ya que de lo contrario, “la democracia y la libertad” corren serio peligro mientras que para un obrero o campesino representa “bienestar y vida digna”.

Correo: vicmedina@hotmail.com